unique

192 34 22
                                    

—Yong ¿estas lista?

—Sip ya hice pipí ¿hiciste pipí?

—Oh no, ya regreso.

La pelinaranja beso la rubia cabeza de su novia y fue directo al baño.

Yong entro al auto y se sentó en el asiento de copiloto, saco su botella de jugo de fresa y bebió un poco, no quería tomárselo todo de una ya que le entrarían ganas de hacer pipí y el viaje será largo, estaba emocionada de volver a casa, fueron dos semanas de unas bien merecidas vacaciones junto a su novia, extrañaba su pequeño jardín de flores que tenia junto a Byul, Yong movió sus piecitos sonriendo.

—Listo.— Byul cerro la puerta y se acomodo en el asiento.

—¿Cerraste bien?

—Si.

—Excelente.

Byul encendió el auto y encendió la radio escuchando el pronostico del tiempo.

"Si viaja por la ruta 23 o 17esta noche, espere tormentas eléctricas severas e inundaciones en la mayoría de las áreas."

-—Mierda.- Resoplo Byul.

—¿Dijo tormentas?

La voz de Yong se corto, ella le temía a las tormentas.

—Esta bien mi vida, estaremos bien lo prometo.— Byul acaricio el muslo de Yong

Salieron a la carretera y se dirigieron hacia la ruta 17.

—No habrá tantas inundaciones en la 17 así que la tomaremos ¿de acuerdo?

Byul intento tranquilizar a su novia.

—Claro, pero si llego a escuchar alguna tormenta me voy a cagar. -Ambas rieron nerviosas

La oscuridad cayo junto a la lluvia y la visibilidad fue disminuyendo cada vez más, Yong y Byul se prepararon para lo peor, la lluvia se convirtió rápidamente en un aguacero peligroso, agarro el volante con fuerza mientras luchaba por ver a través de la lluvia cegadora, hasta que un ciervo salto a la carretera justo en frente de ellos, piso los frenos, se salió de la carretera y choco contra un árbol con el parachoques trasero, rompiendo la luz trasera, pero estaban bien, lamentablemente el ciervo no lo estaba.

Byul se detuvo y salió a comprobar los daños antes de volver a subir al auto.

—Fue solo la luz trasera y un rasguño en el parachoques.— Hablo Byul aliviada.

—Y.. ¿el ciervo?— Yong no estaba a nada de llorar.

—Amor..— Byul se acerco a Yong y acaricio su cabeza.— ..éramos nosotras o el.

—Esta bien..— Yong limpio su nariz.— ..lo siento.

—No es tu culpa.

Byul beso su cabeza y encendió el auto, Yong habló.

—¿No será mejor que nos detengamos en el primer lugar que encontremos para poder esperar a que pase la tormenta?

—Si, tienes razón.

Luego de otra media hora de viaje Byul visualizo algo mas adelante.

—Creo que por allí creo que hay un restaurante.

—Esperemos que sea un 24 horas.

Cuando se detuvieron en el restaurante, observaron el gran letrero neón que decía abierto, ambas dejaron escapar un suspiro de alivio, sonrieron y salieron cubriéndose con sus chaquetas apresurándose a entrar en el restaurante.

Entraron y sonrieron, la vista era muy agradable, habían mesas por todos lados, las paredes eran de un blanco perla y el piso tenia un diseño cuadrille blanco y negro, parecía un restaurante sacado de una película de los 50s, estuvieron calladas hasta que escucharon una dulce voz femenina.

vacationsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora