Last

1.1K 100 11
                                    

El pitido del coche que él mismo colapso contra un muro no dejaba de sonar. Ni siquiera sabe hace cuanto llegó y está acostado en esa cama, o hace cuanto las lágrimas no dejan de deslizarse por su hermoso rostro. -Ni le importa-

Acaba de darse cuenta que todas las cosas que le decían sobre su novio eran ciertas y se siente estúpido por haberlo hecho encontrándolo de una manera comprometedora y no por usar un poco más la cabeza.

Acaba de darse cuenta que todas las cosas que le decían sobre su novio eran ciertas y se siente estúpido por haberlo hecho encontrándolo de una manera comprometedora y no por usar un poco más la cabeza

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

º Dos horas antes º

"¡Vamos Gus!, acompáñame a comprar ropa" Pedía su amigo de cresta.

"No, que luego de veinte prendas no eliges ni una tío" Respondió el rubio, rodando los ojos.

"La moda es algo que no entenderías y yo lo llevo en la sangre" Dijo ofendido, con una mano en el pecho. "¡Por favor perla!, te compraré cosas también"

"... Está bien." Aceptó, realmente no tenía nada que hacer y le serviría para sentirse acompañado. Jack tenía mucho trabajo últimamente y gracias a ello lo dejaba solo.

"Solo vas porque te compraré cosas, no por mí" Dramatizó, recibiendo un golpe por parte del más bajo. "¡Auch! No me golpees, solo bromeó. Sé las razones." Dijo lo último con un tono de pena. Horacio no era tonto aunque a veces lo parecía, él era muy observador y sabía que su jefe, pareja de su amigo: le mentía, le engañaba y que éste se creía todo lo que el otro le dijera porque le amaba y confiaba ciegamente...

Condujeron hasta comisaría para poder salir de servicio y cambiarse a su ropa de civiles, para luego dirigirse a una tienda de ropa.

Condujeron hasta comisaría para poder salir de servicio y cambiarse a su ropa de civiles, para luego dirigirse a una tienda de ropa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"¿Cómo se me ve esta?" Preguntó el de ojos bicolor, probándose una ombliguera rosa como su cresta.

"Bien Horacio, bien. Como las otras tres que eran iguales, solo cambia el color caranabo." Contestó con un tono cansado. Estaba arrepintiéndose de haber aceptado. "Date prisa que también quiero que me lleves a cenar, tengo mucha hambre me comería una vaca ahora mismo."

"Solo dije que te compraría ropa, no la cena" Aclaró, mirando al de ojos azules quien le respondió con una mirada de advertencia. "Está bien, está bien." Se apresuro a decir, sabía que Gustabo enojado y con hambre era un peligro.

Salieron de la tienda de ropa, Gustabo con tres bolsas y Horacio con diez. Al final el de pelo rosa no llevo todo lo que quería.

Se dirigieron a un restaurante Francés, uno de los más costosos de Los Santos. Ya que Horacio pagaba, Gustabo podría pedir eso y más por haber esperado sentado durante tres horas.

Sintió un poco de tristeza; ese era el restaurante al que solía ir con Conway. -Paso mucho tiempo desde la última vez-

Al entrar los guiaron a una mesa. Gustabo ya tenía una reservación, la pidió en todo el rato que estuvo con Horacio en la tienda.

Al estar sentados el mesero se acercó para saber que pedirían.

"Yo quiero un Coq au vin." Pidió Gustabo sin ver la carta. Ya conocía muchos platos de ahí.

"A mí tráigame... un Confit de pato" Dijo el de cresta, dejando la carta en su lugar.

"Y de tomar el vino.. Petrus Pomerol, por favor." Volvió a pedir el ojiazul que vio como Horacio buscaba en la carta de vinos el que él pidió.

El mesero se retiró al haber terminado de escribir las órdenes.

"Yo pagaré el vino, tonto" Recalcó al notar a su mejor amigo palidecer al encontrar el precio, quien soltó un suspiro de alivio. "¿No crees que nos dieron una mesa muy apartada?" Preguntó viendo a sus alrededores.

"Pues no lo sé, yo no vengo muy seguido a estos sitios pero estamos como... escondidos" Respondió con una sonrisa el menor.

"Exacto, las mejores vistas son las que están cerca a las ventanas" Habló señalando al sitio indicado y se quedó estático en esa posición.

Horacio se percató de como su amigo se quedó anonadado y volteo a ver al mismo lugar; su vista se encontró a Conway con una mujer, muy guapa. Éste le estaba tomando de la mano por encima de la mesa y se miraban coquetamente.

"Gustabo" Nombró el más alto. No estaba sorprendido con lo que vio, él ya sabía que Jack Conway no era una persona fiel.

"Yo..."  Balbuceó el rubio sin apartar la mirada de la que era su pareja. "Esto no-... Debe ser una compañera del CNI ¿cierto?, O solo está en una reunión ¿verdad?" Preguntó con lágrimas que salían de sus azulados ojos.

"Gustabo mírame" Insistió Horacio. No sabía que decir o como darle apoyo a su amigo, porque estaba claro que no era como Gustabo decía o como quería creer.

Gustabo se levantó y se fue lo más rápido que pudo, lo provocó el ver cómo Jack besaba a esa mujer. Horacio también lo vio y aunque quisiese ir a arruinarle el -jueguito- a Conway, más importante fue ir detrás de su mejor amigo.




DEAD TO ME - Intenabo • VolkaboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora