*Cap 2*

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Me desperté a media noche por una horrible pesadilla que me atormentaba desde hace varios dias...

En el sueño, estaba sentada en lo alto de un manzano, disfrutando el paisaje.
Se veia un lago helado, muchos niños patinando y jugando en él... Era perfecto.
Al cabo de un rato, un chico alto y joven, me llamaba para que bajara y una vez en el suelo, podia ver que ese chico no tenia rostro..pero no me asustaba, me parecia raro..
El extraño chico sin rostro me cogía de la mano y me llevaba através de un bosque, hasta llegar a una entrada abarrotada de
enredaderas y flores...

Entonces él desaparecia entre las plantas..sin dejar rastro..y cuando yo entraba, empezaba a caer y caer... entonces me desperté de un salto, con un terrible dolor de cabeza..

-AAH!- grité al despertarme.

Rapidamente entró Mishi a la habitación y se tumbó a mi lado para calmarme..

-Gracias pequeña...-susurré, mkentras la acariciaba...hasta que me dormí.

A la mañana siguiente:

-¡Darya! ¡Despierta! ¡Tu padre acaba de llegar!- gritó Madame Pomfrey.

-Mi padre? Dijo mi padre? Hace un par de años que se fué para ir en busca de algo...no se precisamente el que...

Tenia ganas de verlo, ya que nunca estaba en casa, y no sé practicamente nada acerca de su vida... Solo que es el jefe de una gran empresa que se dedica a exterminar todo aquello que tenga un "origen sucio"... (no se que significa eso, pero estoy segura que no era nada bueno...)

-¡¡Enseguida bajo!!-rapidamente me vestí mas o menos bien para la ocasión..ya que no todos los dias venia papá de visita.

Cuando bajé estaba mi padre sentado en el comedor, y enseguida que me vió, se puso en pié y me dió un abrazo.
Ese abrazo fue muy incómodo..era como abrazar a un extraño que ahora llamaría "papá"...

-Hola padre...

-Hija mia..cuanto tiempo..

-Dos años.-respondí, rencorosa.

-De veras lo siento, mi pequeña, pero no he venido para quedarme...

-¡¿Que?! Pero si acabas de llegar...- dije, sintiendo pena, ya que no podria pasar tiempo con él despues de tanto...

-Lo sé, pero era para comunicarte que en un par de años cumples 18, y quiero que trabajes conmigo en la busca de muggles..

¿¡Muggles?! ¿Que són "Muggles?
Bueno, de todas formas no pensaba unirme a él...

Mi sueño es ser libre, escribir mi propia
história..y asi no lo voy a conseguir..

-Papá, quiero salir fuera, decubrir el mundo que nos rodea y los secretos que se esconden en él... ¡No quiero ser tu prisionera en esta oscura y fria mansion para siempre!

-Lo siento hija, la decisión esta tomada. Ahora ve a tu clase con Matheo, que lo vas a necesitar mucho para el trabajo- dijo seriamente.

Enfadada, sali corriendo del comedor para ir al jardín, donde supuestamente debería estarme esperando Matheo.
Lo llamé y lo busqué por todas partes..

-¿Matheo? ¿Estas alli? - seguí sin respuesta.
Entonces me di cuenta de que habia un extraño rastro de piedrecitas blancas, formando una hilera.. Asi que decidí seguirlas.
Cuando la hilera llegó a su fin, estaba en la parte trasera del patio. No entendia nada..hasta que..

-Buu!- gritó alguien detrás de mí.

Instintivamente le di un golpe en la cara y cayó al suelo.

-¿Quien eres?- grité.

- ¡AAU! ¡Soy yo! ¡Matheo!

- Dios mio, lo siento muchisimo- le ayudé a levantarse.
-Debes aprender a no asustar así a la gente. - le dije.

-De acuerdo, lo siento...

Después de eso, fuimos a entrenar, y cuando por fin conseguí acertar, me puse tan contenta que salté a los brazos de Matheo para abrazarle...
Rapidamente, nos separamos y me disculpé.

-Am.. lo siento...me emocioné-dije disculpandome, sonrojada.

-No te preocupes..esta bien- se sonrojó.

-Mejor me voy..

Salí corriendo hacia mi cuarto y me encerré.

Me sentia avergonzada por lo que acababa de pasar.. ¿porque le abrazé? Seguro pensará que soy una rarita...
Despues de darle mil vueltas, decidí ir a la biblioteca para despejarme un rato..

Todavia tenia la duda de saber porque mi padre no queria que fuese libre..porque queria tenerme bajo su mando, por el resto de mi vida... Necesitaba descubrirlo..

ENCERRADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora