Capítulo 45.

6.2K 472 66
                                    

Una persona vive tres vidas: La primera termina con la pérdida de la ingenuidad, la segunda con la pérdida de la inocencia y la tercera, con la pérdida de la vida misma. Es inevitable que atravesemos las tres etapas

•~•~•~•

Casa de Myoui Mina.
Martes.
15:30 hs

-Aquí estoy... - dice Jimin, mirando a su madre, desde el sillon en el que estaba sentado -¿Me dirás de una vez que sucede? ¿Que querías decirme?

-¿No quieres un té o tal vez un café...?

Jimin bufa.

-No, gracias.

Jimin había llegado a casa de su madre hace diez minutos atrás y desde que puso un pie dentro, su madre no había parado de dar vueltas. Jimin quería saber porqué lo había citado y los rodeos de su madre lo estaban poniendo de mal humor. Su paciencia no era la mejor ahora que estaba embarazado.

-Has cambiado muchísimo desde la última vez que te ví.

-Si, supongo. - suspira -Ahora, ¿puedes ir al punto de este encuentro?

-No seas así. - le reprocha Mina.

-¿Así cómo? Madre, sólo dime lo que tengas que decir y listo. Tengo los minutos contados, no puedo perder el tiempo, tengo cosas que hacer. JungKook pasará por mi en un rato.

-Detesto que nunca tengas tiempo para mi pero, para otras cosas si.

-No tienes idea de lo que dices.

-No miento.

-Creo que estás exagerando pero está bien, intentaré visitarte mas seguido.

-Por favor, hazlo. No tienes idea de como te extraño. Sabes, a veces me pregunto... ¿En que momento creciste tanto? Te independizaste e hiciste tu vida pero, para mí siempre serás mi pequeño bebé.

-Oh~ mamá, no digas esas cosas.

-Si existiera una maquina del tiempo, sin duda volvería el tiempo atrás, cortaria tus alas, intentaría minimizar tú sed por la aventura y tu locos sueños por los cuentos de hadas, por la única razón de tenerte junto a mi muchísimo tiempo más.

Jimin sabía que su independización a temprana edad había afectado a su madre de sobre manera y a veces le causaba pena, ¿pero que podía hacer al respecto? Nada. Nació con alas y no podía deshacerse de ellas.

Mina con Jimin nunca pudo vivir ni sentir lo que una madre experimenta con su hijo.
Jimin a sus cinco años hacia solito lo que muchos niños a su edad todavía no hacían; se higienizaba por su cuenta, hacia sus deberes del kinder sin tener una orden adulta, limpiaba su cuarto, curaba sus heridas si se lastimaba, la mesada que recibía todos los meses la ahorraba y luego si tenía algún antojo por alguna platillo delicioso o un juguete nuevo, se lo compraba él mismo, entre muchas cosas más que sorprendían a Mina a medida que lo veía crecer y a todo aquel que lo conociera. Y así, con el pasar del tiempo, en ciertos aspectos Jimin se volvió un adulto atrapado en el cuerpo de un niño porque aunque Jimin sea un adolescente a punto de cumplir la mayoria de edad para Mina siempre sería un niño pequeño que creció demasiado rápido.

-Madre, tendrías que matarme y desear que vuelva a nacer, porque de otra manera jamás podrás borrar lo que soy. - Jimin bufa -Lo siento si no fui el hijo que esperabas pero, yo no pedí ser así, sólo pasó.

-No, disculpame tú a mí. - Mina agacha la mirada -Tienes razón, tú no pediste ser así, sólo pasó. Será difícil pero, intentaré aceptarlo. Es lo que es.

Love Maze ➳ KookMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora