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—¿A dónde?-les pregunte

—vamos a salir a comer

—bueno—dije sin mas

—en treinta minutos nos vamos— alfredo informo mientras hablaba con alguien por un radio

—okey me voy a arreglar—subí las grandes escaleras para ir a mi habitación.

Termine de ponerme los zapatos que eran de color negro con algunos detalles en blanco

—nos vamos—grito alguien desde la planta baja

me vi por última al espejo antes de dirigirme donde se encontraban los hermanos.

Subimos los cuatro a la gran y lujosa camioneta con vidrios polarizados,a la cual le seguian otras cinco del mismo tipo con gente de seguridad

llegamos a el acogedor pero fino restaurante,me ayudaron a bajar pues el auto era muy alto para mi

sentía una mirada muy pesada sobre mi pero no dije nada y seguí caminando a la par de los chapitos

—ese pendejo que le pasa

—¿de que hablan?—pregunte confundida

—de el wey ese,que párese que te quiere comer con la mirada—volvio a hablar ivan

ovidio puso su brazo en mi cintura de manera posesiva

—¿que le vez pendejo?—pregunto en tono alto dirigiéndose a aquel hombre

el hombre paso de tener una mirada de deseo a una de terror al ver de quien se trataban mis acompañantes.Después de ese incómodo momento por fin nos sentamos en una linda mesa para cuatro

—buenas tardes soy Kimberly y hoy los estaré atendiendo—dijo la mujer mientras miraba seductoramente a los hermanos

—a mi me puedes traer_________

—lo mismo solo que sin_____—la mesera anotaba en una pequeña libreta mientras se movia exageradamente haciendo que sus grandes senos rebotaran

—plebe a mi me trae_____—le pidió ovidio,yo solo miraba

—a su hermanita que le pongo—entre habrí la boca sorprendida por su comentario tan sínico

los tres rieron por aquel comentario y me volvieron a ver

—yo no quiero nada gracias—hable de mala gana

—entonces ahorita vengo con sus cosas—se retiro moviendo sus caderas exageradamente

—¿no tienes hambre?—me pregunto como si nada alfredo

—no y tampoco tengo ganas de hablar con ustedes.

—Aqui tienen la cuenta—regreso la tal kimberly esa

ovidio pago y nos retiramos pero sin antes la vieja aquella dejarle un pequeño papelito en la bolsa de su camisa,en el camino nadie hablo,como pude baje de mala gana de la gran camioneta,me metí ignorando a los hermanos.

|...|

Mientras la menor entraba a la casa realmente enojada,los hermanos se reían de su comportamiento por lo sucedido en aquel restaurante

Mientras la menor entraba a la casa realmente enojada,los hermanos se reían de su comportamiento por lo sucedido en aquel restaurante

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Andaba algo perdida por aquí pero aqui les dejo este capitulo♡

posiblemente tenga muchas faltas de ortografía por que no corregí asi que perdón

Tengo nueva novela es la continuación de infiel por si les interesa

-con mucho cariño princess

De los Guzmán-GDonde viven las historias. Descúbrelo ahora