A veces pienso que mi corazón se divide por tu ausencia pero realmente soy yo que tengo miedo de perderte, de olvidarte, de pasar pagina y olvidar nuestra pequeña historia.
Me autoengaño queriendo creer que no puedo pero el auténtico problema aquí es que no quiero.
No quiero dejarte atrás, no quiero que seas un simple recuerdo, un par de imágenes en mi cabeza o un huracán de lagrimas cada vez que escucho una canción que me recuerda a ti o camino por algún lugar en el que hayamos estado juntos.
Quiero tener la esperanza de que algún día todo va a cambiar, tú vas a cambiar, nosotros vamos a cambiar. No quiero tirar la toalla ni contigo aunque es lo que debería para no causarme más daño del que ya provocas tu, pero algo en mi interior me hace luchar por ti y no por esa persona que pretendes ser si no esa que siente como nadie y sufre y calla en silencio.En ocasiones fugaces mis pensamientos me mienten. Pretenden que piense que te alejas de mi por mi propio bien pero el corazón como de costumbre le da la vuelta a la vida demostrándome lo contrario.
Estoy rota, hecha trizas por tu marcha, no lo niego y simplemente con que alguien mire un poquito a través de mi de dará cuenta de que aunque quiera aparentar que me da igual como tú mismo me enseñaste no puedo evitar que se me llenen los ojos de agua como los océanos, que sienta que todas las mariposas del planeta en el que vivimos se encuentran en mi estómago cada vez que pronuncian tu nombre o sentir cada puñalada en mi corazón recordando todo el dolor , y podría poner mil ejemplos más de todo lo que causas en mi pero creo que todos en algún momento nos hemos sentido así y sabemos lo que se siente.
Duele ver que el amor perfecto que algunas personas dicen haber encontrado a mi se me escapa entre las manos como si estuviera cerca pero no consiguiera atraparlo, es frustrante pensar que tú eras esa persona pero que no has tenido el valor de aceptarlo.
Duele pensar que nunca tu amor será tan incondicional como el que tenia Damon hacia Elena o Klaus hacia Caroline, que eso que ansío con todas mis fuerzas tú has conseguido que se desvanezcaY finalmente aquí me encuentro y no se si debería darte las gracias por haberme dado un escudo personal que me ayuda a ser más fría, más apagada menos sentimental o odiarte por conseguir que pierda la esperanza de enamorarme de alguien más y que no me hagan daño.
Así que me tocará vivir habiéndote otorgado el beneficio de la duda.