Cuando mi madre me dio a luz, nunca pensé que el brillo del mundo fuese tan fuerte. Mis ojos no vislumbraban bien la salida, estaba tan callada tratando de mejorar la visión de mis ojos cuando de repente siento unas duras manos golpeándome los glúteos, las cuales hacen que mis lágrimas corran por mis suaves y delicadas mejillas celestiales.
Después de ese gran dolor, me acobije en las dulces y esplendorosas manos de mi madre Nebulosa, que con serena y lírica voz como el viento de las mañanas de otoño me cantó: Tan hermosa eres como las estrellas, brillante como las auroras, bella como las estelas. Luego de su melodioso canto llamó a mi padre y le susurro mi nombre... Estela, EsteladeldesiertoRossoGonzaga.
A partir de ese instante, mi vida fue llena de deliciosos y cálidos años disfrutando de la compañía de mis padres y amigos.
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La Chica de las 1000 y 1 Estrellas
Non-Fiction•••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••}De Becqeare Homevantes{•••••••••••••••••••••••••••••• Una historia impactante en la cual Estela, una chica común y corriente, pasa las peores etapas que un ser humano pudiese pensar. Este libro capturará su...
