...Julia ?

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Salí de mi trabajo para luego ir hacia mi coche y acceder a este, para luego conducir dirección a mi cálido hogar, donde ahí me esperaría mi gran esposa y mis hijos que tanto quiero. Trabajo como Superintendente en el Cuerpo Nacional de Los Santos, fuí puesto ahí por mi segundo trabajo, o así se le podía llamar, mi segundo trabajo es como subdirector del C.N.I, gracias a eso conseguí muchos enemigos y una bala entre ceja y ceja asegurada, ese hecho me preocupaba, pero más por mi familia que por mi mismo, ya que también la madre de mis hijos trabaja en el C.N.I, de hecho tenía más poder que yo.

Al finalmente llegar a mi morada, me pareció raro ver todas las luces de la casa apagadas, entré algo confundido, sentí como el hogar carecía de alguna presencia humana. Sentí como un escalofrío recorría mi espalda, me dirigí directo a la cocina a paso rápido y ahí encontré a mi bella esposa de cabellos pelirrojos y ojitos verdes que normalmente relucían con un brillo que la caracterizaba, pero esta vez aquellas verdes orbes se sentían frías y apagadas, ignoré ese hecho y abracé a aquella mujer en forma de saludo mientras cerraba los ojos para disfrutar más del momento. Lo que sentí que fueron segundos realmente fueron horas, me encontraba de rodillas en el suelo de la cocina y mis brazos rodeaban al cuerpo de la de ojos esmeralda, pero ahora estaba sin vida. Tardé un poco en reaccionar debido al shock y la miré a la cara, con unas manchas de color carmesí que manchaban su pálido rostro, unas pocas lágrimas salieron de mis ojos y recorrieron mis mejillas, lo que fueron unas pocas se convitieron en un río de lágrimas saladas llenas de sentimientos y gritos y sollozos llenos de dolor salían de mi boca.

- ¡¿Julia, Julia?! ¡¿Qué te ha pasado?!

Pregunté con esperanzas de que despertase mientras me frotaba las lágrimas de mi cara, pero no lo hizo y tampoco respondió a mi sufrimiento a causa de su corazón abierto y ensangrentado, junté mis labios junto a los del cadáver, ensuciandome de sangre mientras la rodeaba aún con más fuerza con mis brazos y la dejé con cuidado en el suelo ensangrentado, esperaba que esto solo sea un muy mal sueño.

¿Jack Conway? | ONE SHOTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora