Murenase Seton: Solo importa que haya Amor (Cancelada)

14 - Las Aventuras de una Gata (parte 1)

Era una Chica, de hermosas facciones y una figura despampanante. Su amabilidad cautivaba a los Alumnos, el verla era un suspiro y su sonrisa iluminaba toda el aula.

Eran de ese tipo de personas que con solamente su presencia, sin la necesidad de hablar, solo estar ahí y que tu mirada se topase con la de ella era una sensación de alegría. Incluso algunos Animales se habían Enamorado de ella.

No solo por su extremada Belleza, si no que era por su cálida personalidad.

¿???: ahhhh... al fin estoy sola...

Al terminar el día, la Chica comenzó a quitarse su ropa quedando solamente con su Camisa. Se recostó en la cama haciendo que las almohadas revotaran y algunas cayeran al suelo.

Sus largas y finas Piernas empezaron a juntarse seguido de diversos temblores.

¿???: ahhhh... uhmmm... ugh...

Todo su cabello estaba extendido sombre la cama y los botones de su Camisa se soltaban de su prenda al estirar su enorme pecho. Esto era una molestia para la Chica, pero ahora no le daba importancia.

Toda esta semana, su mente ha estado en otro lugar.

¿???: ahhh... cuando fue... la última vez... que lo hice...

Sus manos eran presionadas por su Muslos, y al comenzar a tocar estas fueron abriéndose lentamente.

Toda su habitación estaba a oscuras, solo una tenue luz entraba por su ventana, lo suficiente para ver su propio cuerpo comportándose de una manera pervertida.

Sus manos apretaban las sabanas cuando tocaba su intimidad.

¿???: ahh... están... bueno...

Era una Chica Frustrada, luego de experimentar el tener relaciones y el dejar de hacerlo, sembró esta intensa necesidad.

Pero ella, no iba a hacerlo con quien sea.

¿???: ahh... quiero hacerlo... lo extraño tanto...

La Chica continuo el resto de su tiempo libre el satisfacerse a sí misma. Era lo que la frustración la llevo a ser.

Quería volver a enamorase, encontrar un Hombre una pareja.

Pero la Chica tenía miedo de entablar nuevamente una relación, por motivos del pasado.

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Con el nuevo integrante en el Club de Cocina, los Meses transcurrieron con bastante moderación. Ranka estaba contenta al ver que su Manda aumentaba y eso le hacía feliz al verlas todas juntas.

Hitomi, ansiaba todos los días en que las actividades para estar con ellas. A pesar de estar en los mismos años, sus aulas eran bastante apartadas. Con el único que ha compartido este tiempo de estudios ha sido con Jin.

No había excepciones, todos los días la Castaña lo invitaba al Club. Habían días que el por algún motivo o porque sus actividades tomaban más del tiempo debido. También está el hecho de que habían reuniones a las cuales debía asistir con su Maestra la cual estaba a cargo del lugar.

Tanto como Hitomi como el resto, lo comprendía. Pero había algo raro en su comportamiento estos últimos meses.

Jin, había vuelto a ser distante con las demás. No en un sentido de no hablar con ellas o dejar de almorzar junto a ellas. Si no, que era el evitar estar a solas con Hitomi, Yukari e incluso Miyubi.