- "Peep peep, peep peep."
- ¡Mierda, voy a llegar tarde!- me levanté, bostezé y me vestí rápidamente. Mientras esperaba que el café se acabara de hacer, tarareaba esa cancioncilla que tanto me chifla.
- El portátil, el pen-drive, el almuerzo y... ¡Los tampones de recambio! Ya decía yo que me olvidaba de algo... - de pronto se me abalanzó Vainilla pidiendo sus golosinas.
- Lo siento, Vaini, no tengo tiempo para tonterías.- cogí las llaves del cohe y me marché a trabajar.
- ¡Irene, otra vez llegas tarde! ¡Menos mal que he entretenido al jefe, sino ya estarías despedida!
- Suerte que te tengo a tí, Carla, siempre ayudándome...
- De nada tía, para algo somos amigas. ¡No perdamos ni un minuto más, nos reclaman en la sección de portadas! Necesitan una... ayudita...
- ¿Cómo que ayudita?
- Sí... ¡SE LES HA QUEMADO LA IMPRESORA!
- ¿¡COMO!?
- Que no, hombre, que es una broma... Toma, tienes que redactar estas noticias y si puedes, escribe un artículo de moda.
-De acuerdo.
Después de una dura jornada de trabajo me doy un capricho. Paso por la tienda de móviles y me compro uno nuevo. Llego a casa y me pego un buen baño con sales y burbujas y me pongo una mascarilla. En medio de aquel silencio tan profundo, pensé en la novela amorosa que me estaba leyendo, y me pregunté a mí misma: "¿Y si no conozco el amor?" En ese instante se me pasaron muchos pensamientos por la mente: "¿Y si no puedo mantenerme?" "Nunca me casaré ni tendré hijos, ni viviré una vida feliz." En ese momento noté como una lágrima rozaba mi mejilla; ya era hora de encontrar el amor.
ESTÁS LEYENDO
Los 6 Sabores del Amor
RomanceIrene es una chica normal, trabaja de periodista en una revista juvenil. Todo le va bien hasta que se presentan seis chicos a los cuales asocia con seis sabores: Coco, chocolate, fresa, mango, plátano y menta. Sin aviso, sus padres le obligan a casa...