Algo raro estaba pasando allí, tenía mil dudas en mi mente rondando, como si algo malo estuviera pasando,¿por qué Jason le había dicho eso?, ¿Por qué había salido corriendo?, ¿por qué los simios eran tan chismosos? Ahhh y sobre todo ¿Qué me pasa cuando estoy con el?.
Vi a Jason ayudarme a levantar una y otra vez, excepto esa vez no quería que el me ayudara en nada. Intento coger mi mano, pero mi mente actuó sola y la alejo de ella.
Salí corriendo a mi casillero cojí mi bolso metí mi libro de Harry Potter, mi cuaderno de matemáticas y unas partituras, la puse en el suelo, cubrí mi cara con mis manos tratan donde evitar llorar, respire profundo, cojí de nuevo mi bolso, de un golpe cerré el casillero y salí.
En el camino a casa fuí pateando una piedrita tratando de distraerme pero fue inútil. Llegar a casa sería otro desastre, vivo sólo con mi madre, hace años no veo a mi padre, y mi hermano solo llama para alardear que es un duro en la química. Mis padres se separaron cuando yo tenía tan solo cinco años y aproximadamente hace 4 años no lo veo por mi elección porque cada vez que lo veo me acuerdo de esa noche, esa terrible noche; mi madre me puso a hacer de todo para olvidar todo eso, le agradezco mucho porque me metió en ballet, en música y en literatura, pero la verdad es que con ella todo es pelea no existe un día que no discutamos por algo.
La mayoría del tiempo estoy sola en casa, mi madre trabaja en una agencia de viajes, y sale de viaje de trabajo cada semana, pero es mejor estar sola.
Llegue a mi casa, saque las llaves y entre.
-Mamá!!!- grite y no recibí respuesta, así que entre a la Cocina y vi una nota, que decía:
“ Corolita, hija mía, tuve que salir a un viaje de negocios duro dos semana y media fuera de casa, hay suficiente efectivo donde sabemos, por favor come y cuidate mucho.
Te amo.
Mamá.”Por Dios mi Mami se había ido durante dos días y ya no mas, pero esto seria por dos semanas, DOS!. No quería pensar tanto en eso, tenia tarea y a eso me dedique.
Por algún extraño motivo no me logre concentrar en los números, era como si Alejandro se hubiese metido en mi cabeza con el fin de nunca salir, era estresante sentirme así, como si no tuviera la capacidad de controlar mis sentimientos y emociones, era como si realmente me gustara.
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La sinfonía de una mirada.
Teen FictionMuchas personas dicen que las miradas son sentimientos que viajan de un lado a otro con un oculto secreto, y si, yo era de esa personas que no creía en esas palabras " cursis" de todo típico adolescente. Hasta que lo vi, no quiero sonar típica adole...