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¿Alguna vez le han roto el corazón a alguien?

Yo sí. 

Hace muchos años atrás conocí a la persona que creía era mi más grande amor. Vivía atrapada entre la normalidad y el aburrimiento que trae una relacion por las apariencias, solo para complacer a mis padres.

Para ellos mis preferencias eran un pecado y una inmoralidad.

Fue la primera vez que me enamoré.

Pero no podía ser completamente suya, así que comenzó un romance oculto entre ella y yo. Lo único que quería era estar a su lado y ser feliz juntas.

Pero no podía ser posible.

Sabía que algún día todo terminaría, y lo hize de la peor forma.

Estaba embarazada. 

Y no podía ocultarle tamaña verdad.

No a ella.

Al contarle todo, vi a través de sus ojos, como iba rompiendo su corazón. Lo sentí. Fue el dolor más grande que he sentido. La amaba y aún así la decepcione. Lo único que hizo, fue desearme suerte con mi nueva familia y se fue, sin siquiera darme la oportunidad de explicarle nada o por lo menos pedirle perdón. Por más que la busque, no pude encontrarla y la culpa por haberla lastimado me ha pesado en todo este tiempo.

Después de dejar definitivamente la farsa que había sido mi vida, decidí ser libre, a pesar de que mis padres no aceptaran mi realidad. Pero ya tenía la edad suficiente para decidir por mi.

Empecé a vivir todo lo que me había perdido por ser una "hija ejemplar". Salí con cuanta mujer se me cruzó, y jamás sentí culpa. Todas eran igual para mi, nos enrollabamos en un bar o discoteca y despues "si te he visto.. no me acuerdo". Estuve mucho tiempo viviendo así y la verdad, para mi era el mejor sistema. A las mujeres que se encontraban conmigo, les bastaba un rato de seducción, unos bailes, tragos y después... sexo rápido.

Era el mejor pasatiempo que pude tener.

Pero desde unos meses hasta ahora, a pesar de pasarlo bien, me sentía vacía y en el fondo anhelaba tener a alguien con quien pasar el tiempo, ver películas y esas cosas románticas, que mis amigas tenían. 

Un día una de mis amigas me recomendó usar una app de citas. Yo secretamente ya había probado algunas, pero me terminaron decepcionando, ya que la mayoría de las chicas que tenían perfil ahí, eran heterocuriosas o eran hombres disfrazados. Pero la app que me recomendó mi amiga era del tipo LGTB.

Lo pensé un par de días, y decí probarla.

Jamás imaginé que sería ahí, donde conocería a la mujer, que me dio vuelta el mundo.

¡Dios!

Fue lo más hermoso que pude haber vivido. Todas las sensaciones que describían en peliculas, y series eran ciertas. Supe lo que era querer de verdad a alguien, hasta tal punto de querer estar toda mi vida con ella.

Dicen que el karma te alcanza por más que huyas, por más que quieras esconderte. Los actos que cometemos en vida, se pagan aquí.

Y llegó la hora de pagar el mío.

Al inicio les pregunté si le habían roto el corazón a alguien.

Si lo han hecho, no duden que aunque pase el tiempo la vida, el karma, el destino o como quieran llamarlo, cobrará cada lagrima, cada dolor, cada pensamiento triste que hayan provocado, cada noche de insomnio.

Se los digo, por que esta vez me tocó. 

Me rompieron el corazón.

¿Y saben?...

Duele un carajo.

Es increíble comprobar el grado de dolor que puede aguantar un cuerpo, un alma, un corazón. Después de estar tanto tiempo deseando sentirse así por alguien, que lo estés viviendo en carne propia, no es nada lindo. Nada romántico.

Si esto realmente es sufrir por amor, no lo deseo para nada, ni para nadie.

Duele las dudas, los miedos, la incertidumbre, duele todo. Duele pensar, duele recordar, duele admitir, duele la distancia, las ganas, los obstáculos, duele todo.

Duele.

El dolor se aprende a llevar, se sabe asumir, se puede volver parte de ti, aunque no lo quieras, aunque siempre este escondido, esperando hacer su reaparición, sin más excusa que solo recordarte que esta ahí.. y que existe.

Despues de todo lo que me hizo vivir lo unico que me queda por decir es...

Gracias.

Ojalá hubiera podido saber como mantenerte cerca de mi. Espero que sepas que yo si te amé, que todo lo que dije y sentí fue verdadero. Hubo muchos errores es cierto, pero me enseñaste muchas cosas buenas.

Te amo, eso nunca lo dudes.

Soy Bárbara Román... y esta es la historia de como ella cambio toda mi vida.

Devuélveme el corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora