CAPÍTULO UNO

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CAPÍTULO UNO

Estoy encerrada, completa y absolutamente aterrada, tengo cinta adhesiva en la boca para silenciarme y después tengo más en las manos para que me sea imposible mover mi torso. Me han dado un golpe en la cabeza demasiado fuerte como para poder saber lo que estoy viendo. Pero de repente no puedo respirar, aparece humo, no se de donde pero siento como me entra por los pulmones y tengo ganas de toser pero no puedo por la cinta pegada a mis labios, creo que me estoy desmayando.

De repente aparezco en un barco, llevo una camisa, un corset encima y unos pantalones muy anchos, así que estoy cómoda. Como si nada de lo anterior hubiera sucedido me voy hacia el timón y empiezo a navegar.

-¿Qué crees que estás haciendo?- una voz ruge a detrás de mí y desaparece parte de mi seguridad, entonces me giro sin pensarlo dos veces, lo que no sabia que pasaria es que un esqueleto con ropa de pirata viniera hacia mí y me estuviera apuntando con una catana, si, un pirata con una catana.

Ahí es cuando me doy cuenta de que tengo que correr y lo hago, mis piernas se mueven a toda velocidad, y así hasta que en uno de mis pestañeos aparezco en una pista de atletismo corriendo por mi vida, pero ahora algo retumba, el suelo retumba, me giro y me quedo flipando observando como dos dinosaurios me persiguen por detrás. Un paso suyo es como todo mi cuerpo. ¡Dios mío, voy a morir!Si me ha costado darme cuenta de ello pero no paro de morir y aparecer en otras partes para volver a ser perseguida por la muerte.

Yo sigo corriendo, porque la esperanza nunca se pierde.

De repente escucho a una persona gritando, pero viene de fuera.

- ¡Kathy Coper, mueve ese culo sarnoso si no quieres llegar tarde y a consecuencia estar castigada por tu respectiva madre, es decir, yo!- Sip, esa es mi madre gritando y despertándome de un sueño extraño pero a la vez divertido.

-Mmmmm, normalmente en las películas las madres despiertan a sus hijas con un beso y un desayuno delicioso en la cama- Digo mientras meto la cabeza debajo de la almohada.

-Eso lo habrás visto en las películas de la Barbie, pero el caso es que tu no tienes trabajo como ella, tampoco sacas notazas y no antes de que lo digas no eres una sirena, ya lo hemos hablado si lo fueras ya te habrías convertido- siempre le a gustado destruirme los sueños desde pequeña.

Se va de la habitación y ahí es cuando decido coger mi teléfono y darme cuenta de que son las siete y media y no me va a dar para llegar. Así que salto de la cama literalmente, y no me caigo, todo un logro. No voy a desayunar por que no llego así que me lavo los dientes directamente. Sí es el primer día de clase y voy a llegar tarde como no. Me pongo lo que me había preparado la noche anterior (lo hice porque mi madre me amenazo con hacerme comer zanahorias para la merienda, y eso no seria un castigo sino que un pecado para mi persona), voy a empezar segundo de bachillerato. ¿Nerviosa? No. Alomejor. Bueno un poco. Vale si, me has pillado.

Bajo a toda prisa con unos pantalos de campana negros y un top lila, fuera me espera, con cara de amargado, mi mejor amigo.

-Holaaa- le digo con entusiasmo me pongo el casco y me subo detrás de él en su moto.

-Llegas tarde, cinco minutos Kathy, ale ya se ha enfadado el crío.

-Oye,¿ no crees que podrías ser un poco más comprensivo?, he tenido un sueño rarísimo y me he despertado gritando y sudando, ha sido horrible- Se que lo que le cuento no es del todo cierto,pero no es mentira simplemente una sencilla exageración.

-No engañas a nadie pequeña- me dice el muy imbécil riendose y ahora si arranca y nos vamos al instituto.


Por el camino veo como mucha gente corre por llegar pronto, o simplemente por llegar. Me siento tan mal, me gustaría darles mi asiento para que no tuvieran que correr, pero a Mike le pega un soponcio y si se muere a ver luego que le digo yo a su madre.

Mike y yo somos amigos desde los nueve años y se podría decir que soy la favorita en su casa, mi mejor amigo tiene cuatro hermanos, dos mayores y otros dos más pequeños yo soy la chica de la casa, todos me adoran, bueno al menos eso creo.

Cuando llegamos me bajo a toda prisa pàra ir a saludar a Lydia, si como Lydia Bennet, esta chica merece un premio por aguantarme tantas horas seguidas, bueno basta que le demos un premio por aguantarme una hora, ¡Hay que darle un premio cada hora! No tengo tanto dinero, y todo esto se me pasa por la cabeza en pocos segundos porque enseguida la tengo encima abrazándome.

-Estas puñeteramente buena, si no fueras hetero me lanzaba- sip, siempre igual, soy irresistible, no hay más.

-Tu sigue soñando- y me sale una carcajada enorme.

-Vamos a darnos prisa- Me giro para avisar a Mike pero el muy cabrón ya se ha ido, siempre sin avisar, luego me regaña por ser sobreprotectora, pero si no aparece y me preocupo ¿que coño quiere que haga?

-Ves tirando tu, yo voy a buscar a Mike.

-Vale, este chico siempre te lleva por la calle de la amargura- como lo sabe de bien.


Decido empezar mi búsqueda por el pasillo de la derecha. Me cuesta caminar por el alboroto de la gente que se pelea por saber en qué clase están, como se nota que son niños de primero, los pobres van muy perdidos, hasta he visto a uno temblando.

Nada que no aparece, bueno voy a salir fuera del instituto alomejor ha querido mover la moto, no seria la primera vez.

Cuando llego al aparcamiento me quedo igual, este muchacho no aparece por ninguna parte, me estoy poniendo nerviosa.

Marco el teléfono del idiota que tengo como mejor amigo, un tono, dos tonos... y me cuelga. Ya esta si le pasa algo que se muera, de todas maneras no es más que la persona con la que he pasado los mejores años de mi vida.

De repente, lo veo todo oscuro, alguien me esta tapando los ojos, tengo una bolsa en la cabeza, ahora si esto no es un sueño, dos hombres, me estan cogiendo.

-¿¡¡Que cojones me estais haciendo!!!!?? SOLTADME AHORA MSIMOOO- Ni si quiera se si me escucha bien, pero me estan arrastrando. ¡OOO dios me estan metiendo en un coche! A no, si me quieren violar o matar van a tener que luchar en contra mi. Empiezo a pegar patadas y puñetazos al aire antes de meterme en el coche.

Mierda, ya estoy dentro.

BrokeyouWhere stories live. Discover now