Capitulo 17: Hannie

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 Tan curiosa como siempre, Nabi - No lo dijo con malas intenciones pero aun asi consigo que mi mejillas se tiñeran de rojo. - Acércate, quiero que lo veas por ti misma.

Como si aquella luz tuviera una fuerza sobrenatural, avancé hasta ella y extendí mi mano. Un intenso dolor cubrió todo mi cuerpo y grite, pero por alguna razón no podía dejar de tocar la luz. Poco a poco noté como se me nublaba la vista y acabé por caer al suelo inconsciente.

Abrí los ojos lentamente. Ya no estaba en el suelo del bosque, ni tenía a Chan a mi lado, ni siquiera a Dios. Lo único que recuerdo era haber perdido el conocimiento después de tocar aquella luz. Me sentí aturdida y mire a mi alrededor. Estaba en una habitación roja. A mi lado había una cama donde estaba tumbada una chica, estaba de espaldas a mí así que no le podía ver la cara. Su pelo era de un color rojo fuego, era largo y suave. Iba a tocarle el pelo cuando un fuerte ruido en la puerta me hizo sobresaltar.

- ¡NABILHA! - Un chico joven se acercó a la cama atravesando mi cuerpo por completo. Entonces me di cuenta de que estaba en una especie de sueño / recuerdo.

Mire a la chica que poco antes estaba tumbada en la cama. Ella era yo, o mejor dicho; yo era ella. El rostro de la chica estaba lleno de moretones.

- ¿Nabi estas bien! - El chico tenía la cara de la joven entre sus manos. - Perdón por no haber podido hacer nada - dijo muy apenado y unas lágrimas salieron por sus lindos ojos.

Una leve risa salió de los labios de la chica. Ella se incorporó y plantó un beso en la frente del chico.

- No pasa nada Hannie, todo estará bien.

En el momento en el que dijo su nombre, me vinieron un millón de recuerdos, como por ejemplo el día en el que nos conocimos. El era un pequeño demonio huérfano al que conocí cuando tenía 7 años;

>Flashback<

Iba paseando por el cementerio sumida en mis pensamientos cuando de pronto oí un llanto. Me acerque al sitio del que provenía y encontré a un niño de unos 5 años que lloraba frente a las tumbas de dos demonios llamados Han Mi-suk y Han Yongmin. Por lo que se, estos murieron en una batalla contra los ángeles, dejando atrás a un hijo de apenas unos meses. Esto pasó hace ya 5 años.

- ¿Eran tus padres? - El niño asintió levemente. El niño vestía con unas ropas desaliñadas y malgastadas - ¿Tienes hambre? - El pequeño negó con la cabeza pero su estómago lo delató haciendo un gran ruido.

Entonces fue cuando el niño levantó la cabeza. Le extendí la mano y él la cogió. Lo llevé hasta casa y lo metí en mi habitación. Le dije que por favor esperara unos minutos, que vendría rápido. El niño asintió asustado y yo me dirigí a la cocina y cogí toda la comida que pude. Cuando le di la comida al niño él la comió con mucha ansia. Yo solo me limito a observar.

- ¿Cómo te llamas?

- Han Jisung - dijo algo avergonzado. Se notaba que no hablaba mucho. Su voz era tan linda que parecía música para mis oídos.

- Yo me llamo Nabilha. Es un placer conocerte. - el chico recorrió con la mirada mi habitación hasta posarse en uno juegos, como el ajedrez, el scrabble, el trivial y demás. Entonces tuve una idea. - ¿Quieres jugar?

- No se como se juega.

- ¡No pasa nada! te enseño. - me levanté y cogí todos los juegos - ¿cuál quieres primero?

- Este - dijo señalando el tablero del parchís

Puse el tablero en el suelo y las fichas en su sitio. Le explique el juego de una manera sencilla, para que él pudiera entenderlo. Jugamos durante horas hasta que ya entendió el juego. Ya se estaba oscureciendo y el chico no tenía a donde ir. Me contó que desde hace un año que sus padres adoptivos había vivido en la calle, robando de cualquier casa. Le dije que se quedara a dormir en mi casa esa noche.

- Tu dormiras en mi cama y yo en el suelo - dije acomodando un colchón en el suelo, al lado de la cama.

- No quiero dormir solo - dijo tímido y con un leve rubor en la mejilla. Verlo de esa manera me hizo sonreír.

Sin decir nada más me metí en la cama con él y lo abrace fuertemente. Su respiración comenzó a ralentizarse hasta que entendí que ya se había dormido. Cerré los ojos poco a poco hasta que me quedé profundamente dormida abrazando a Han.

>Fin del flashback<

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Diabolic LoversDonde viven las historias. Descúbrelo ahora