Black&White || h.s ||

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Harry

Caminaba a paso lento, oyendo mis pisadas contra la acera de cemento. Estabamos en pleno invierno aqui en lóndres y decidí salir y alejarme de todos mis problemas. No todos tienen un padre alcólico y loco. Los recuerdos empezaron a inundar mi mente.

Flashback

- Papá - llamé, provocando que dejara de beber la botella de cerveza y su atención fuera puesta en mi. Tenía miedo. Apreté a teddy más cerca de mí.

- ¿Que quieres? - espetó molesto. Me estremecí por su tono de voz. Esto iba a terminar mal.

- ¿Po.. podrías leerme un cuento? - miré mis dedos y empezé a jugar con ellos. Solo quería a mamá. Las lágrimas empezaron a inundar mis ojos pero las retuve. Sabia que si lloraba me pegaría.

- ¿Un cuento? - rió. Asentí - ¿Que edad tienes? ¿Cinco años? - llevó la botella de cerveza de nuevo a su boca sin despegar su mirada de la mía. Fruncí mis labios.

- Tengo cinco - bajé mi cabeza.

- Bueno pues, crece ya - gruñó. Asentí y se me escapó un sollozo de la garganta.  Me observó con ira y molestia, se puso de pie acercandose a mí.

- ¿que te he dicho sobre llorar eh? - me empujo por los hombros provocando que cayera al suelo - idiota - pateó mi estómago provocando que tosiera y que las lágrimas inunden mis mejillas.

- Perdoname papá - sollozé y cubrí mi rostro con teddy. ¿porque te fuiste mamá?

- Debí haber empujado de las escaleras a tu madre cuando me enteré que estaba embarazada de ti - escupió y me pateó de nuevo en el mismo lugar.

Gemí retorciendome de dolor en el suelo.

- Perdón - dije con dificultad. - Porfavor para - sollozé.

- ¡Callate! - gritó. Me levanto jalandome del cabello y me tiró con fuerza al suelo y al instante todo se volvió negro.

Fin del flashback

Aún le temía, pero no lo demostraba. Cambié mi aspecto. Piercing en el labio, en el lóbulo de la oreja derecha y en la ceja. Tatuajes en todos mis brazos, pecho y espalda. Vestimenta negra y escalofriante. Una sonrisa apareció en mi rostro por lo ultimo, pero rapidamente la borré.

Encendí un cigarrillo inhalando el humo llevandolo directo a mis pulmones.

A los 15 años, me metí en el mundo de las drogas y el alcohol, quería olvidar mi pasado, quería volver a ver mi mundo como antes. No ver todo de color blanco y negro.

Me metí en peleas. Fuí a la correccional un par de veces. Todos me conocen. Todos me temen.

Mis pensamientos se vieron interrumpidos por unos gritos provenientes de un callejón. Tiré y pisé el cigarrilo para acercarme un poco y empezar a oír la conversación.

- Porfavor - sollozó una voz femenina - Les daré todo mi dinero, pero porfavor sueltenme - suplicó

- No nena, nos divertiremos un rato - dijo una voz masculina.

Oí un grito proveniente de la chica. Y fué ahí cuando reaccioné.

- Suéltala - tensé mi mandíbula y cerré los puños. Observé a la chica que se encontraba solo en sujetador y con las manos del tipo en su cintura.

- Uhh, Harry Styles - aplaudió. Rechiné los dientes - ¿quieres unirte? - rió. Tomó a la chica, que se encontraba llorando abrazandose a si misma de las caderas para acercarla a él y besar su cuello. La chica trató de empujarlo, recibiendo una bofetada de parte del chico.

Me acerqué a él estampando mi puño contra su mandíbula. Lo tiré al suelo, y pegué en su nariz tan fuerte con mi puño escuchando un crack! Que me hizo sonreir. Me pusé de pie y observé a los otros dos que miraban atónitos la escena.

- ¿Siguiente? - los amenazé con la mirada y ambos salieron corriendo. Sonreí. Un sollozo me sacó de mi trance y rapidamente me agache al lado de la chica.

- ¿Te encuentras bien? - preocupación reflejaban mis ojos. Ella negó con la cabeza y derramo más lágrimas. Busqué con la mirada su playera, encontrandola en un rincón toda destrozada. Bufé y me saqué la chaqueta que llevaba puesta. Se la coloqué subiendo el cierre y la tomé en brazos. Ella me abrazó por el cuello y hundió su rostro en mi cuello.

- Tranquila, ahora estas a salvo - acaricié su cabello sintiendo que su cuerpo empezaba a relajarse.

Caminé hasta mi departamento atrayendo la mirada de varias personas que vivian ahí. Las ignoré y subí las escaleras. Queria evitar a las personas del ascensor.

Metí la llave en el cerrojo y abrí la puerta. Caminé hasta la habitación y la deposité en mi cama.

Me sorprendí al encontrarla dormida. Seguro se durmió en el camino. Sonreí, pero rapidamente la quité. Suspiré y me dirigí al armario. Tomé una playera de mi armario y caminé hacia la chica. Con mucho cuidado le quité mi chaqueta. No pude evitar quedar mirando sus pechos y su abdomen plano. Observé su cabello rubio, su piel tan blanca y sus ojos, que no he logrado ver aún. Sentí una electricidad cuando su mano rozó la mía al moverse un poco.

Suspiré, le coloqué la playera y la abrigué con el edredón de mi cama.

Solo es una chica más Harry, una chica más.

WII! espero que les haya gustado ❤, Voten, gracias