The labyrinth [KOOKTAE]

2

Taehyung cubrió su boca con su mano, apretando tan fuerte que sus labios dolían al ser empujados con sus dientes con tanta rudeza.

Trataba de controlar su respiración agitada para no ser escuchado, ya que el único sonido que se lograba escuchar era el de los insectos y aves.

- ¿Sabes lo más gracioso de la situación, Taehyung?- su voz sonó de nuevo y las pisadas se comenzaban a escuchar cerca. - Que nunca hubo una salida- soltó una fría carcajada y disparó una vez más al suelo.

Taehyung saltó un poco y lágrimas se deslizaron con más rapidez, la bala había caído a su costado. Jungkook estaba a su lado.

-El ser humano siempre necesita una esperanza para seguir adelante, probablemente si no te hubiera dicho que había una salida; ni siquiera hubieras corrido, simplemente suplicarías para que acabe contigo y eso, no es divertido-

Sus ojos se abrieron y su corazón pareció detenerse al ver las botas de Jungkook frente a él; debido a la vegetación él no podía verle.

-Se que estás por aquí, escogiste el camino sin salida- disparó otra vez; haciendo que Taehyung cerrara sus ojos con extrema fuera.

De repente; notó sus pasos alejarse y sus botas desaparecieron de su vista. Al no escuchar ningún sonido, levantó un poco su cabeza para mirar sobre las hierbas.

Supuso que esa era su opción para seguir corriendo, miró una vez más y se levantó con rapidez.

-Te pillé- Jungkook abrazó a Taehyung por la espalda, tirándolo nuevamente al suelo- Vigila siempre tus espaldas, Taehyung- dijo forcejeando.

-¡Suéltame, por favor!- sollozaba removiendose debajo de él.

Pero Jungkook no se detuvo, agarró firmemente sus muñecas detrás de su espalda y se acercó a su oido.

-Eso no sucederá ¿recuerdas lo que ganaba yo?- Taehyung lloraba sin parar- Mío hasta el día de mi muerte- su lengua pasó con lentitud sobre su cuello.

-No, no...- murmuró, envuelto en terror.

-Y ahora, pasaremos a la verdadera diversión- se reincorporó, quedando sentado en las piernas de Taehyung y lo giró, haciendo que sus rostros se vieran.

Giró un poco su cabeza y con una de sus manos; quitó su máscara negra.

Sus ojos eran grisáceos y su mirada era tétrica y oscura, cubierta por su cabello negro y revuelto. Su piel era bronceada y estaba repleta de cicatrices y sus rojizos labios tenían una siniestra sonrisa.

Posó las manos de Taehyung sobre su cabeza, a los costados.

Taehyung giró su rostro, desviando la mirada y tratando de librarse de su agarre, revolcándose pero de nada servía.

-Esta parte del juego va a encantarte, te lo aseguro- y tras esa frase, comenzó a besarle con furia, succionando sus labios a su antojo.

-D-deten mh te- murmuraba Taehyung como podía, pues la lengua de Jungkook indagaba en su interior sin permiso alguno.

Se separó unos segundos para coger aire y Taehyung aprovechó para girar su rostro, evitando que le bese pero solo le dió un mejor acceso de su precioso cuello y no dudó en atacarlo.

Mordió, succionó, lamió y besó cada centímetro de su cuello, pasando por sus clavículas y subiendo hasta su mandíbula.

Taehyung cerraba sus ojos con fuerza; maldiciéndose asimismo al notar su cuerpo reaccionar positivamente ante sus besos.

Jungkook continuó su recorrido, llegando ahora a su oreja y mordiendo su lóbulo, haciendo que la piel de Taehyung se erizada y un escalofrío lo recorriera.

-Para...- repitió

-No quieres que lo haga, Taehyung- susurró con su voz más ronca en su oído, lamiendo después el lugar.

El frío fue reemplazando por calidez.

Bajó un poco y comenzó a jugar con uno de sus pezones, succionando y dentro de su boca; lamiendo en círculos, un gemido involuntario salió de la garganta de Taehyung.

Jungkook sonrió-Eso, es- dijo arrogante- Gime para mí, Taehyung

Él simplemente mordió su labio inferior con fuerza, avergonzado ante lo sucedido. No podía, simplemente no podía darle ese placer a un hombre que lo había secuestrado y puesto a correr en mitad de una pradera mientras lo seguía con una escopeta.
¿O sí?

Sí, y reafirmó la respuesta al sentir las manos de Jungkook acariciar sus muslos internos mientras besaba su vientre, mandando miles de escalofríos directos a su entrepierna.

Curvó un poco su espalda cuando bajó más y abrió completamente sus piernas; lamiendo su entrada.

Jugaba con su lengua, rozando con sutileza superficialmente.

-Ah-hgm- gimió sin poder evitarlo ya a estas alturas, todo se había ido a la mierda.

Tras un rato preparándolo, sacó su erección y dio la primera estocada, provocando otro gran gemido del chico bajo él.

Agarró sus muslos internos y alzó sus piernas, dándole una mejor posición para seguir con la penetración, entraba y salía de él con rapidez, ambos se estremecían en lujuria y sus cuerpos se deslizaban de arriba a bajo sobre la tierra, formando un auténtico descontrol.

Taehyung se aferró a su espalda, agarrándose firmemente mientras las embestidas se volvían más rudas y rápidas y Jungkook se encargaba de estimular sus pezones una vez más con su tibia lengua, haciendo que Taehyung temblara ante la sensación tan placentera.

Los gruñidos y gemidos de ambos se apoderaron del silencio del lugar, ahora ambos deliraban cegados por la situación.

Sus bocas se unieron con desesperación, abriendo sus labios y gimiendo en la boca contraria mientras Taehyung comenzaba a contraerse repetidamente, derramando semen en ambos vientres. Tan solo unos segundos después, Jungkook se vino dentro de él.

Ahora ambos respiraban por la boca, tratando de recuperar el aire.

-Creo que no será tan malo estar contigo hasta el día de mi muerte mientras me folles tan bien- dijo Taehyung aún con su pecho subiendo y bajando con rapidez.

-Ten por seguro que será así- respondió Jungkook, mirando sus ojos.

Ambos sonrieron y volvieron a besarse con pasión, comenzando nuevamente una guerra entre sus lenguas y frotando sus cuerpos con desesperación.

No, definitivamente; no sería tan malo jugar una y otra vez junto a él.

Fin
Bloodywolfmoon