One-shot : Sebastian Michaelis.

Parte única.

       “Soy la persona más feliz del mundo cuando me dices "hola" o me sonríes,

      porque sé que, aunque haya sido para solo un segundo, has pensado en mi.”

 

                              ~ ¡¿Enamorado de mi?!~

Tener que ocultar cosas como sentimientos que se sienten hacia alguien más llega ser un poco doloroso, no saber si aquella persona siente lo mismo que tú pero no puedes hacer nada porque una característica que casi odias te lo impide y hablo de la timidez…si desde que tengo memoria siempre he sido tímida y no puedo evitarlo a pesar que intento salir de aquella burbujita en el que me oculto por miedo. La primera vez en que me enamoré de un chico me encontraba en primer año de secundaria y por timidez nunca se lo dije sin embargo mi corazón fue roto al verlo con una de mis amigas, una a quien le había hablado sobre eso y sobre él, tras ver esa escena prometí jamás enamorarme otra vez, aunque tal vez solo tal vez esa promesa ya la haya roto.

- ¡Sophie! ¡rápido, tenemos que irnos a la preparatoria! – ese era mi hermano mayor llamado Richard nos llevamos un año, el tiene dieciocho y pronto se irá a la universidad mientras tanto yo cuento con diecisiete años y curso el segundo de preparatoria. - ¡Sophie! ¡¿qué esperas?! – gritó de nuevo mi hermano.

- ¡Ya voy! – respondí molesta, bajé las escaleras con mi mochila para irnos de una vez, mi nombre completo es Sophie Holmes, dentro de mi hogar me comporto diferente pero saliendo de ella me encierro en mi burbuja, en mi mundo en donde nadie podría lastimarme. Durante el camino a la preparatoria mi hermano y yo casi no hablamos ya que el conduce y no le gusta distraerse así que siempre todos los días escucho música y hoy no era la excepción miraba el paisaje y al parecer seria un día nublado típico de Londres.

            Llegamos a la preparatoria, Richard se fue rápidamente a sus clases yo caminaba con calma sin quitarme los auriculares de mis oídos pasando por los pasillos del colegio, uno de los más prestigiados a mi parecer llamado Saint James, sigo caminado por los pasillos hasta que alguien me saluda con la mano se trata de ni más ni menos que mi mejor amiga llamada Jazmín.

- ¡Hola Sophie! – me saludó con una beso a la mejilla, es casi lo contrario a mi es un poco ¿cómo decirlo? loca…quizás sea la palabra correcta, ella ha intentado más de mil maneras sacarme de mi burbuja. - ¿Cómo estás?

- ¿Eh? ¿por qué esa pregunta? Jazmín, nos vimos ayer aquí…en la preparatoria…hoy es viernes.

- Sabes muy bien que no es eso, si no de lo otro…ya sabes. – suspiré

- Jazmín...no quiero hablar de eso ¿sí? además él es popular entre toda la preparatoria, él es perfecto en todo…

- Y por eso te enamoraste ¿verdad? – me despabilé y seguí caminando hacia el aula ignorando olímpicamente a Jazmín y su rostro de picardía. – Sophie ¡qué grosera eres! deberías decírselo.

- Ja…jamás. – comencé a tartamudear, haciendo que ella comenzara a reír así que tomé asiento hasta la esquina del aula con la ventana a un lado, ella me siguió y tomó asiento a un lado de mi con su mirada inquisitiva encima de mí. – De…deja de verme así.

- ¿Es en serio? – preguntó. - ¿Por qué no te le declaras?

- ¡No! siento que si lo hago, él se reirá de mi.

- No lo hará, conozco a Sebastian y sé que no es ese tipo de chico. – efectivamente, el chico del que me enamoré se llama Sebastian Michaelis, uno de los más populares dentro de la preparatoria, un chico realmente atractivo de ojos hermosos e hipnotizantes de un color peculiar…aquellos ojos carmesí en los que sería fácil perderse ni siquiera sé el por qué de mi enamoramiento hacia él si casi o nunca hemos entablado una conversación “normal”. Puede que haya sucedido por ser tan caballeroso, educado…por tantas cualidades que lo hacen perfecto ¡¿pero que pienso?! – Tierra, llamando a Sophie, ¡Sophie!