Capítulo uno

53 10 13
                                    

—¿En serio? Últimamente lo he visto pasearse por el club de teatro—me comenta Luz en un audio de instagram—ya sabes, chicas lindas y carismáticas con trajes de princesa.

"Ay Jesús" suspiro mentalmente, guardándome los audífonos en el bolsillo y pegando mi cabeza a la mesa de la cafetería, soltando un sonido hueco. Sí, lo admito, mi maldita cabeza está hueca. Tan hueca, que por un sólido momento olvido que la mesa en la que la apoyé está sucia, y no lo noto hasta que siento migas escurrirse por mi frente. No evito chillar ruidosamente antes de pasarme la manga por la cara frenéticamente. ¡Qué antihigiénico!

—¡Wow! Cálmate.

Me dice Urata. La verdad, me lo dice todos los días en cualquier contexto posible, pero nunca me calmo. Definitivamente no sé calmarme y no procuro aprender esa habilidad pronto.

—¿Cómo quieres que me calme? ¡Mi maldito mejor amigo me abandonó por un montón de chicas!—Chillo—por faldas, Urata-kun, ¡faldas! ¡Yo también uso faldas! ¿Por qué no me persigue a mí?

Nuevamente estruendo mi cabeza contra la mesa, pero ya no tan fuerte como antes. Los errores se comenten una vez, ah, si los repitieras ya sería pecado.
Pronto siento unos dedos pequeños acariciar mi nuca sin palabras de acompañamiento. Urata es así, un consuelo silencioso. Todo lo contrario a mis otros amigos, exceptuando a So... Bueno, él últimamente también se ha vuelto ruidoso y extrovertido. Supongo que el único conocido retraído que me queda es este pequeño chico a mi lado. Un buen amigo, sí.

—Tal vez se cansó de perseguirte a ti—me dice, sin dejar de tocar mi cabello. Yo gruño en respuesta, restregando mi frente en mi suéter azulado. Últimamente me arrepiento de mis altas expectativas de los demás más seguido de lo normal. ¿De repente todos en verdad son algo completamente diferente a lo que aparentan ser?—no puedes esperar que todos te idolatren por siempre.

—No espero que me idolatren—susurro. No es mi intención sonar desanimado, pero lo hago. Es inevitable. No soy bueno ocultando mis sentimientos una vez que comienzo a hablar—no es como si quisiera un sirviente o algo así. Sólo quiero a mi mejor amigo de vuelta.

Urata ríe.
—Pero si él no se ha ido a ningún lado, Mafu. Él sigue yendo contigo a ese deplorable club de jardinería cada tarde, te da los buenos días y las buenas noches todos los días, ¡e incluso te invita a comer al menos tres veces a la semana! ¿qué más esperas de él? ¿Que te pida matrimonio y se vuelva un marido hogareño que no sale de casa para servirte a ti?

Bueno, creo que podemos reducir la cifra de amigos retraídos y callados a cero. Este hombre acaba de usar todas sus palabras anuales en medio minuto sólo para reprocharme. Increíble. Completamente increíble.

—Tal vez, eso estaría bien—bufo, y aparto su mano de mi cabeza—si lo pones así suena como si estuviera abusando de él.

—En efecto, lo haces—responde, sin siquiera pensarlo.

Pero a pesar de que sé que tiene razón, no puedo evitar desarrollar más su idea de Soraru siendo un sometido marido hogareño un poquito más antes de entrar a clases. Como mi madre alguna vez me dijo, "¡fantasear un poco antes de una tarea difícil ayuda a concentrarte!" Lo cual es una completa mentira como la mitad de las palabras que salen de la boca de mi mamá, pero bueno, a veces tienes que aferrarte a algo aunque esté mal, ah.




—¡Mafu-san, ten un buen regreso a casa!

Le agradezco escuetamente a las chicas que hablaron, pasando rápidamente por su lado. Arreglo un poco mi corbata chueca y peino con los dedos mi cabello teñido, mientras me concentro en no tropezar con mis cordones desabrochados cuando veo a mi amigo atorado en un grupo relativamente grande de personas. Todos mayores que yo. Deben ser de su clase, supongo. Antes de su repentino cambio nunca esperé verlo relacionándose con ellos.

Esperaría verlo incómodo, con al menos una pequeña señal visible para sacarlo de ahí heroicamente, pero no ocurre. Sus pies bien plantados en su sitio, la mitad superior de su cuerpo apoyada en la pared cerca de la entrada, y sus manos siendo usadas como método de ayuda a lo que sea que esté hablando. Su rostro se ve relajado.

Él en verdad luce feliz ahí.

La única persona que puedo reconocer de les chiques que le rodean es Luz, el tipo de los audios de hace rato. Tengo la suerte de llevarme bien con la mayoría de las personas con las que he cruzado palabra alguna vez, así que obviamente, uso eso a mi favor muy seguido. No es un talento que deba desaprovecharse, ¿verdad?

Quise acercarme a saludar, pero Soraru nunca me miró, así que sólo pasé por su lado hacia la salida. Este tipo de actitud desapegada me recuerda a alguien, pero no sé a quien. Sus ojos no chocan con los míos, y su expresión corporal no se movió ni un centímetro. La adorable y seria ovejita que me seguía a todos lados sin rechistar se ha vuelto independiente de un día para otro. ¿Es así cómo se siente ser ignorado? Debería tomar nota, las emociones humanas son algo de lo que aprendes un poco más cada día.

Pero la verdad, no me gusta aprender así.

Desearía que él sonriera sólo para mí.




Esperé sentado en una maceta vacía un par de minutos, pero él no llegó, así que recogí mi mochila del piso y me dirigí a la salida, lo suficientemente enojado como para sacar mi teléfono y quejarme. El lindo adorno colgante de gatito que Soraru-san me dio hace algún tiempo sigue colgado en la funda, pero en vez de alegrarme, me hace hervir la sangre. Frunzo el entrecejo, escribiendo agresivamente en la pantalla.

"¿Estás enojado conmigo?" Le pregunto, en un mensaje.

"No, ¿por qué?" Me respondió a los segundos.

"No viniste al club hoy, y siempre vienes. ¿No podías al menos avisarme para no quedarme como idiota esperando? Me siento estúpido" Le respondí.

"Iba a decirte, pero lo olvidé. Pero ahora ya lo sabes, no iré hoy, saldré con unos amigos, lol" Dijo.

"Vete a la mierda" me apresuré a enviar, pero él no respondió. Él no suele responderme todo lo que le mando, pero por alguna razón, esta vez me dolió.

Por primera vez en mi vida, ser rechazado hizo que el persistente nudo atrapado en mi garganta se endureciera lo suficiente como para que mis ojos piquen, mi nariz se enrojezca y mis ojos, lloren.

//

holamm no quiero hacer los capítulos muy largos pk igual la historia va a ser corta jiji espero que les guste, no estoy acostumbrado a escribir cosas así aa realmente prefiero tipo hurt/comfort y no sólo woof woof grr bark bark pero bueno, hay que variar ah. nos vemos prontoo <3

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 19, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Theater | soramafu [cancelado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora