Getting Closer

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Para Phillip, hablar de sus sentimientos nunca había sido algo que le avergonzara, tampoco algo que le impidiera seguir con su día a día, entonces ¿Por qué este chico le estaba volteando la vida? Y es que sin darse cuenta todo su día comenzó a girar entorno al pelinegro con el que últimamente se había vuelto más cercano.

Cansado de que ninguna de sus ideas para los videos fuese como lo esperado decidió dejar un momento la computadora y se recostó en su cama para relajarse, inmediatamente abriendo el chat con Missa para ver en que se habían quedado hablando, contesto con un par de mensajes y un sticker y bloqueo el teléfono de nuevo. La felicidad y emoción que sentía al mensajearse con el mexicano no le resultaba normal, desde la primera hora del día hasta en la noche le gustaba hablar con él, ya sea por mensaje o en llamada en discord.

Cerro los ojos y dejo que los recuerdos lo llevaran hasta donde todo empezó, porque claramente una cosa es que te guste alguien y no saberlo y otra es cuando ya sabes que te gusta y debes lidiar con lo que conlleva. Su tortura sentimental comenzó un día como cualquier otro, había terminado de grabar uno de sus videos y estaba agotado, sabía que debía iniciar la edición de este, pero procrastinar parecía una mejor opción, por lo que sin dudarlo abrió Instagram y empezó a tontear con los filtros y a mirar historias, respondió un par antes de ponerse a ver los posts de su feed.

La notificación de que Missa le había respondido llamo su atención por lo que continuaron mensajeando durante un rato hasta que el pelinegro le propuso hablar por discord mientras editaba un video para hacerle compañía, se sentó de nuevo en la computadora y comenzaron la llamada de voz, al inicio estaba nervioso ya que había pasado un tiempo desde que habían hablado, pero con el paso de los minutos aquella sensación fue reemplazada con comodidad y risas.

Las horas pasaron y entre gritos, memes e imitaciones de personajes a ambos les dio las altas horas de la madrugada, más a Phillip ya que la diferencia horaria estaba ahí, debido a la falta de sueño se quedo admirando el techo con una sonrisa que cualquiera notaria, la compañía era algo que siempre apreciaba.

Salió de su ensoñación al escuchar a Missa bostezar – ey... ¿sigues ahí phillip? – preguntó adormilado dudando si su amigo ya se había quedado dormido o no, paso sus manos por su rostro tratando de quitarse el sueño, murmuro una respuesta que ni el mismo entendió, pero intentado dar señales de que en efecto seguía ahí. – aah... disculpa bro... me quede pegao – escucho al contrario reírse por su voz somnolienta, por lo que ambos se despidieron para irse a dormir.

Apago su computadora y de manera mecánica hizo su rutina para irse a dormir, estando en su cama y obsevando el techo recordó brevemente todo lo que había realizado en el día, hasta que llego al momento donde había estado hablando con Missa que sintió unas incontrolables ganas de sonreír y una emoción que de repente le invadía el corazón. – Un momento... ¿Por qué chucha me siento así? – susurro para si mismo tratando de negar lo que claramente se había dado cuenta lo que era.

Despertó de su ensoñación cuando sintió su teléfono vibrar repetidas veces, lo desbloqueo y se encontró con muchos mensajes, en su mayoría stickers de parte de Missa, ya que estaban poniéndose de acuerdo para el viaje que realizaría dentro de una semana, tendrían ambos un evento juntos y habían planeado grabar algunos videos juntos.

Estaba emocionado por todo, conocer un país nuevo, probar nueva comida y convivir con sus fans mexicanos, pero su felicidad cambio por nerviosismo y algo de ansiedad cuando recordó que debía quedarse en casa de Missa. Anteriormente no le hubiera molestado y al contrario le habría emocionado, pero ahora estaba preocupado ya que no tenia mucho tiempo que se había dado cuenta de sus recientes sentimientos románticos, se revolvió el cabello tratando de alejar esos pensamientos de si mismo, termino de organizar lo que le faltaba y mejor se dispuso a empacar su maleta para distraerse.