Cada noche, el parque Promise se hallaba desolado. Sin embargo, en aquella banca desgastada, un apuesto hombre se encontraba sentado manteniendo una amena conversación con alguien más. Eran los únicos en el lugar, aunque, físicamente hablando... Sol...
Para esta parte de la historia, me base en la canción "Say Something", si gustan, está ahí para que la escuchen.
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—Namjoon, no sé qué está pasando por tu cabeza ahora pero lo que sea, espero que no involucre hacerte daño.— Jin lo miró fijamente por primera vez desde que Namjoon empezó a relatar lo sucedido.
Seré el único, si tu me quieres también
En donde sea, te hubiera encontrado
—Ya no se que mas hacer, cuando nos encontramos hace nueve meses, creí que todo se solucionaría. Que verte todos los días me haría feliz de nuevo pero aquella ilusión se destrozó cuando me diste a entender que no me conocías.—
Seokjin asentía mientras seguía viendo pasar miles de momentos de su vida en su cabeza, uno tras otro.
—Jinnie yo.. no podía seguir escuchandote hablar de tus sueños y metas cuando se que eso ya no es posible, cuando recuerdo que arruine tu vida.—
—Creo entender el porqué aún no logras procesar todo y no puedes perdonarte, la razón del porqué te sientes tan perdido.— Jin acarició su brazo sin temor, debido a que ya había comprobado que nada malo pasaba.
Y yo, me estoy sintiendo tan pequeño
Estaba por encima de mi cabeza
No se nada en absoluto
—Has hablado con un psicólogo por meses, has conversado con tus padres y discutido con tus amigos, incluso has gritado contra ti mismo pero.. te has olvidado de escucharme a mí.— Jin abrazó a Namjoon sin previo aviso.
—Antes que digas algo, dejame decirte lo que he estado anhelando gritar desde que vi tu rostro por primera vez en este parque.— Namjoon lo miró esperando una respuesta afirmativa.
—Te escucho, amor.— una lágrima rodó hacia la mejilla del chico y sin pensarlo, se dejó caer de rodillas para luego abrazar la cintura del muchacho.
—Lo siento tanto, cariño. Debí escucharte, yo debí haber aceptado la propuesta de tus padres en primer lugar, no haber tomado descontroladamente cuando tu fuiste quien me enseñó de autocontrol, jamás debí obligarte a permanecer en el auto y por nada del mundo, debí haberte dejado morir.—
Seokjin acariciaba el cabello del chico mientras lo escuchaba hasta que Namjoon se paró nuevamente y tomó el rostro del muchacho en sus manos. —Tu me enseñaste a respetar, a prosperar en la vida, me diste esperanzas, confort y sobre todo..amor y te estoy eternamente agradecido Jin—
