secuestrada por un ídol.

❤️Capitulo 25❤️

Comencé a despertar después de un rato.
TaeHyung y yo aún dormimos abrazados, era realmente cómodo y cálido estar entre sus brazos.

Me quedé quieta para no despertarlo a el, se veía dormido muy cómodo y tranquilo, que sentía pena despertarlo.

No sabía que hora era pero no se veia tan tarde, aún así, debería de levantarme tarde o temprano para hacer los deberes de la escuela, antes de que el tiempo me ganará y al final ya no la acabarà o de plano no la hiciera para nada.

Al poco tiempo empecé a safarme despacio de los brazos de TaeHyung, quien solo apretó aún más su agarre, evitando que saliera de su pequeña prisión.

-Tae..... Tae - Sususrre un poco mientras lo miraba - ¿Estas despierto?, ¿Me puedes soltar?

Al no recibir respuesta de él, supuse que estaba dormido, pero por más que trataba de safarme de su agarre, el no me dejaba.

-Duerme un poco más. - Escuché su voz ligeramente ronca casi en mi oído.

-Tae, debo hacer tarea.

-No la hagas, quédate aquí.

De nuevo sentí como el contrario me atrapó mejor entre sus brazos, pegándome a su cuerpo.

-Tae, por favor.

-No - Me respondió sin más.

En ningún momento había abierto los ojos.

Su cabello parecía un nido de pájaros, estaba esponjado y con alguno que otro pelo de punta.

No me había percatado de eso, y al hacerlo me Reí.

-¿De que te estás riendo? - Vi como abrió uno de sus ojos

-Tu cabello, esta esponjado.

-El tuyo es un alboroto también.

Su rostro estaba inchadito al acabar de despertar, y apenas si abría los ojos.

-Lo sé.... Vamos, déjame hacer mi tarea.

-Ya te dije que no tu te quedas aquí acostada conmigo.

-Me van a regañar en al escuela.

-Humm, no importa.

-Tae~, déjame levantar. Además tengo hambre.

Lo que dijo capto completamente su atención, haciendo que me mirara

-¿Tienes hambre? - Pregunto.

-Que siii, muero de hambre.

Tae suspiro con resignación antes de levantarse de la cama mientras se tallaba los ojos.

-Bien, has tu tarea, yo haré algo de comer. - Hablo con un ligero tono de pereza en su voz.

Yo solo Sonreí y le Asentí.

Tae salió medio tambaleándose de la habitación, se veía tierno.

Fui a sentarme a mi escritorio para sacar mis cuadernos y hacer la tarea que tenía, en realidad no era demasiada, pero no quería que llegara a hacerse pesado por ser poco tiempo.

No fueron más de unos 15 minutos de hacer tarea, para ser interrumpida por la voz de TaeHyung sonando por toda la casa

-¡A comer!, ¡Lávate las manos! - Fue lo que dijo.

Me levante con una sonrisa y Camine a el baño, me lave las manos y seguido de secarmelas, baje las escaleras y tome rumbo directo al comedor.

Olía delicioso y eso solo hacía que me diera aún más hambre.

-Que rico se ve todo.

-Siéntate a comer antes de que se te caiga la baba.

Reí por su comentario y me senté en una de las sillas. El quedaba justo enfrente mío, ahora si rostro ya no se veía tan inchado, pero si cabello aún permanecía esponjado.

Ambos empezamos a comer con tranquilidad y en silencio, pero no era uno de esos típicos silencios incómodos.

Al contrario, era cómodo, pues sabíamos que hacíamos silencio por estar disfrutando de la exquisita comida que degustabamos.

Estaba pasando un bocado cuando escuche la voz de Tae, rompiendo el silencio.

-Veo que te gustó.

-Si, te quedo demasiado rico - Hable con una sonrisa - ¿Es una nueva receta acaso?

- Algo así, es una de las de mi abuela, pero había algo que siempre creí que le faltaba, y creo que lo encontré, le da un sabor diferente.

-Pues te quedó delicioso

-Gracias pequeña. ¿Ya acabaste los deberes?

-No - Suspire - Sólo me falta acabar unas preguntas, no creí que fuera tan largo.

-Bueno, pero al menos ya lo avanzaste mucho, es lo importante, ¿o no?

-Si, ya no me falta tanto al menos.

-Si necesitas ayuda no dudes en decirme, ¿de acuerdo?

-Está bien, yo te diré.

Me levante de la mesa con mi plato en manos, para llevarlo al lava platos y dejarlo ahi.

Lave mis manos y las seque, no quería llegar a manchar mis cuadernos.

-Acaba tu tarea, yo iré a darme un baño - Hablo Tae a mis espaldas

-Claro, así se te aplacan esos pelos

Reí y trate de bajar uno de sus cabellos que estaba en punta, siendo inútil ya que volvió al lugar de antes.

-Si, bueno, iré ya.

Tae me dio una pequeña sonrisa y camino hacia las escaleras y yo detrás para ir a mi habitación.

Ambos entramos a nuestras respectivas habitaciones, llendo a hacer lo que debíamos