Obedece a Mommy Ꞝ Dahmo • Sahyo

Capítulo 9

Jihyo

Mi cabeza dolía como el carajo, demasiado papeleo y reuniones y para completar al llegar a la casa debía ver mi maratón de Disney con los gemelos, bueno, eso no suena tan mal, recordar a los gemelos me pone feliz, amo los niños y amo a mis sobrinos.

-¿Puedo ir a tu casa?, quisiera conocerlos -asentí inmediatamente a Jeongyeon mientras sonreía.

Agarré mi bolso y celular y camine junto a Jeongyeon al estacionamiento y cada una se subió a su auto, maneje a mi casa con el auto de Jeongyeon atrás siguiéndome, minutos después llegamos.

-Bienvenida a mi casa Jeong, por favor bendícela, oh espera, que eres una pecadora teniendo sexo en baño -la moleste y ella rodó los ojos riendo pero todo fue a la verga cuando pre visualicé a Sana en la puerta de mi casa, Jeongyeon y yo corrimos hacia ella lo más rápido posible- se puede saber ¿qué diablos haces? ¿Y cómo diablos sabes dónde vivo Sana? -le pregunte bruscamente, ella me miraba con sorpresa

-Yo venía....a disculparme...por lo ocurrido -Sana miró hacia abajo, juro que parecía un cachorro regañado pero este no era momento de ver lo adorable que ella es-

-Bien ya lo hiciste, adiós -abrí un poco la puerta y para mi desgracia los gritos de los gemelos empezaron a sonar-

-Jihyo, enserio perdóname -Sana trato de acercarse, abrí la puerta un milisegundo para que Jeongyeon entrase, ella calmaría los gritos de los gemelos, yo como pude trate de empujar y alejar Sana- ¿y esos gritos?, ¿qué tratas de ocultarme? -me puse nerviosa-

-Ya vete, ¡joder! -la empujé con fuerza obteniendo que se tropezara y cayera al suelo, mi corazón se apretó al escucharla sollozar, nunca la había escuchado llorar-

-Me iré...pero si aceptas una salida amistosa conmigo mañana -Sana paso sus manos por su rostro sacando las pocas lágrimas que logre captar-

-¿Qué cosas dices? -reí sarcástica pero me detuve cuando Sana me acorralo contra la puerta de mi casa, su respiración se volvió pesada y la mía también-

-Por favor, solo eso y no te volveré a molestar jamás -tragué saliva y cerré los ojos al sentir su respiración chocar en mi cuello, ella lo hacía a propósito-

-Te odio tanto.....sólo una salida y será el fin de nuestra historia Minatozaki Sana -dije la manera más firme que podía, Sana se alejó de mí y me miro con una radiante sonrisa-

-El fin de nuestra historia, pasó por ti a las 9:00 am, adiós Park Jihyo -Sana se volteó y se subió a su auto para luego marcharse-

Suspire entrando a la casa, Chaeng, la niñera, recogía sus cosas mientras Jeongyeon estaba en el sofá con los gemelos, ella les leía un cuento mientras escuchaban atentos.

-Hola Jihyo -saludo Chaeng con una sonrisa-

-Hola Chaeng -habíamos agarrado mucha confianza y es que desde el primer día, que fue ayer, los niños no dejan de hablar de ella como su mejor amiga-

-Ya me iré, que tenga una linda noche -hizo una reverencia, los gemelos al percatarse corrieron hacia Chaeng y la abrazaron-

-Te quiedo mucho Mejor amiga -Yeji y Hyunjin le dieron un beso en cada mejilla haciendo la chica reír, Jeongyeon y yo también reímos-

-Yo los quiero a los dos y mucho -Chaeng beso sus cabezas y luego se marchó-

-¡Tía Jihyo! -ambos gritaron y me abrazaron, yo también los abrace y bese sus cabezas-

-Tía Jihyo, conotimos a nuesta ota tía, tía avestruz -Yeji hablaba emocionada, yo al escuchar "Avestruz" no pude evitar reír viendo como Jeongyeon rodaba los ojos y se acercaba a nosotros-

-Jihyo, son un encanto, Dahyun debe ser muy feliz -Jeongyeon de agachó y abrazó a los gemelos para luego besar la mejilla de ambos y hacerlos reír-

-No sólo ella es muy feliz, estos dos mocosos se volvieron unos rayitos de sol en mi vida, dos rayitos de sol que se van a dormir, si Dahyun descubre que están despiertos a esta hora me matara -escuche la puerta abrirse y luego note la mirada burlona de Jeongyeon y supe que Dahyun estaba detrás mía-

-¿Por qué los gemelos no están dormidos?, es demasiado tarde, Park Jihyo -Dahyun me agarro de la oreja haciendo que los gemelos rieran, falsos- Jeongyeon, ¿los llevarías a dormir? -Jeongyeon asintió y llevo a los gemelos a sus habitaciones-Dios Jihyo...Momo fue a mi sesión de fotos, hubieras visto su cara cuando me miro -no pude evitar reír mirando como Dahyun se lanzaba en el sofá y gritaba con el rostro en la almohada-

-¿Cómo la trataste? -le pregunte sentándome en el sofá también-

-Quería que supiera que no me afecta para nada verla, que soy una mujer que sabe de dónde viene y para donde va -ambas reímos, luego apareció la risa de Jeongyeon-

-Bueno....yo tengo una salida con...alguien -comenté obteniendo la atención de mis dos amigas- Minatozaki Sana y antes de que digan algo les aviso que tuve que aceptar o descubriría a mis sobrinos -Dahyun me abrazo y agradeció- no hay de que Dahyun, tu harías lo mismo por mi -Dahyun empezó a silbar y le pegué en la cabeza-

A la mañana siguiente

-Mmm....que lindo día -bostecé levantándome de mi cama y caminando a la cocina soñolienta- ¿Qué hay de comer? -pregunte-

-Jihyo, tu cita es a las 9, son las 8 -abrí los ojos como platos y corrí al baño a darme una buena ducha y luego vestirme-

-Tía Jihyo, ¿tene una cita? -preguntó Yeji mientras me maquillaba-

-No es una cita, bueno si, bueno no, es sólo una salida amistosa -respondí besando su cabeza-

-Si una salida amistosa, con tu ex -mire de manera asesina a Dahyun la cual solo reía-

-Lo dice la que modela para su ex - contraataque y ella me fulmino con la mirada esta ve-

El timbre sonó y corrí a la puerta cómo un rayo, no sin antes agarrar mi bolso, abrí la puerta, salí de casa y cerré la puerta de inmediato.

-Cuanta emoción -rodé los ojos al escuchar la voz de Sana la cuál llevaba una gran sonrisa en el rostro- Buenos días -me entregó una pequeña pero adorable margarita-

-Sí, si, Buenos días -respondí lo más desinteresada que pude y luego lancé la margarita hacia atrás, Sana apretó los labios-

-¿Nos vamos? -me preguntó y yo asentí viendo como empezaba a caminar, aproveche que no me miraba y recogí la margarita para luego guardarla en mi bolso con cuidado-

-Esto no significa nada, la margarita está linda y ya...-murmuré fastidiada conmigo misma-