- Louis por favor comportarte, estás a punto de conocer al dueño de todo lo que tus pies están pisando.
- Por favor Zayn, me se controlar, por cierto, el
chico, ¿es lindo?
- Por un segundo en tu vida puedes dejar de
pensar con quien acostarte - exclamo Zayn, los nervios lo estaban consumiendo.
- Si Zayn, lo que tú digas - respondió el oji-azul.
El chico de pestañas rizadas y largas junto a el chico de pelo castaño y nariz linda se dirigían hacia el palacio a conocer a los reyes y a su hijo.
Los padres de Louis tanto como de Zayn eran socios, George Malik y William Tomlinson, eran una de las personas más poderosas, pero sobre todo con dinero del reino. Claro, después de los reyes y su hijo, ese chico de ojos verdes, cabello largo rizado y labios finos que heredaría en vida tanto como en muerte a sus padres.
- llegamos.
- enserio Zayn? - respondió Louis en un tono de burla.
- no empieces con estupidos chistes y
compórtate, peínate.
- ¿que dices? Luzco perfecto así como estoy - acompaño sus palabras con una carcajada.
- LOUIS, BASTA!
- Siempre quieres decirme lo que tengo que hacer!
- por dios, eres un fastidio!
Los chicos entre discusiones no se dieron cuenta que ya estaban a punto de llegar a el rey, un mayordomo iba con ellos.
- ¿señores? - dijo el mayordomo.
- Eres un ser verdaderamente despreciable!
- TU TE QUIERES ACOSTAR CON EL HIJO DE LOS REYES!
- SEÑORES!
- ¡¿QUEEE?! - respondieron Zayn y Louis
- buenos días, soy el rey Demian.
Los chicos quedaron pasmados pues no tenían idea si este habría escuchado lo que había mencionado Zayn.
- mucho gusto Louis Tomlinson! - extendió la mano para saludarlo a lo que Zayn le pellizcó el trasero y le susurró en el oído.
- ¿se te olvida que es el rey?
- mierda.
- LOUIS.
- lo siento!
El rey soltó una carcajada al ver el comportamiento de Louis, era un pequeño interesante, sobre todo por que no le interesaba que estuviera en frente de el dueño de su vida.
Hicieron una reverencia tanto a él como a su esposa.
- no se preocupen chicos, esta bien - contesto amablemente la reina.
- vaya, que chico tan peculiar nos ah venido a visitar el día de hoy - se escuchó una voz dulce en el fondo, acompañada de una risa angelical.
Louis trataba de ver de donde venía la voz, volteo hacia las enormes escaleras del palacio y sus ojos miraron bajar al chico más lindo que nunca podría haber visto, ojos verdes, tenia su lindo cabello largo atado con pequeños rizos de fuera, la forma peculiar de sus labios y su nariz. Tenía una gran sonrisa en el rostro, la complexión de su cuerpo, sus manos, podrías ver su bondad y nobleza desde lejos. Louis era muy sensible, (aunque lo ocultara), el podía leer a la gente tan rápido. Todo se complementaba a la perfección, parecía un momento de viejas películas de amor. El chico lindo bajaba las escaleras, de una forma tan angelical y única, y el chico tonto e insignificante lo veía; El chico tenía ese algo que hacía que todos quisieran verlo.
- les presentó a Harry Styles, mi hijo.
- mucho gusto, soy Harry, un placer tener invitados.
- el gusto es mío, Louis Tomlinson, para servirle..
