Un mañanero 7w7

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Era una hermosa mañana, bueno, para este par de tortolos, pues el día empezaba nublado con indicios de una calmada lluvia, obviamente hacía algo de frío.

Por lo que el pelirrubio ojos de mar, tenía ciertas ideas de como "calentarse" con su bellísimo novio con cabellos azabaches y toques azulinos... Pero claro no haría tal cosa sin el consentimiento de su novio, no se podía asegurar del todo que aceptaría una que otra ronda mañanera después de todo lo sucedido en esa noche anterior, dudaba que estuviera en condiciones, y claro está, que no quería lastimarlo solo por un deseo para sí mismo.

Mientras tanto Sasuke seguía durmiendo plácidamente en un profundo sueño. Y cómo no, si esa noche fue una de las mejores teniendo sexo duro con su rubio.

Naruto, ya despierto, observó la tremenda preciosidad que tenía a su lado, que no dudo querer despertarlo con besos cariñosos en esa boquita que tanto adoraba, pero antes de eso, una caricia acomodando sus suaves cabellos, permitiéndole ver esa cara que lo traía loco se hizo presente.

Al ver como el azabache seguía en su plácido sueño, decidió ir a prepararle su desayuno, que la verdad creía que iba a ser algo incomestible, debido a su poca experiencia en la comida... pero bien dicen, la intención es lo que cuenta.

Ya con el desayuno hecho, que eran unos pastelillos de vainilla y chocolate con un cafecito negro, se dirigió a la habitación de ambos.

- Cielooo... te traje el desayuno, cariño- Dijo el rubio con una voz suave y relajada, para no espantar a su azabache.

Como veía que el contrario no reaccionaba, dejó el plato en la mesita de noche y movió delicadamente a su novio, pero ni con eso despertó el azabache.

- Despierta- Dijo el rubio entrecortando las silabas con un pequeño puchero.- Sasuke... despierta ttebayo.

El azabache solo frunció el ceño, al escuchar que tan molesto era su dobe cuando estaba de buenas... Aun que le sorprendía que se despertará tan temprano, por lo que llegó a la conclusión de que algo quería. Siguió haciéndose el dormido para ver que tan lejos llegaba su rubio, no hay que negar que amaba ver que cosas hacía para llevar a cabo lo que tenía en mente, claro, si es que tenía mente.

El pelirrubio notó ese ceño, no pudo contener ese leve carmesí manifestarse en sus mejillas, pues, se veía totalmente adorable. Éste se acercó a la cara del azabache y llenó de besitos cortos toda su cara. Pero ninguna respuesta del contrario. Y como es obvio, el rubio no es tan paciente que digamos, ya se empezaba a desesperar, así que, soltó un pequeño suspiro, y empezó a besarlo justo en los labios, con sus ambas manos apretó las mejillas del azabache con cuidado para poder meter su lengua en esa cavidad tan húmeda y caliente que tanto le gustaba a Naruto, mas bien, todo de Sasuke le encantaba... Empezó a jugar con su lengua, hasta que por fin Sasuke reaccionó.

El azabache estaba algo sorprendido por esa acción, no es que no se lo esperaba, sino que fue algo extraño... bueno, por así decirlo, empezar con besos húmedos, para despertar, era muy rara vez, solamente que eso es lo que él hacía para despertar al rubio. No tardo mucho para corresponder ese juego de lenguas, que para decir verdad, empezaba a disfrutarlo, inconscientemente dejaba salir pocos pujidos y jadeos, todo iba bien hasta que el rubio se separó.

- Ya era momento de que despertaras, ttebayo- Dijo con una hermosa sonrisa de oreja a oreja

- Esa es mi técnica, ladrón- Fue lo único que dijo, con un puchero de queja, hasta que volteó la vista a los panquecillos - Uy, ¿los preparaste tú?

- ¿No es notorio?- Dijo con cierto sarcasmo, pues estaba a simple vista que los había hecho él, ya sea por la parte superior algo quemada o lo mal puesto que está el papelito.

En la mañana (NARUSASU) one-shotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora