El diario de una fea

Esposos

Después de una noche de amigos, plática y de más, era la hora de despertar y hacer frente a su nuevo destino, era el día de su boda, un día que sería mágico e inolvidable, su amor se sellaría frente al juez que los aria uno ante los ojos de los demás.

Oswaldo: te vez hermosa Cat, pareces una princesa, me alegro que aceptarás la propuesta de Gabriel, el siempre te amo y estuvo para ti

Cat: lo sé, estoy nerviosa, lo quiero mucho, el me hace feliz

Oswaldo: el te dará todo lo que yo no pude, se que lo nuestro ya fue y seguimos siendo los mejores amigos, pero tenía que decir esto.
       Me arrepiento de haber sido tan ambicioso y preferir dejarte para buscar mi futuro, eres una gran mujer, no sabía lo que perdía en esos momentos, pero gracias a eso tú estás hoy aquí apunto de casarte y ser feliz con mi mejor amigo, los tres logramos nuestro objetivo, y más de nuestros sueños, me alegro porque tengo a mi esposa y pronto seré papá, tenemos todo lo que deseamos

Cat: es cierto, encontraste a la mujer que es perfecta para ti, voy a casarme con el hombre que fue mi primer amor, quien está conmigo cuando lo necesito y me apoya en mis decisiones y me ama incondicionalmente.

Oswaldo: lo importante es que lo ames a el tanto como el te ama a ti

Cat: seremos muy felices, de eso estoy segura, somos el uno para el otro

Oswaldo: si, así es, te dejo terminar de arreglarte, iré a ver cómo está el novio, no vaya a ser que se arrepienta

Cat: Ollé que malo eres jajajaja

Minutos después En otra habitación

Oswaldo: hola hermano, cómo estás, como te sientes.?

Gabriel: nervioso, feliz, tengo dudas sobre esto

Oswaldo: dudas de que.?
Ustedes se ven muy felices

Gabriel: yo creo que ella podría aún sentir algo por ti

Oswaldo: olvida eso, acabo de hablar con ella y aclaramos todo entre nosotros, lo nuestro quedó en el pasado, y este es su tiempo, ella está muy segura de casarse y amarte, porque ahora dudas, acaso no sientes lo mismo que antes.?

Gabriel: la quiero, y realmente me hace feliz, quiero que esté en mi vida, pero temo no ser suficiente

Oswaldo: ya te lo dije, si ella está segura de casarse, porque dudas tu

Gabriel: entonces en verdad ella te dijo que quiere hacer esto

Oswaldo: si, nosotros somos amigos, y como te dije aclaramos que lo que pasó antes entre nosotros quedó atrás, solo una hermosa amistad hay, a si como la amistad que tengo contigo

Gabriel: gracias, se que no soy sentimental, pero te quiero mucho amigo y tú y ella son todo lo que tengo y pase lo que pase no quiero perderlos

Oswaldo: no lo Aras, como amigos, hermanos, te pido que la ames, cuides y no la agas sufrir, no quiero problemas entre ustedes que no seré su árbitro entendido.?

Gabriel: claro, entonces vamos a fuera ya será hora de decir acepto

Oswaldo: si, las sensaciones que tendrás son inexplicables, es hermoso, eso lo sentía cuando me case y estuviste conmigo como hoy estoy para ti, te quiero mucho hermano

Gabriel: ya dejemos las cursilerías

Oswaldo: si, pero antes un abrazo

Después de ese abrazo, se fueron a esperar a la novia frente al juez que impartiria la boda, los pocos invitados estaban presentes, el jardín hermoso y la decoración para envidiarse, será un recuerdo muy dulce, llegó la hora donde el juez pide las firmas de los novios, y así se cierra el matrimonio con un lindo beso, las fotos quedaron a cargo de un colega de Cat muy bueno en eso y todos estaban felices.

Vivan los novios

Gabriel: soy tan feliz a tu lado, gracias por aceptar casarte conmigo, te aseguro no te arrepentirás

Cat: ambos daremos lo mejor, nos conocemos bastante bien y nos queremos mucho.

Después de una luna de miel llena de sexo apasionado, besos candentes y caricias tiernas llegó la hora de regresar a casa y decidir en cuál casa vivirían, Gabriel después de todo este tiempo seguía viviendo en la misma casa de el tiempo cuando se conocieron, más sin en cambio ella había comprado una casa más amplia aún que era ella sola, pero amaba tener en su casa su lugar creativo dónde diseñaba su ropa, editaba fotos y tenía varios gatitos que amaba y cuando salía dejaba a cargo de una de sus amigas, ambos optaron por vivir en la casa de ella ya que se podrían adaptar más, pues la casa de el era más pequeña y no habría lugar para adecuar el estudio de ella, estaban felices y viendo realizados sus sueños,   el tiempo pasaba y ellos decidieron esperar para tener hijos, por ahora querian seguir trabajando y tener un futuro muy bien asegurado para formar una familia, el solo se veía con un hijo, más sin embargo ella quería tener dos, pero eso lo discutirían después, tenían algunos años para pensarlo, mientras Oswaldo esperaba con ansias el nacimiento de su hijo, estaban a días de conocerlo, pero para el las cosas no serían buenas.