¿Cuál es tú nombre?

Capitulo 5

Yibo corrió mientras se ponía su abrigo para poder alcanzar a Fan Xing, una vez que logro  alcanzo lo abrazo con su mano derecha mientras le sonreía-¡Espérame pequeño Fan Fan!

¿Qué sucede Yibo? creí que estabas muy ocupado por despedirte del mesero-musito Fan Xing mientras trataba de quitar el brazo que Yibo había puesto sobre él.

Yibo se sorprendió un poco por las palabras de Fan Xing ¿se notó tanto su interés por Xiao Zhan que hasta su amigo lo noto?, y ¿si Fan Xing lo noto entonces los hermanos de Zhan también lo hicieron? .Después de todo ellos todavía estaban cerca cuando él y Zhan se despidieron prometiéndose encontrar el día de mañana en la cafetería. ¡Qué vergüenza!, Yibo no pudo evitar que sus orejas se pusieran rojas por el descubrimiento que tuvo. Mientras Fan Xing ponía los ojos en blanco por lo estúpido que puede comportase Wang Yibo, ambos continuaron su camino rumbo al departamento de Fan Xing.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

Por su parte Xiao Zhan se encontraba en su baño tomando una ducha con agua caliente, de su mente no podía salir la imagen de Yibo, sus ojos castaños, la coqueta sonrisa que le dio cuando ambos se despidieron prometiéndose encontrar mañana...¡Mañana!, en ese momento Zhan sintió una sensación burbujeante que le recorría todo el estómago ¡realmente se verían mañana! ¿Cómo pudo aceptar?

En su mente pasaron un sin fin de ideas y pensamientos de como se llevaría el encuentro entre ambos. De tan solo imaginarlo sintió una enorme vergüenza automáticamente llevo sus manos a su rostro. Pero un suave toque a la puerta del baño lo regreso a la realidad.

-Pequeño Zhan la cena esta lista, baja cuando termines- Xuan Lu sonreía de oreja a oreja, tras el otro lado de la puerta. Desde niños conocía tan bien a su hermano que podría apostar que en este preciso momento ocurría algo fantástico en su vida.

-¡Si Shijie, bajo en seguida! -respondía Zhan mientras cerraba las llaves de la regadera, con cuidado de no resbalarse con el agua que estaba regada tomo la toalla que se encontraba a un lado de él. Seco con cuidado su cuerpo mientras caminaba a tomar la ropa que había traído consigo. Una vez que tenía puestos los pantalones vio el largo espejo que se encontraba en el baño, aunque estaba un poco empañado por el vapor del agua, Zhan aun podía observar su reflejo a través de él. Diviso con cierta claridad la cicatriz que tenía en el lado derecho de su abdomen. Realmente le parecía rara, se quedó un momento más frente el espejo para observarla mejor. Era un poco grande casi llegaba a su pelvis, era de un color más claro que el de su piel. Era verdaderamente muy extraño, por más que intento recabar en cada uno de sus recuerdos no sabía nada de aquella cicatriz, era como si por arte de magia hubiera aparecido en su cuerpo.

Decidió ya no prestarle más atención, se puso su playera blanca y salió del baño rumbo al comedor donde se encontraban sus hermana sirviendo en unos tazones de color blanco su deliciosa sopa de loto y costilla de cerdo, en otro palto de mayor tamaño sirvió un pescado frito con aun junto a una ensalada de brócoli. El olor que desprendían los platillos era verdaderamente delicioso, camino hasta la mesa y se sentó en su respectivo lugar.