Pequeña historia para conmemorar el año nuevo lunar (subiéndola un poquito tarde, lo siento)
Comencé a escribir sin mucho en mente, solo me dejé llevar por la melodía del su balada~ sencillo, pero con muuuuucho amor para ellos!!
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Esta es la historia de amor entre un dios marcial y un rey fantasma.
Uno nació como un príncipe prodigio y venerado, el otro creció en la miseria y en el maltrato de las calles. Sin embargo, a pesar de sus notables diferencias, el destino los hizo coincidir. Uno por ser bendecido con abundante fortuna, el otro por haber nacido bajo el título de la más horrible desgracia.
Entonces, cuando el joven príncipe ascendió a los cielos a una edad tan temprana, el pequeño de rojo, sucio y maltratado, convirtió a su dios en su única razón de vivir.
La guerra arrasó con la nación entera, llevándose vidas y cualquier pequeño rastro que pudiera dejar atrás, y el príncipe que desafió a los cielos fue desterrado y recibió el desprecio de su gente por la que tanto se sacrificó. Se escondió, huyendo como un sucio roedor, hasta que ya no le quedó nada más, ni siquiera una razón para vivir.
Entonces, un soldado enmascarado asumió sus pecados, siguiéndole desinteresadamente, y un hombre humilde le ofreció un gesto amable, un rayito de esperanza, entre tanto desprecio... Haciéndole retomar la más pura fe a la humanidad. Porque solo un acto honesto fue suficiente para enseñarle que no todo estaba perdido y no todos poseían un corazón podrido.
Ochocientos años más tarde el dios de la desgracia, el inmortal que recoge basura, de quienes se burlaban y se alejaban se encontró casualmente con un muchacho despreocupado entre el heno mientras viajaba de regreso al santuario que fundó para sí mismo.
San Lang, como este se hizo llamar, era muy sabio para la edad que aparentaba. Tenía una respuesta para todo y una valentía fuera de este mundo... Por supuesto, a Xie Lian no le tomó mucho darse cuenta de que este no era una persona común, y tampoco le cayó de sorpresa descubrir que se trataba del mismísimo rey fantasma. El "Lluvia Carmesí que persigue una flor" del que se le advirtió no acercarse, ni siquiera mencionar, se había convertido en una persona especial para él, un amigo luego de tantos años de resignada soledad.
Con el paso del tiempo muchas cosas se aclararon, desmantelando al corrupto cielo, y San Lang estuvo a su lado desde entonces. Xie Lian apreciaba su desinteresada compañía, especialmente como respetaba su espacio y parecía comprenderlo como nadie más, y cuando supo que sus pasados estaban más entrelazados de lo que jamás habría imaginado... Su corazón despertó.
Y mientras Xie Lian se abrazaba al cuerpo frío del rey fantasma, su querido San Lang que lo cautivó con todas sus grandes virtudes y sus pequeñitos defectos desde el principio, no podía dejar de pensar: es increíble que arriesgaras tu vida por siempre acompañarme.
El pequeño de rojo al que le había dicho que viviera por él, el joven y delgado soldado que luchó con inmensa valentía a su lado, el fuego fantasma reacio a dejarlo solo cuando estaba tan roto, la presencia enmascarada que lo siguió sin juzgar... La poderosa calamidad que había tomado como esposo con todo su corazón rebosado de amor por su creyente más leal.
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Desde que su señor contrajo nupcias, en una ceremonia que no pudo pasar desapercibida del gran espíritu de los residentes, Ciudad Fantasma se volvió muy fiestera. Todo era una excusa para celebrar, no solo la alegría de su señor, sino también honrar al dios que se ganó sus respetos. Pero en especial... ¡El gran amor de la pareja contagió a cada residente a celebrarlo en cualquier oportunidad que se presentara!
Xie Lian había dejado muy atrás la buena vida aristócrata, acostumbrándose a lucir más humilde y cómodo, pero de vez en cuando se vestía con finos atuendos que su San Lang le obsequiaba. A esas alturas la vergüenza se había esfumado por completo, costándole al principio vestir algunos lujos, después de todo ¡Él era el esposo del rey fantasma! Y mostrarse como tal, de acuerdo a la ocasión, ya no le incomodaba siempre y cuando Hua Cheng estuviera a su lado tomándole de la mano.
El bullicio de las calles era vivaz, un ambiente alegre y colorido, y Xie Lian se dejaba llevar de la mano por su aclamado esposo que nunca dejó de prestarle atención a pesar de tantas distracciones a su alrededor. Pasearon, comieron y se divirtieron, compartiendo con los alocados fantasmas, y luego de un par de horas Hua Cheng lo alejó del foco del festival. Sus manos permanecían unidas, indispuestas a soltarse como si su único deseo fuera recuperar todos los años perdidos, y se dirigieron hacia las instalaciones de mansión paraíso. Dentro la estancia permanecía bien iluminada, más de lo habitual, especialmente un camino en especial que les daba una cálida bienvenida...
En Ciudad Fantasma no se distinguían las estaciones del clima, luciendo casi siempre igual, pero en el mundo de los mortales el invierno estaba en pleno apogeo. Allá se hablaba del fin del ciclo lunar, dando pasado a una nueva época, y Xie Lian consideró que la nueva celebración de los fantasmas se ajustaba con la que mantenían los vivos en esos instantes. Entonces, miró directamente al hombre a su lado... Haber acabado otro siglo junto a este, en armonía y alegrías, era la más grande fortuna que podía tener.
Y su distracción en Hua Cheng, del que nunca negaría su gran atractivo, evitó que se diera cuenta de su nuevo entorno. Su esposo lo miraba de vuelta, dedicándole una pequeña sonrisa que solo estaba apartada para él, invitándole apreciar la estancia que fue preparada para los dos...
Había un lago, una mancha de agua oscura que se perdía más allá, decorado por cientos de flores de loto que danzaba de aquí a allá ¿Lo resaltante? ¡Cada una estaba acompañada e iluminada por una mariposa fantasma! Sin lugar a dudas, era un espectáculo hermoso y deslumbrante.
Xie Lian quería decir muchas cosas, tantos cumplidos por la bonita sorpresa, pero sus alborotadas emociones no lo dejaban pronunciar ni una sola palabra. A cambio, alcanzó ambas manos de su San Lang y se alzó para encontrarse con los labios fríos y acogedores que siempre lo recibían con una sonrisita y el mismo amor transmitiéndole mucho más que halagos y agradecimientos.
Y rodeados de destellos platinadas, varias mariposas volaban ahora a su alrededor, sus labios danzaron en besos dulces y profundos al compás de las flores en el agua.
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Notas Finales: ¡Gracias por leer! cualquier error o confusión con respecto a los datos del canon, díganmelo para corregir~
¡Espero les haya gustado!
Hay un AU muuuuuuy particular del que tengo demasiadas ganas por trabajar para ellos, veremos si sale muy pronto XD lo quería de auto-regalo de cumple, pero para este 20 ya no me da tiempo de escribir.
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La balada de Lian y Cheng
Fanfiction[Hualian] "...Es increíble que arriesgaras tu vida por siempre acompañarme"