te hubiera encontrado L.S.

Treat People With Kindness

El primer día de preparatoria de Harry había sido bastante promedio, Manchester High School no se parecía en nada a su escuela en Holmes Chapel, aquí todo se movía más rápido, al menos Harry no era el único nuevo así que se ahorró tener que ser el centro de atención, la gente era amable pero realmente Harry no estaba muy interesado en hacer amigos, se podría decir que estaba hasta un poco apático, pero no era nada nuevo en Harry, disfrutaba su soledad, siempre fue un chico de pocos amigos, era amable con todo el mundo, pero solo con pocos realmente sentía que podía ser él mismo y se sentía bien con eso.

En realidad el solo quería acabar la preparatoria lo más rápido posible, no tenía ni idea de que sería de su vida después de esto, pero solo le queda tener esperanza en que sería algo mejor.

Así que su único propósito al entrar a esas aulas era atragantarse de información, vomitarla en los exámenes, pasar las materias, certificado de preparatoria y poder salir en busca de su propia felicidad (aunque no se quejaría si la encontraba en el camino).

Pero aun con su estructurado plan, había veces que le llegaba este pensamiento sobre si ¿realmente la felicidad era algo que tenía que buscar? ¿no se supone que es algo que llega? ¿Y si ya la tuvo y simplemente la perdió para no volver a toparse con ella? o que también había la posibilidad de que el fin tal vez no es la felicidad, tal vez es simplemente un medio para algo mejor.

Tantas preguntas y muy pocas respuestas.

Toda esta odisea lo cuestionaba camino al nuevo trabajo que había conseguido en la universidad de su hermana, la verdad fue más fácil de lo que creyó, a pesar de ser reservado, Harry tenía un tremendo carisma que simplemente le facilitaba caer bien de manera instantánea y transmitirte confianza, como le pasó con su nuevo compañero de trabajo, un tal Niall Horan con acento extraño y cabello teñido.

Su entrevista fue rápida y concisa, su nuevo jefe después de felicitarlo por obtener el puesto, le dio indicaciones claras "Trabajas de Lunes a Viernes, tu turno es de las 5 pm a 9pm y lo compartes con Niall, tienes que cerrar con llave y apagar todo antes de irte, nada de drogas en horario de trabajo, tu uniforme estará en el locker que Niall te mostrará, tu descanso es de 30 minutos, tómalo en el momento que más te convenga y trata a la gente con amabilidad".

Le gustaba esa última instrucción.

Así que acató las órdenes en cuanto llego a el Café, saludo a Niall y se dirigió al pequeño cuarto detrás del mostrador, donde podría cambiarse a su "uniforme"(si es que así se le puede llamar a ese viejo mandil verde con una tarjeta colgante con su nombre) y tomar su descanso más tarde.

"¿Qué tal tu fin Harry? ¿Saliste a romper la pista?" preguntó Niall amablemente mientras preparaba una Frappe de Moka

"No realmente, las fiestas no son lo mío" Contestó con bastante honestidad, aunque en esta ocasión si tenía planes para salir el sábado, ya estaba hasta arreglado, pero recibió una llamada de Nick convenciéndolo de que mejor se quedara en su casa y se desvelaran juntos hablando, y Harry no necesito que se lo pidiera dos veces para decirle a Gemma que se sentía mal y prefería quedarse en casa.

"Tendrás que cambiar eso compañero, aquí hay muchas chicas lindas que te invitaran a fiestas cada que puedan, más con esa cara que te cargas"

"¿Y chicos no habrá?" preguntó Harry con toda la naturalidad del mundo, al final sabía que pasaría mucho tiempo con el rubio, tarde o temprano tenía que saber sus preferencias y quería saber si tendría que lidiar con otro homofóbico más.

"Mamón me hubieras dicho desde antes que jugábamos para el mismo equipo, hacerla de hetero para no asustar a mis compañeros es agotador"

Harry exhaló con alivio y supo que el rubio y él serían buenos amigos.

Así pasó la tarde llena de servir cafés, platicando de decepciones amorosas, del top 5 de peores experiencias sexuales de Niall y el porqué Harry estaba viviendo en Manchester.

"No Harry, es que si le hubieras visto el pene, entenderías porque le rogué 4 veces"

"No creo que su pene sea proporcional a tu falta de dignidad Niall"

"Mira mamón que tu no te quedas atrás con el tal Nick ese del que hablas"

Harry sabía que tenía razón Niall así que prefirió no responder a su comentario y cambiar la conversación.

"Niall creo que me tomaré mi descanso, me duele la espalda" Avisó Harry y se dirigió al cuarto de descanso, abrió su locker y tomo el sándwich de atún que se había preparado en la mañana y su libro de poesía clásica, era su placer culposo leer escritos de amor de otro siglo, de alguna forma le daban la esperanza de que algún día le pasaría lo que relatan los enamorados y difuntos dramaturgos.

En cuanto regresó a la barra a trabajar noto a Niall un poco alterado, pero ni siquiera le dio tiempo de preguntarle que sucedía porque Niall ya estaba fingiendo que se desmayaba mientras le gritaba a Harry lo que había pasado

"No no no Harry me lo como vivo, agarrame Harry, que me les voy, no es que lo hubieras visto, de verdad que dios tiene sus favoritos"

"De que mierda estas hablando"

"La semana pasada vino un HOMBRE Harry, UN HOMBRE! porque esos si son hombres, a preguntar por tu puesto, tenía los ojos más hermosos que he visto en mi vida, de hecho creo que debería de empezar a odiarte porque perdí la oportunidad de poder trabajar con semejante bombón, pero bueno, yo jure que era como nosotros Harry, mi radar jamás falla, pero el punto es que hoy regresó por otro café, pero con una chica, estoy harto de que dios me ponga a heteros así en mi camino ¡YA SUÉLTAME DIOSITO, NO MEREZCO BATALLAS TAN DIFÍCILES!" gritaba Niall arrodillándose viendo hacia el techo.

Harry solo agradeció que estuvieran solos en ese momento.

"¿Cómo sabes que no es su amiga nada más?" Intento animarlo Harry

"No Harry, vi como lo veía, ya no puedo con tanto sufrir" exageró Niall, mientras se tiraba al piso en posición fetal.

Definitivamente sería interesante trabajar con alguien como Niall.