"Siempre había pensado que la vida no daba ninguna sorpresa, no por lo menos en mi caso, que siempre había comparado mi vida con la de los demás y ciertamente la calificaba de ordinaria y aburrida. ¡Que equivocación tan grande! Es hilarante la forma de pensar de un niño jaja, si en ese entonces hubiera tan siquiera imaginado lo que podría pasar... , pero ya es por demás el tratar de remendar el pasado, lo único que puedo hacer es vivir mi presente y esperar un mejor futuro aun cuando se me dificulte aguardar un futuro estando aquí atrapado".La caminata de regreso a casa se vuelve más pesada que nunca y mas si cargas una derrota a cuestas, sin embargo vencer, ganar cual es la diferencia si no hay forma de detener la masacre día tras día. Un río de lagrimas enjuaga la sangre de los cadáveres que yacen en posiciones irreales e incoherentes con el dolor que provoca en los que desgraciadamente no hemos tenido la suerte de acompañarles en su destino pues al ver los remanentes de la acometida, el dolor devora los sentidos es cuando suplicamos haber seguido la misma senda de los que reposan el descanso eterno ya sin dolor, sin pesar o temor.Me pregunto cuantas veces he visto este mismo final para un día... en el que el ardor de mis ojos ya no me permite ver la belleza del atardecer o que me olvidara de ver la bóveda nocturna bañada en estrellas, en el pasado me queje consecutivamente de no poder verlas por el brillo de la ciudad y ahora que nada me impide verlo rebosando de astros lo ignoro por el precio que hemos tenido que pagar por tener nuevamente a nuestro alcance tal fenómeno natural al verse consumidas las grandes urbes. Pero ya no busco estrellas ni contemplo ciudades, los días en los que los niños canturreaban y jugaban en grupo se fueron ahora solo oyes el crujir de escombros provocado por el corretear de las ratas que huyen, los mocosos temerosos se resguardan del fuego bélico, ya no tienen ganas de jugar, el miedo se refleja en sus ojos que han perdido vitalidad, hundidos en sus órbitas, enrojecidos por el llanto que ahogan para evitar ser localizados, aterrados ante la visión de una muerte lenta y dolorosa, y sin embargo en silencio ruegan por dejar esta existencia que solo se vieron obligados a vivir porque alguien quiso darles vida pero ¿a qué?, si ya no hay nada que le de a esas inocentes criaturas esperanzas para vivir con la muerte como su único escape real.
Esto es el mundo de hoy, esto es lo que hemos hecho siendo tan necios, es lo que la ira y la estupidez de nuestra raza sembró, el mundo trato de defenderse ante todo el deterioro que provoco en ella la plaga humana, ¡que irónico! al final nada de lo que hizo resulto tan efectivo pues la devastación y la eliminación de esa marabunta en comparación con lo que nuestra propia mano hizo la naturaleza no fue nada, pero la idiotez de unos cuantos nos llevo a una destrucción masiva de nosotros mismos una vez mas hemos demostrado que para erradicar algo que nos estorbe no tenemos rival somos portadores de tragedias, somos servidores del caos, solo nosotros podíamos crear una palabra así y hacerla una terrible realidad, la "destrucción". Somos los responsables de nuestro propio exterminio, mientras aun no definen nuestros líderes quien es el vencedor. "Vencedor" es una palabra risible después de vivir esta realidad pues ahora carece de valor y significado cuando perdiste todo lo que amabas, todo lo que realmente era importante y entonces ¿por qué sigo peleando?, ¿supervivencia?, no hace mucho que abandone mi deseo de vivir, entonces que me hace desplazarme, tal vez solo me he convertido en un autómata que se mueve por inercia o tal vez solo lo haga por darle algo de esperanza a esos niños para los que solo soy un desconocido o ... en silencio y con todo el egoísmo y la hipocresía que envuelve a mi especie quiero vivir si tal ves solo quiero sobrevivir sin importar quien se atraviese en mi camino colapsando vida tras vida solo para poder seguir destruyendo el planeta como antes de esta guerra... Je jeje je soy un mentiroso propagando mis pensamientos con filosofías baratas y por otra parte sosteniendo un arma y aniquilando a mis congéneres corriendo, buscando a los que se resguardan heridos, al encontrarlos agitados y temerosos solo les brindo el tiro de gracia justificándome pensando que lo hago por compasión cuando solamente estoy actuando como un energúmeno pisoteando cadáveres buscando mas municiones imaginado por primera vez la cara sedienta de sangre, sudorosa, con la vista expresando locura, si si así debo tenerla seguramente una horrenda sonrisa descompone mis facciones cuando me dispongo a terminar la existencia de alguien mas... sigo por todo el campo de batalla frenético, iracundo, disparando mis armas sin pausa alguna moviéndome sigilosamente entre la nube de polvo que se levanto tras el tropel al desatarse la nueva pelea, las hostilidades llenan de adrenalina mi cuerpo es lo que me hace actuar como un demonio no tal vez sea peor que eso, en esas circunstancia no me interesa si es casi un niño mi enemigo solo jalo del gatillo y continuo indagando entre las trincheras continuando como una verdadera pandemia acabando por completo con todas las desgraciadas existencias que se me atraviesen al fin de cuentas en un campo de batalla ¿quién es asesino?, si lo disfrazaremos con heroísmo peleando supuestamente por el bien de una nación, ¡que ridiculez! quien diablos piensa en esas cosas al calor de una lucha a muerte no ni siquiera evoco algún pensamiento mis sentidos se agudizan y me vuelvo una bestia, una que no puede ser comparada con un cazador, ellos lo hacen para poder comer, no de ninguna forma es comparable, comienzo a disfrutar cegando vidas convirtiéndome así en el apocalipsis para muchos. Mi mente desquiciada ya olvido el temor, ahora disfruta el olor a pólvora que ha terminado por consumir mi conciencia y mi razón los cuales sin percatarme se han convertido en otras victimas, no me importa ya no las necesito solo debo encontrar y congelar para siempre toda cosa que se mueva. ¡Ha malditos cadáveres! sus tiesas extremidades se atoran a los raigones de mi ropa, continuo buscando entre ellos a los que tratando de huir se refugian bajo los despojos maltrechos, lleno mis pulmones con el hedor de la sangre pudriéndose... que olor mas esplendido es como si su color, su textura, su aroma solo enmarcaran la victoria de los sobrevivientes. Esa fragancia me embriaga y me mueve lleno de satisfacción a pesar de mi torpe caminar por los obstáculos, ¿en qué momento se volvió tan divertido?, de pronto me sentí como si caminara por un gran parque de diversiones o un circo deben mirar jejeje... has visto ese otro payaso ha exagerado el colorete de sus mejillas ja ja ja ja... pero que risa a ese se le resbala algo pegajoso desde su orbita vacía ji ji ji... no aguanto la risa, no aguanto... momento en que instante termine de rodillas jeje mi felicidad fue demasiada y me he hincado sosteniendo mi estomago por el dolor que causa la risa ji ji, pero el dolor es demasiado mejor me levanto para tomar mas aire en mis pulmones con su completa extensión ja ja ha ha aghh.
-¿Qué pasa?
Mmmhhh
-¿Qué diablos es esto?
Al parecer me he enredado entre las viseras de algún muertito era lo único que faltaba no es suficiente la suciedad que me cargo, ahora tripas, colmándome de desesperación mi felicidad se fuga abriendo paso al enojo y la frustración ¿? Que pasa por más que camino y jalo estas cosas no tienen fin. Sin querer observo la vía que recorrí desde que quedara atrapado y un camino sanguinolento van dejando los intestinos expuestos siguiéndome, miro su sendero y por primera vez me doy cuenta de su origen que no es otro que mi estomago abierto de un costado, debido a la adrenalina el hecho paso desapercibido miro mi anterior ruta y descubro al culpable sobresaliendo de entre la carroña un puñal inerte atrapado en una mano amoratada que en mi frenesí yo mismo me había clavado y rasgado la piel, también en el lapso de locura había sacado por completo mis intestinos tratando de deshacerme de ellos. Ya consiente de mi situación y al darme cuenta de mi destino no puedo hacer otra cosa mas que reír je jeje je, ja jaja ja, como un llamado macabro retumba mi risa en la abandonada planicie continuo mi andar y por fin se detienen mis pasos al tropezar con una trinchera, caigo como en cámara lenta hasta una pila de cadáveres de los cuales pronto seré su eterna compañía y retorno a mi tonto filosofar en espera de lo inevitable, no sin antes servir como alimento a los carroñeros que a su vez se ven acosados por los verdaderos cazadores, mismos que la naturaleza provee y no les escupe en la cara como a los humanos...
