capítulo 14

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Seguía escondida en mi oficina, en ese momento donde me sentía avergonzada ese lugar era mi escudo por unos segundos. Descargué mi ira con llanto, no podía creer que las personas ahora me conocieran como la causante del divorcio de una pareja y no por el talento de diseñar prendas. Fué un golpe bajo a mi orgullo pero sobretodo a mi vida. Al rato la "jefita" se acercó a mi oficina tocando la puerta con amargura.

-¡Damford! -tocó molesta la puerta- ¡Abre ya!

No respondí, mi llanto hacía entrecortar mi voz para hablar, y no tenía como explicarle lo sucedido. Aparte ella no entendía razones ni titubeos, no tenía oportunidad para defenderme.

-¡Damford, no me hagas traer la llave de repuesto¡ -amenazó.

-¡Porfavor dejenme en paz! -Es lo único que pude decir en mi defensa.

-¡Sal de allí ahora mismo Damford! ¡No estás en tu casa para chillar como mocosa! - expresó insensible.

La ira abría paso dejando atrás a mi llanto, mis ojos se llenaron de miles de calificativos no muy agradables para la "jefita" y mi orgullo me cedió el permiso para no dejarme intimidar por aquella persona que siempre se encargó de humillame y quedarse con el éxito de mi esfuerzo. Todos estos recuerdos invadieron mi cabeza ,y con la ira que se estaba acumulando, mi cuerpo por si solo se puso de pie y fué a su encuentro.

-¡¿Por qué no me deja en paz?!¡Necesito unos minutos sola ¿Puede entenderme una vez en su vida?! -todos me miraron sorprendidos y susurraban cosas el uno al otro.

-¡Aquí tu no eres nadie para levantarme la voz Damford!

-Sin nosotros, esta empresa no sería nada -expresé con voz tranquila.

-Sin el sueldo que ustedes reciben, sin el nombre de la empresa, no serían nada -contraatacó.

-Todo nuestro esfuerzo se lo lleva usted, no la empresa -voltié y regresé a mi oficina, recogí mis cosas para retirarme de este lugar.

-Es muy ovio pero estás despedida, no queremos a personas que destruyen hogares aquí...

-Su boca solo debería abrirse para decir cosas de las que es conciente -dije con una sonrisa sarcástica y me retiré sin darle explicaciones a nadie.

El a ver perdido mi trabajo me devastó por completo, no quería demostrarlo frente a ella porque no quería que pensara que solo sirvo para su empresa pero necesitaba el sueldo para sustentar mis gastos, mi departamento. No sabía que hacer ¿Llamar a Brian? No, lo menos que quería era ver a Brian, me sentía molesta con él sin saber si era el culpable o no, pero otro nombre no se me pasaba por la cabeza en esos momentos.

Retorné a mi casa con los ánimos hasta por los suelos, la tristeza me invadía y mi cuerpo me exigió agua fría. Corrí a la ducha, y me metí en ella con toda la ropa, no me importaba nada, solo ahogarme en mi llanto y atormentarme en los pensamientos de saber que miles de personas vieron ese reportaje, deben pensar lo peor de mi. Los fans de la anterior relación de Brian debían detestarme. Lo menos que quería era que los deathbat's me odien, quizá por eso no quería hacer publica mi relación "casi amical" con Brian.

Después de un largo rato de depresión; no tenía ganas de nada, ni de comer ni mucho menos hablar con nadie. Me puse la pijama y me dormí con la esperanza de despertar en mi realidad de siempre.

Abrí los ojos el día siguiente con mucho pesar, agarré mi celular para poner la música y me topé con unos 20 mensajes, algunos eran de mis amigos pediendo explicación, otras insultandome, y mensajes de Brian. Abrí los mensajes de Brian, pedía perdón por lo sucedido y decía que él tenía toda la culpa, tenía que conversar conmigo para explicarme lo sucedido.

¿Brian el culpable de esto? Realmente estaba molesta ayer con Brian pero no pensé que fuera el causante de esto.

Le respondí elensaje para que viniera a mi casa en una hora. Me duché y cambié rápidamente, tenía unas ojeras de panda pero lo arreglé con maquillaje. Al rato Brian llegó.

-¿Por qué tu tienes la culpa? -

Le cuestioné friamente. No lo saludé, mi cuerpo exigía una explicación y una solución a este bochornoso problema.

-¿Puedo pasar?

-Pasa -ingresó a mi casa y se sentó en el sofá. Respiró hondo y respondió.

-No creí que algo así iba a pasar, pensé que sí nos ampayarían pero no que tendrían tanta maldad para decir esas cosas. Te llevé al café cerca de mi casa porque sabía que nos grabarían, mi intención era darte a conocer como algo que se está iniciando, que estamos conociéndonos; pero no se acercaron a nosotros a preguntarnos, solo se fueron con su verdad. Perdóname, yo me encargaré de arreglar todo -dijo verdaderamente arrepentido.

-¡Perdí mi trabajo por tu pensamiento! -expresé molesta. No podía creer que sea tan ingenuo sabiendo que el espectáculo expone lo que se vende -Te dije que debíamos iniciar todo denuevo. Despacio ¡y sales con esto! -dije mis lágirmas caían de enojo. Me sentía engañada.

-Porfavor, perdóname. Fuí un idiota -dijo al borde del llanto.

-Quiero que te vallas.

-No, si no me perdónas.

-¡Que te vallas, dije! -exclamé exaltada, lo cual lo asustó. Se puso de pié y salió con el ceño amargo de la casa.

Me derrumbé sobre el sofá, abracé el cojín. Mi cara estaba hundida entre la vergüenza, impotencia, amargura, tristeza, y el cojín ya mojado.
La realidad bailaba en forma burlona, me restregaba lo horrible que te puedes sentir cuando todos te miran con desprecio, sin razón alguna, solo por creer en el tiempo, ignorando los prejuicios que trae a su paso.

Amaneció. Mis ojos estaban hinchados, al parecer ni mis sueños se salvan de la realidad.
Prendí el computador para torturarme más, los comentarios negativos hacia mí parecían espinas, sobretodo si eran personas fans de la banda como yo.

"No la queremos para Brian, es una entrometida"
"¿Cómo pudo fijarse en una chica así?"
"¿Cómo pudo dejar su matrimonio por una chica sin principios"
"Decepción total sobre Brian"

Eran algunos comentarios que los fans habían dejado en el video del ampay. Dentro de tantos pensamientos revueltos, un pequeño recuerdo se vino a mi mente ¡Rogger! Lo había olvidado por completo después de tantos sucesos. No tenía su número para avisarle que no iría, y me parecía tan buena persona como para plantarlo pero no podía ir, no me sentía con el humor como para tratarlo, no merecía que me desquite con él. Opté por no ir.

Pasaron dos días, tenía más de treinta llamadas y 50 mensajes de Brian sin ser correspondidas. No quería saber nada de él por ninguna situación. No salí de mi casa en estos dos días, me sentía reprimida por la gente, por los susurros.
Derrepente tocaron la puerta. Era Cleidi que se sentía preocupada después de tan llamativa despedida.

-Creí que querías privacidad y tiempo para pensar, sabes que yo no te juzgo. Sé la verdad y no tienes por sentirte mal -dijo comprensiva. Estas palabras me hicieron sentir bien en ese instante, no tenía la comprención de nadie, ni el apoyo de nadie. Sus palabras fueron reconfortantes pero me hicieron romper en llanto.

-Gracias por venir, necesitaba palabras afectuosas después de tantas de desprecio -Ella me abrazó.

-Te apoyaré siempre amiga, pero también creo que él no tuvo la culpa, ingenuamente trató de darte tu lugar sin pensar en las consecuencias. Me parece muy hombre que saliera a explicar lo que verdaderamente pasó entre ustedes.

-¿Qué? ¿Salió a explicar? -Cuestioné confundida.

-Ayer Brian declaró nuevamente, poniedole bien en claro lo que eres para él y exigiendo una disculpas hacia tu persona.

-No puede ser...

:33 Espero les aya gustado lectores. Debo decirles que publicaré capítulos todos los domingos ya que comencé mis clases :c espero comprendan y no se despeguen de la novela. Gracias por ser tan cool's c:

Those were the days of our livesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora