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╎Yoongi era una preciosa chica híbrido la cual solo se dedicaba a cumplir su trabajo en el bar donde cumplía sus horas de trabajo.
╎Llendo de aquí para alli, siendo coqueta con sus clientes, sentándose en...
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Min Yoongi.
Una linda chica híbrido de 23 años la cual vivía en la grande ciudad de seul, con muchos amigos y buenos familiares, con una buena vida, universidad terminada, un muy buen salario, una bonita casa y un muy buen trabajo.
Oh bueno, eso le decía a sus familiares cuando preguntaban.
Min Yoongi era una linda chica híbrido vaca, con unos preciosos muslitos gorditos, unas caderitas anchas, una pequeña cintura y grandes, grandes pechos. dos tiernas orejitas en su cabello rojizo y ondulado y una tierna colita en su parte trasera, una actitud tímida pero bastante energética y dulce. Mientras que en su trabajo tomaba una personalidad coqueta y juguetona por sus fieles clientes quienes iban solo por ella.
No se confundan, Yoonie no era stripper o algo por el estilo.
Simplemente ella trabajaba en un bar.
Solo que era un bar algo..
"Peculiar"
—¡Buenos días! —Saludó la pálida entrando al local, saludando a algunos de los clientes al igual que sus compañeras y los que servían y preparaban los tragos y comidas.
—Buenos días Yoonie, ve a cambiarte bonita, ya te toca.
Yoongi asintió bastante alegre y fue directo al vestuario del lugar para comenzar a cambiarse con la ropa del lugar, percatándose de que algunas de sus compañeras hacían lo mismo mientras que otras se cambiaban para irse.
—Ugh, odio esta ropa —Suspiró una de las chicas mientras que su amiga asintió dándole la razón.
Y no podía culparlas, la simple vestimenta eran shorts cortos de color negros muy apegados a sus cuerpos, unas medias de igual color las cuales le llegaban a sus muslos y un top el cual dejaba al descubierto el estomago de color vino junto a unos tacones o zapatos, eso ya dependía de la empleada.
Aunque para Yoongi era algo diferente, ya que para ella eran exactamente lo mismo solo que cambiando el top por uno que con suerte tapaba sus pechos con un estampado blanco con manchas negras, haciéndole honor a su animal natural.
Obviamente los dueños del local le preguntaron si no le molestaba, pero como Yoongi sabia que por eso le pagarían aun mas no se negaba, le gustaba tener un trato especial en aquel lugar aunque lo negara.
—¡No me tapa nada!
—¡Oh dios, no te quejes! ¡Mira a la pobre Yoonie que tiene que salir con eso que apenas y tapa su cuerpo!
Ambas chicas miraron a Yoongi quien desvió la mirada con algo de pena, la primera chica rápidamente se disculpó con ella pero Yoongi no podia dejar de sentirse una rarita allí.
Entendía que no era el mejor trabajo del mundo, o la mejor vestimenta o siquiera el mejor trato..
¿Pero enserio era tan malo que le gustara su trabajo?
