¿Por qué?

Capítulo 24

Al día siguiente despierto al sentir unas caricias en mi rostro y me quedo maravillada ante lo que contemplo nada más abrir los ojos, veo a mi amada con una magnifica sonrisa

-Buenos días Mina-creo que es algo cómodo llamarle así
-Me gusta como suena ese apodo, buenos días cariño-dice antes de darme un pequeño beso-¿que tal has dormido?-
-Como nunca lo he hecho antes, ¿y tu?-la sonrisa y felicidad no abandonan mi rostro 

-Igual que tu, tenemos que bajar a desayunar, hace poco Zoe tocó la puerta y era para avisarnos de que ya es el desayuno-ahora se sienta en el borde de la cama al igual que yo

-Está bien, así aprovecho y así nos organizamos, ¿tu crees que va a hacer calor o frío?-me levanto y voy hacia el armario para cambiarme de ropa

-Ponte algo intermedio, si hace calor no pasa nada y si hace frío tampoco, ¿no?-dice mientras se pone a mi lado

-También tienes razón, ya sé que ponerme-cojo la ropa rápido para que no la vea y me meto en el baño, he cogido un pantalón vaquero que se ciñe a mis piernas pero que está roto por las rodillas, una camiseta con calaveras de diferentes colores sobre un fondo oscuro y una chaqueta negra con una calavera parecida a las catrinas mexicanas que me encanta y está en la espalda, aprovecho y me cepillo el pelo, cuando salgo del baño ella ya está cambiada de ropa, lleva ropa muy casual pero eso si, lleva algo violeta como siempre-¿qué tal me veo?-

-¿Hoy te ha dado por las calaveras?-se levanta y posa sus manos en mi cintura

-Hacía tiempo que no me vestía con muchos colores a la vez, y si, me dio el punto de las calaveritas hoy, ¿no te gusta mi estilo?-le hago un puchero como de niña pequeña

-No me gusta, me encanta-dice antes de dejar un beso sobre mis labio y justo llaman a la puerta-que inoportunos-esta vez no lo dice en voz alta, lo escucho en mi cabeza y he de admitir que tiene razón, yo me acerco a la puerta y al abrirla me encuentro a Queenie 

-Cordelia me mandó a avisarles que estamos esperándoles-

-Buenos días-

-Eso también, vamos-dice eso y empieza a caminar sin saber si le seguimos o no y de repente siento un pellizco como el de ayer en el brazo

-¡Queenie!, que eso duele-digo fastidiada

-Por eso lo hago, ahora vengan si no quieren que siga-dice riendo

-¿Sabes que tarde o temprano me voy a vengar?-las dos salimos y llegamos hasta ella

-Inténtalo si quieres, soy una muñeca voodoo, si me haces daño con la misma lo recibes si yo quiero, así que en el momento en el que intentes herirme te lo devolveré sobre la marcha-y así es como llegamos al comedor donde están las demás esperando

-Si te crees que me voy a quedar de brazos cruzados y dejar que me sigas pellizcando la tienes clara-digo decidida pero también riendo

-Cuando lo sienta me lo creo-

-Mejor que te rindas, ya lo han intentado varias veces, pero nadie lo ha conseguido-dice Cordelia

-Ya, pero no lo he intentado yo-cruzo mis brazos sobre mi pecho y levanto la cabeza

-Creo que eres un poco orgullosa-dice Mallory sonriendo

-La verdad es que si y mucho-pongo sobre la mesa mi medicación para poder verla y no olvidarme de ellas, de repente llega Kyle junto con más personas que nos traen el desayuno y les doy las gracias por lo que nos han traído

Y bueno, mientras desayunamos decidimos lo que tenemos planeado para hacer hoy y les he preguntado si saben de alguien que sepa de forjar armas blancas o algo así y me ha dicho Cordelia que mi padre sabe y que después él va a venir, así que puedo aprovechar y pedirle ayuda con lo que quiero hacer con el bastón de Mina y con la misma en la que estamos esperando a que el venga ellas me van a ayudar con mis poderes y ahora estamos yendo al salón y Myrtle se ha llevado a Mina a no sé donde y me ha dejado aquí el bastón.

-Probemos primero con la trasmutación, así Misty aprovecha y lo aprende al igual que el resto-dice Cordelia empezando a caminar delante de nosotras

-La transmutación es de cierta manera fácil pero difícil, me explico, es fácil porque tienen que visualizar el sitio donde quieren ir, pero lo difícil es centrar toda esa energía y centrarte en que quieres estar ahí y de repente-

-Apareces donde quieres-dice Queenie apareciendo detrás de mi asustándome

-¡Queenie!, ya vale-

-Me resulta demasiado divertido molestarte y ver lo que quieres hacer cuando quieras vengarte-dice sin dejar de reír

-Queenie por favor-le reprende Cordelia

-Está bien, muy bien perras, piensen en donde quieren estar ahora mismo e imagínense que están ahí y controlen su energía

-Está bien-digo antes de centrarme y ahora empieza lo bueno, centralizo bien donde está Queenie y de repente noto que una energía me envuelve y una corriente de aire y en un momento me veo detrás de ella y le toco el hombro y se va a girar para ver y yo vuelvo a desaparecer y aparezco a su otro lado y le hago lo mismo

-Ya basta-dice molesta y vuelve a pellizcarse y paro al sentir el dolor

-Jajajaja, que divertido ha sido y como lo he disfrutado-digo riendo

-Te vas a enterar pequeña perra, tu la llevas-me toca y vuelve a desaparecer y así empezamos a jugar, yo desaparezco y aparezco al lado de Misty

-Venga, la llevas- le toco el hombro y ella se ríe y desaparece al igual que las demás estamos jugando por un rato y hacía tiempo que no me divertía como una niña pequeña, pero esta felicidad no dura demasiado por que Coco aparece en un sitio donde no debía y acaba clavándose una de los barrotes altos de los laterales de la escuela, yo aparezco rápido donde ella está y la tomo con cuidado en mis brazos y aparezco en el salón

-¿Qué ha pasado?-dice Cordelia preocupada mientras se hace a un lado y yo la recuesto en el suelo

-Estábamos jugando y a ella le pasó lo mismo que a Zoe-explica Madison

-Alice, es turno de que intentes devolverle a la vida-dice Cordelia poniendo su mano en mi espalda, yo asiento con la cabeza y me acerco a su rostro y centro mi energía 

-Vitalum Vitalis...-