Yut Lung Lee; podía ser el joven más odiado o amado de la clase. Siempre tan atrevido y otras veces tan repugnante.
La única persona que realmente podía soportarlo era aquel joven de piercings en el rostro y mohicano púrpura de color despampanante. Sin duda no había alguien más.
Su clase de química estaba por dar culminación, Xiao no había puesto atención en nada de ello, no tenía tiempo. Odiaba experimentos, fórmulas, números y letras. Solamente se dedicaba a hacer desastres y sentirse el "fuckboy" de todo el plantel.Al oír del timbre supo que era momento de reunirse con su amigo el "afeminado". Le tenía de apodo así ya que, Yut solía tener un secreto sabido ya a voces.
Dispuesto a buscarlo pregunto por él en la siguiente clase.
- ¡Nenas...!. Y... E imbéciles de la clase. ¿Han visto a Yue por aquí?.
Uno de los muchachos de natación contesto con cierta molestia.
- ¿Quién te crees, estúpido?. No eres nadie, vago. Y has venido a insultarnos.
Expresó Alex desde su asiento, se había levantado pues, estaba listo para todo.
- ¡Ah!.
Xiao no podía perder tiempo compañeros tan tontos como él.
Terminó por lanzar un beso a las chicas de aquella clase.
Saliendo de ahí recordó que probablemente estaría en el baño. Solía ir a "arreglarse" y verse bastante "divo". Algo tan natural de ver.En aquel baño había un pequeño cuarto de dos por dos donde, nadie tenía acceso.
Yut no se veía a las afueras, tanto que se preocupo.
Nunca antes había desaparecido de tal manera.
Abrió la puerta y busco en todos los cubículos, no estaba teniendo éxito.Estaba por rendirse al comenzar a oír algunos ruidos extraños provenir de aquel lugar donde tenía prohibido entrar.
Ante sus amigos no solía mostrar miedo, y era así... Pero el mundo paranormal era otro asunto.
Trago saliva pesadamente y se arriesgó a morir en el intento.Abrió la puerta, ahí, en ese pequeño lugar se encontraba él. No podía creer lo que sus ojos veían. Creía que estaba mirando algo imposible, aunque, ese chico comenzaba a llamarle desde los adentros.
Pudo ver su dedo levantarse, llamarle con una voz bastante baja, cansada y agitada.
¿Qué me está pasando?. Hizo por pregunta inesperadamente a sus adentros. Quería detenerse mas, era imposible. Sus sucios deseos podían más que la razón de salir.
Cerró la puerta que se encontraba detrás de su espalda.
Acerco sus pasos hasta aquello que veía, se arrodillo sin pensarlo dos veces, terminó por recostarse en aquellas tersas piernas blancas.
Dos dedos desconocidos fueron introducidos en sus labios, no sabía de donde proveían, en realidad estaba confundido.
Cerró sus ojos, sentía cierto asco y deseo de estar ahí, tantas emociones juntas.Había alguien que no deseaba irse, que desde el principio decidió quedarse.
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Parte 1. ¿Qué está pasando?.
RandomNunca sabes que puede pasar en un día normal de clases, probablemente mueras o te enamores. ¿Qué te gustaría a ti?. Tienes dos opciones.