Her heart belonged to someone who couldn't stay

Use my best colors for your portrait

-Dahyun-

El sonido de una música inexistente me despertó de mi letargo, era una canción que no conocía pero que a medida que la escuchaba se volvía conocida, al punto de convertirse en mi favorita. Me levante de la cama sintiendo la oscura habitación llenarse de color y de objetos, no recordaba nada pero a medida que veía entendía la función de cada uno de los objetos. 

Me vestí con mi uniforme y partí a la escuela, sentía que el mundo era un lienzo que se pintaba a medida que caminaba, supongo que es parte de crecer. Llegue a la escuela solitaria en la que todos parecían conocerse y en la que yo no tenia ni un simple amigo. 

No me siento cómoda aquí, es como si no encajara.

Me senté en mi puesto y trate de dormir, pero el timbre me trajo de vuelta a la realidad. Mire por la ventana a aquella linda chica que siempre llamaba mi atención, era amiga de todos, alegre y positiva. En ocasiones la descubría mirándome y yo giraba la cabeza asustada. 

Nunca hemos hablado, pero siento como si pudiera entenderme. 

Supongo que la soledad me esta ahogando. 

Desperté con el atardecer azotando contra mi rostro. Sana estaba limpiando la pizarra, no había ni una simple alma en la escuela. Es mi momento de hablar con ella, aunque se sienta imposible. La mire durante un rato hasta que dejo limpio el pizarrón y volteo a verme. Pude sentir mis mejillas arder, así que cubrí mi rostro para que no lo notara.

-Siempre haces lo mismo-dijo con un tono algo burlesco-Me miras todo el día, pero en cuanto yo lo hago te avergüenzas. ¿Te gusto verdad?

-¿Que estas diciendo?-dije quitándome las manos de mi rostro, ella estaba a mi lado a tan solo unos centímetros. 

-La verdad es que me aburrí de esperar a que me hablaras.

-¿Querías que te hablara?-pregunte sorprendida.

-Si.

-¿Por que?

-Por que vine a este mundo solo a enamorarme de ti.

-¿Que estas hablando?-sentía que mi cara iba a explotar de la vergüenza.

-¿Crees que estoy bromeando?

-Si. 

-Sal conmigo.

-No es gracioso.

-¿No te gusto?

-No.

-¿Entonces puedo ser tu amiga hasta que te des cuenta cuanto me amas? 

-Tienes demasiada confianza en ti misma.

-Solo un poco. 

Tome mis cosas y ella me siguió por la escuela hasta la salida, cuando la miraba ella sonreía. 

-¿Por que me sigues? ve a casa

-Tu eres mi casa-dijo con una sonrisa triste.

-No se de donde sacas todas tus frases cursis, pero si quieres que salga contigo deberías ir mas despacio.

-No tenemos tiempo.

-Siempre lo hay.

Me aleje de aquella chica que tenia mi corazón latiendo al mil por hora, solo para comenzar un nuevo día donde ella me ignoraba. Luego del día de ayer esperaba que siguiera insistiendo, la verdad es que tenia mucha curiosidad por ella, pero que fuera tan directa me asusto un poco, principalmente por que pensaba que estaba jugando conmigo.