cap 2

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Recién estaba amaneciendo en un departamento de los suburbios. en un cuarto lleno de dibujos, cosas de softball y fotos de cierto niño elefante junto a cierta niña erizo.

Oscar dormía plácidamente hasta que una voz ronca y gruesa, que parecía tener la tenacidad de un acosador seguía llamando a Óscar, hasta que esté finalmente se levantó.

???: Hey, oscar, estoy seguro que debes ir a estudiar.

Óscar: *sin ganas de levantarse de su cama con cobijas con estampado de dinosaurios* pero es sábado.

Óscar se taparia la cabeza queriendo seguir durmiendo.

???: Es viernes.

Oscar: no yo,*saca su mano de las cobijas señalando un calendario* ayer fue viernes, lo sé porque mi mamá hizo ensalada de frutas.

Dante: estoy seguro que no lo hizo.

Óscar: ¿como vaz a saberlo? Estabas en mi cajón.

Dante: cierto, cierto, por cierto aprovechando que estás despierto, podrías sacarme de aquí, tus tijeras me miran raro.

Óscar: ¿Puedes esperar 5 minutos?

Dante: bien.

Óscar: gracias*se vuelve a dormir*

5 minutos después.

Dante: ¡¡DESPIERTA!!

Oscar saltaría de su cama, respirando rápidamente, viendo fijamente una especie de escritorio pequeño, además de que dejaba ver que usaba una pijama celeste, con estampado de  lunas menguantes y estrellas , Óscar soltaría un bostezo, seguido de un estiramiento de brazos, al sentarse en la orilla de su cama.

Dante: ¿Disfrutaste tus 5 minutos de sueño?

Óscar: *con sueño* Ugh, noo~, aún que me gustaría otra hora.

Dante: no te la daré, esas tijeras siguen vigilando me.

Óscar sacaría de su cama unas pantuflas poniéndose las, dirigiéndose al mueble, abriendo el cajón, rompiendo de paso la pequeña manija que tenía. Óscar soltó la manija, viendo fijamente a Dante el cual estaba junto a unas tijeras que tenían unos ojos locos pegadas en ellas. Óscar al ver las solo soltó un gruñido cansado, para seguido tomar las tijeras y quitarle los ojos, tirando los a unas esquina del cuarto volviendo a guardar las tijeras, las cuales parecían haberse comprimido la parte que Óscar había tomado. Cuando estaba apunto de cerrar el cajón, Dante le detuvo.

Dante: aprovechando, porque no vuelves a dormir conmigo puesto.

Óscar: hmmm, bien, pero quiero dormir hasta las *gira su cabeza mirando un reloj colgado en la pared* las 8.

Dante: trato.

Óscar tomaría el colgante, poniéndose lo, dejando ver mejor el mismo, la joya del mismo era menos opaca, además de que el óxido era menos notorio.

Óscar: vámonos a mimir.

Óscar se acuesta delicadamente en su cama, volviéndose a dormir.

En el reino de los sueños de Óscar.

Se podía ver a Óscar rodeado de una infinita oscuridad. Óscar abrió los ojos viendo todo su alrededor, lo único que veía la gran y prácticamente infinita oscuridad, y un perro negro en pose de reso. Óscar no hubiera notado que él estaba ahí, de no ser por el movimiento circular que hacia, casi como si el viento fuera el que lo moviera. De pronto algo hizo que mirara hacia una dirección específica, viendo fijamente a Algo que no podía describir apropiadamente, parecía un gato esfinge, pero no tenía bigotes o, un exceso de piel, o algo que le pudiera ayudar a saber que era exactamente, además de que tenía de pelaje, era parte de su mandíbula, teniendo una poca cantidad de pelos, como una barba de pocos días, y sin contar esa larga cabellera despeinada que tenia, no era un gato esfinge o si no, no tendría pelaje, Sus ropas lo hacían ver cómo una especie de motociclista combinado con un rockero, esté sostenía una gran espada  de dos filos, echa con una especie de roca volcánica, junto a 4 colmillos en la guarda y un rubí en el pomo de la empuñadura.

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⏰ Última actualización: Aug 08, 2021 ⏰

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