Estímulos | OS Ragoney

Parte única.

Trigger warning: Contenido explícito

29 de Abril de 2020. Barcelona.

- Me duele tanto, Nerea, me hace sentir tan mal que las campañas con las que siempre soñé y que me hicieron escoger esta profesión sean ahora mis peores obstáculos. Un simple error y el prestigio de la empresa caerá en picado. -comentaba Raoul mientras daba vueltas en el despacho de aquella empresa que tanto le había costado formar.

- Solo tienes que dejar de creer que los que vean tu producto lo analizarán tan minuciosamente como tú lo haces. A pesar de la crítica social que conlleva este evento, la gente no estará pendiente a cada detalle para saltarte al cuello, no tienen motivos. -respondió la chica en un tono conciliador, buscando calmar al contrario, cada vez más nervioso-.

El sonido de la melodía que sonaba en la planta tenía un volumen ínfimo que contrastaba a la perfección con los mocasines del catalán golpeando el suelo nervioso, como el tic tac de un reloj. Acomodaba su pelo de mil maneras distintas, buscando que quedase justo como quería verlo.

Para Raoul, cualquier elemento fuera de su zona de confort suponía un enemigo de enorme magnitud. Y no solo en factores como estabilidad laboral, viajar o cambiar de entorno. También en cosas cotidianas como su conjunto diario, la música que escuchaba o el orden dentro de su despacho.

- Exponlo en la reunión de hoy, que te den propuestas y escoge la más adecuada, la revisaremos para que quede lo más ajustada posible a la promoción del Orgullo, de verdad que si hacemos eso tendremos el trabajo perfecto. Confía en tus trabajadores, además, hay un chico nuevo al que le veo potencial en este tipo de proyectos. -intervino de nuevo la rubia.

- ¿Agoney? Si, creo que se llamaba así. Lo he visto esta mañana, parece demasiado hablador. Me pone nervioso que participe tanto en todo. -le contestó el mayor mirando sus uñas.

- Creo que debes hacer cambios en cómo ponderas las actitudes de la plantilla. Nos vemos en la reunión. -dijo Nerea antes de salir de aquel despacho dirigiéndose a su zona de trabajo.

Horas más tarde, los trabajadores más reconocidos de la empresa estaban sentados en una mesa ovalada que hacía posible el contacto visual entre todos. Raoul la presidía teniendo a su derecha a su persona de confianza, Nerea, y en frente a aquel canario que le causaba nervios por su actitud risueña con sus compañeros.

Carraspeo fuerte buscando que se detuviera y el moreno rodó los ojos obedeciendo.

- Nos han encargado el diseño para los carteles y redes sociales del Orgullo de Barcelona 2020. Es uno de los proyectos más importantes hasta la fecha, por lo que seremos minuciosos a la hora de seleccionar la persona encargada de llevarlo a cabo bajo mi supervisión. Si ninguna propuesta me convence, rechazaré nuestra participación. No dejaré que quedemos en ridículo bajo ningún concepto. -Sentenció Raoul con un tono firme y relajado, buscando que a todos les quedase clara la importancia de la situación que se estaba exponiendo.-

- Por eso mismo, vamos a hacer una selección de aquellas personas que consideramos más aptas para llevarla a cabo. Dos de ellas seleccionadas por Raoul, las otras dos por mí. -añadió Nerea.

- Esas personas deberán traer unos bocetos claros de sus ideas en dos días, y seleccionaremos a la persona encargada. Por mi parte he decidido seleccionar a Belén y a Joan. -dijo el rubio, observando a las personas que había nombrado.

- En mi caso, he decidido seleccionar a Ariadna.. y a Agoney. -dijo Nerea sonriendo de manera amistosa.

Las piernas de Raoul temblaron al escuchar el nombre del canario. Le fulminó con la mirada apretando sus puños, porque sabía que era libre de escoger, pero a la vez tenía claro que buscaba romper sus esquemas, Nerea siempre quería sacarle de alguna forma de esos esquemas mentales tan firmes y rectos.