¿Acaso sabes lo que hay después de la muerte? De ser si tu respuesta, por favor dímelo, pues le temo más a estar vivo y sólo necesito una razón para que mi cuerpo no sea más que un jarrón vacío. Puedes contármelo al oído si no quieres que otros sepan que hay en el otro extremo, puedes enviarme señales indescifrables, y sería aún mejor si me dejaras echarle un vistazo al paraíso, no importa si es un completo infierno, cualquier cosa puede llegar a ser mejor que vivir en la incertidumbre. Entonces toma una moneda y págale al barquero, toma otra y además del viaje paga por su silencio, no estaría de más si tomas otra y le pides que no haga preguntas sobre porqué aún vivo quiero subir a su barca.
Hazte en la orilla y sacude ligeramente tu mano, dame un adiós de labios para adentro y si algún ser te pregunta por mi puedes decir que nunca nací, si te arriesgas puedes entonces decir que ni siquiera fui concebido, no habrá más preguntas pues nunca, dentro del anhelo de partir de esta vida (si es que se le pudo llamar así), sembré un recuerdo de mi en alguno de esos desdichados seres, así que, si sólo se escapase mi nombre de sus bocas, ya sabes que responder,
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Notas terminadas en coma
PoetryEsto no es más que una mochila sin fondo, un recordatorio de que mi cabeza ya no puede con tanto.
