Nuestro Secreto

XVIII

En que momento todo cambio?

Se pregunto un desconcertada pelinegra, habían pasado algunos minutos desde que perdieron contra la colosal bestia llamada Gigantomachia, una bestia con demasiado poder, poder que ni con todos los héroes a su disposición le pudieron hacer frente, ni sus somníferos pudieron hacerle efecto parecía que nada podría detenerlo. Pero eso no fue lo que la mantenía de rodias mirando aquella destrucción causada por Machia, no claro que no le hacia estar de rodias con una agitada respiración, era ver que varios héroes murieron frente a sus ojos, pero la muerte que le afecto mas fue ver al héroe que la apoyo en sus pasantes , a ella y a la peliverde de dientes afilados de la clase B. 

-"Yaomomo tenemos que irnos"-hablo la pelimorada tratando de llamar su atención cosa que no logro.

La voz de su amiga paso por su cabeza, irnos. Pero a donde con la policía?, los héroes restantes?. A donde tendrían que ir, no lo sabia. 

De un momento a otro la pelinegra se encontraba con sus manos apoyada contra el suelo y mirando la tierra. Sentía la mirada de todos en ella, esperando una nueva orden. Que debería decirles?, pensó. Enserio que necesitaba a alguien que la ayudara.

Ante tanto silencio formado por la pelinegra pudieron escuchar el quejido de dolor de alguien en toda esa destrucción. Levanto su mirada hacia ahí, de la tierra salio una mano que trataba desesperadamente salir de aquella tumba de  tierra encima de el. No necesitaba nada mas. 

Se levanto, no le importaba lo cansado que se encontraba su cuerpo, ni el miedo que podía tener, trago un poco de saliva para luego hablar.

-"busquen y ayuden a los herido de la zona, traigamos los hacia acá, tarde o temprano llegaran otros héroes para ayudarnos"-ordeno mientras ella corría con algunos de sus compañeros ayudar aquel sujeto enterrado.

Los minutos que pasaban para el grupo de estudiantes pero cuando pensaban que habían acabado de rescatar a todos los heridos, aparecían dos mas que estaban mas graves. La pelinegra habla por una radio pidiendo ayuda a la zona donde se encontraban. Aunque no recibió la respuesta que quiso, pero le quitaría un peso de encima.

Gigantomachia cayo, repito cayo, nosotros estamos llegando a la zona donde esta Shigaraki.Respito Gigantomachica ha caído.

En verdad eso la hizo sentirse satisfecha, los esfuerzo de todos había salido bien, parecía que las cosas comenzaban a mejorar la ayuda que pidió por fin respondió, enserio no podría estar mas feliz.

-"YAOMOMO!!"-fue un llamado desesperado, aterrado y nervioso, era una mezcla poco común sabiendo quien había gritado sus nombre.

Igualmente corrió hacia su llamado, vio a lo lejos como su compañera pelirosa estaba llorando, no comprendía solo señalo a la izquierda señalando un cuerpo tirado. La verdad ni ella sabia cuan lejos se encontraban solo se centraban en rescatar a todos los que podían. 

Su mente quedo completamente en blanco, camino lentamente hacia la indicación de la pelirosa, toda felicidad en su cuerpo desapareció. Cayo de rodias las lagrimas empezaron a brotar de sus oscuros ojos, aquel cuerpo que yacía en frente suyo no era mas que la persona que le había dejado el mando, aquella persona que confió plenamente en ella. Su maestra, mentora y alguna vez consejera. Tenia varias heridas, no tan lejos de ella se encontraba varios villanos noqueados, no faltaba decir que ella se defendió como toda una guerrera hasta su ultimo aliento. Lentamente se acerco para ver como se encontraba. 

Su piel fría, y sin pulso, de verdad nunca imagino que esta captura de la liga de villanos se haría tan caótica, era peor que la Kamino. 

Shigaraki esta escapando! Necesitamos refuerzos