Me sentía fuera de lugar ¿Por que ahora? Después de tantos años, después de las incontables veces en las que me pase llorando pensando que por mi culpa ella se había ido... eran tantas cosas que se me hacia difícil de procesar....
Después de unos minutos escuche que alguien se acercaba a mi, por unos segundos sentí un poco de miedo por si se trataba de mi papá, pero rápidamente quite ese sentimiento al ver que era Erick, se quedo parado delante de mi, tenia una expresión de preocupación, me levante y lo abrace pronto sentí sus brazos alrededor de mi y nuevamente comencé a llorar, no dijo nada solo me abrazaba, quería parar de llorar pero no podía... Esta situación me superaba en todos los sentidos.
- - - - - - - - - - - - - -
No tenia el control de nada y no sabia como lograr tenerlo, ya estábamos sentados ninguno había dicho nada.... Ya no estaba llorando solo me quede mirando a las personas que pasaban, aun sintiendo un fuerte nudo en mi garganta tome un poco de valor y comencé a hablar, rogando por que mi voz no se escuchara tan mal y por que no me soltara a llorar.
Tn___: Lamento haberte hecho venir así, no sabia a quien pedirle que me ayudara, mis amigas ya saben mi historia y no quise decirles, solo pensé en ti.
Erick: No te preocupes, siempre que lo necesites estaré aquí, me preocupe mucho cuando me escribiste y aun lo estoy ¿Quieres contarme?
Tn___: Es algo muy difícil para mi, pocas personas lo saben.
Erick: Si no puedes contarme lo entiendo, solo dime como puedo ayudarte, no me gusta verte así
Tn___: Te quiero contar, necesito hacerlo...
Las personas que sabían mi historia, solo sabían lo que yo quería contar aunque creo que guardarme cosas por fin me habían llevado a un limite.... Sentí como mi respiración se aceleraba de solo recordarlo... Erick seguro se dio cuenta, acerco su mano a la mía acariciándome lentamente provocándome una sensación de apoyo, suspire e inicie a hablar.
Tn___: Yo tenia seis años, recuerdo que estaba jugando con mi casa de muñecas imaginaba como seria mi vida si yo fuera una muñeca, noches anteriores mis padres peleaban mucho, mi madre gritaba diciéndole que se arrepentía de todo lo que había hecho con el incluida yo, decía que sus planes no los podía hacer con nosotros, mi papá trataba de buscar soluciones diciendo cosas que podía mejorar pero ella decía que nada era bueno para ella.... Esa noche me fui a dormir llorando, en medio de la noche escuche ruidos, me desperté y me asome por mi puerta, vi salir a mi madre de su habitación llevaba unas maletas, la vi caminar hacia la puerta.... Yo la quería mucho, muchos días esperaba que se sentara a platicar conmigo o a jugar pero nunca lo hizo, la vi irse.... Cuando cerro la puerta corrí lo mas rápido que pude a abrirla, gritándole que no se fuera, cuando salí de casa ella ya estaba en un auto, me miro y se fue...
Intente correr detrás del auto pero mi papá salió y me detuvo para después abrazarme y decirme que todo estaría bien, la vi alejarse hasta que la perdí de vista, llore hasta quedarme sin lagrimas, me había visto y no se quedo...
Pasaron los días mi papá perdió su trabajo por estar cuidándome, habían días en los que no teníamos nada de dinero, un tiempo me encargaba con algunas vecinas, no lo veía hasta la noche yo solo quería estar en mi casa, quería que las cosas cambiaran, con el tiempo nos fuimos acostumbrando comencé a quedarme sola en casa, consiguió su actual trabajo y pocas son las veces que esta todo el día en casa, conoció a Mónica quien ha sido como una madre para mi...
Hoy en la mañana ninguno estaba en casa, solo me dejo una nota diciéndome que tenia que hablar conmigo después de clases, cuando llegue ahí estaba ella, los recuerdos pasaron sin parar por mi cabeza, me sentía tan mal que salí corriendo y bueno... termine aquí.

ESTÁS LEYENDO
Ayúdame
Fiksi PenggemarTodo empezó cuando llegaste y mi afán por ayudar se hizo mas intenso, me empeñe tanto en querer salvarte que termine cayendo contigo, per hubo una gran diferencia, saliste de repente sin intención de ayudarme.