Beyblade Burst Monsters

Parte 30 (Final)

[AÑOS DESPUES]

Un joven rubio de mechón rojo se encontraba en el patio de su hogar junto a su pequeño hijo de 8 años, como tal pequeño era un hombre lobo, su padre lo empezó a educar controlando sus instintos salvajes. Mientras tanto aquel Joven albino junto con su hijo también un cachorro hombre lobo se encontraban haciendo la cena. 

Ahora que saben de una gran noticia, decidieron mudarse de casa para convivir como la familia que son

Shu: Mika.. dile a tu papá Free  y a tu hermano que ya vengan a comer

Mika: si papa Shu

Aquel pequeño se dirigió hacia los nombrados mientras Shu ponía la mesa.

En un instante ya todos estaban disfrutando del delicioso banquete, al concluir con ello ya estaban listos para irse a dormir

Shu: vallan preparándose para dormir, ahora llegamos para darles su beso

-¡Si! -dijeron ambos pequeños para luego irse corriendo hacia su habitación

Free: no deberías de hacer mucho trabajo

Shu: tranquilo, estamos bien

Aquel rubio se acerca a él para acariciar su abdomen

Free: no puedo esperar a que nazca

Shu: no seas desesperado, en algunos días ya tendremos a un nuevo integrante en la familia

Free: no lo hubieramos logrado sino fuera por Naoki

Shu: tienes razón

Free: vamos a arropar a los pequeños

Shu: vale

Mientras tanto un pequeño peliceleste cachorro hombre lobo, se encontraba discutiendo con su padre

Lui: Miraki... Hasme caso y vete a dormir

Miraki: es que no tengo sueño

Lui: pero todos los pequeños como tú ya deben dormir a esta hora

Miraki: pero papá...

Lui: nada, vete a dormir

Miraki: -haciendo pucheros-

En eso llega Valt

Valt: hasle caso a tu padre, Miraki

Miraki: está bien mami... -Se acercó a si padre para que le plantara un beso en la mejilla y después a su madre- Hasta la noche

Valt: duerme bien pequeño -aquel se fue a su habitación como todo un niño de 8 años

Lui: este niño necesita de buenas lecciones

Valt: es tu culpa por consentirlo mucho y ahora es rebelde

Lui: lo siento Valty, ¿la bebé ya se durmió?

Valt: si, le dí de comer y ahora ya está en un plácido sueño

Lui: bien, entonces hay que vigilar que Miraki ya esté dormido y luego vamos nosotros para dormir

Valt: vale...

Ambos se agarraron de la mano y se dirigieron al cuarto de Miraki, y efectivamente estaba muy dormido en su cama

Lui: decía que no tenía sueño

Valt: así es nuestro hijo, igual que su padre

Lui: gracias

Después de la revisión, se dirigieron a su habitación donde se prepararon para dormir, a lado de su cama estaba una cunita donde una pequeña Fénix dormía plácidamente. Cuando ambos ya estaban recostados en su cama se abrazaron para darse un apasionado beso