Love And Alarm (Sunoh y Jojo) Alternativo

Capítulo 3

Hace unos pocos días Jojo había notado muy extraña a su prima, estaba más animada, se ofreció a trabajar más en la tienda y a buscar un empleo. Su tía estaba muy confundida con los cambios de su hija.
Jojo hoy saldría hacía su antigua escuela para buscar algún dato sobre la dirección de Dukgu, tras diversos intentos con los correos electrónicos, parecía que el creador no los leía o no tendría tiempo para hacerlo.

—Hola Jojo, me alegra verte nuevamente, te ves muy bien—su antiguo profesor le sonreía emocionado—

—Hola profesor, también me alegra verlo después de todos estos años, me alegra que siga enseñando aquí

—El labor de un profesor nunca termina Jojo ¿Cómo has estado en tu vida? ¿Qué te trae aquí?

—Estoy muy bien desde que salí del colegio...

—Supongo que sí, todos esos problemas del colegio se terminan cuando sales—Jojo sonrió y miro hacía el suelo—

—Estoy aquí porque necesito algún dato sobre la dirección de Cheong Dukgu

—¿Dukgu? Jojo... las políticas de la escuela no me permite entregar ese tipo de información—el profesor miro incómodo la pantalla de su escritorio—

—Profesor, se lo agradecería mucho si pudiera hacerlo, tengo que hablar con él un tema urgentemente—insistió—por favor...—el hombre la mira fijamente—

—Está bien—se acomoda en su silla de escritorio y empieza a teclear algunas cosas en el ordenador—pero nadie debe saber de esto—dice en voz baja y Jojo asiente—

—No se preocupe, no le diré a nadie—le responde en bajo tono—

—Ya veo...era compañero de tu prima Gulmi—ella asiente con la cabeza—Jojo...—la mira fijamente—Dukgu está muerto—baja su cabeza—

Miles de pensamientos pasaban por la cabeza de Jojo, luego de la escuela nunca supo nada sobre Dukgu. Le dolía mucho la pérdida de la única persona que nunca la juzgó y le quitó la palabra después de lo sucedido con Sunoh, en los momentos más necesarios fue un buen amigo, la protegió entregandole un escudo que reveló su relación con Love Alarm, pero no le interesó porque también confiaba en ella, aunque Jojo era una chica linda, siempre fue amable con él.
Sentada en las gradas del patio escolar, Jojo tenía sus ojos empapados de lágrimas.

Hwang Sunoh se encontraba ese mismo día en el colegio donde comenzó todo, cada minuto se sentía más nostálgico, tan así que poco le importaba la donación que estaba haciendo en nombre suyo y de su padre, solo pidió que se le entregara para aquellos que no podían costear su almuerzo. El recuerdo de verla por primera vez tomando la bandeja y recibiendo la comida, hacía a su corazón latir con fuerza.
Al salir del colegio Minjae lo estaba esperando en el auto, pero antes que se fueran miró por última vez el colegio y la vio en las gradas cabizbaja con sus sus manos hechas puño. Le ordenó al asistente que se fuera e ignoró sus comentarios reprochandole que no se acercara a ella. A pasos seguros de detuvo frente a Jojo y estiró su mano, ella la quedo mirando unos segundos y volvió a bajar su mirada. Tomó su mano y la llevó hasta la pista del patio.

—¿Qué haces? Déjame sola

—Te dije que no te dejaría sola—la mira fijamente y le saca el pequeño bolso que llevaba—

—¿Qué pretendes?—seca sus lágrimas con su mano libre—

—Jojo...

—¿Qué?

—Corre—suelta su mano—

Mira la pista y luego los ojos de Sunoh, no lo había olvidado, dirige nuevamente su mirada a la pista y empieza a correr lentamente rodeando el enorme patio. Cientos de imágenes pasaban por su mente, las veces que habló con Dukgu, cuando discutía con su prima, la vez en que Hyeyeong hizo sonar su Love Alarm en la enfermería y la ocultó en la otra camilla, el último momento en que vio a Dugku e instaló el escudo. Para cuando recordó eso último ya casi terminaba de dar toda la vuelta, se detuvo ¿Por qué estaba ahí después de todo el daño? Al final de la pista estaba Sunoh a 10 metros de distancia. Con los ojos empapados en lágrimas Jojo corre para abrazarlo y ocultar su cara en su pecho, olía como lo recordaba y era igual de cálido. Luego de unos segundos él también la rodea con sus brazos.

—No puedo creer lo que me cuentas, me parecía un chico amable y muy inteligente, pensé que quizás ya habría terminado la universidad

—Lo mismo pensaba yo, realmente no puedo asimilar la idea de que esté muerto—ambos caminaban lentamente hacia la parada de autobus—

—¿Por qué necesitabas hablar con él? ¿Tienes algún problema? Quizás podría ayudarte—ella negó con la cabeza y se detuvieron bajo la parada—

—El asunto que tenía con Dukgu nunca podrías ayudarme, ni siquiera a ti te ayudo—bajó su mirada y algunas lágrimas volvieron a bajar por su rostro—

—¿A que te refieres?

—Nada

—Dime, no me dejes así, explícame

—Yo soy culpable de que tu Love Alarm no sonara...

—Jojo...

—Espera a que te cuente, creo que te mereces una explicación pero no la volveré a repetir—ambos se miraban fijamente—

—No sé como, pero luego del viaje a Jeju Dukgu me entregó un escudo—él la mira sin entender—yo instalé el escudo para que Love Alarm no volviera a sonar nunca más—las lágrimas empezaron a correr por las mejillas de ambos—y nunce pude deshacerme de el, espero que no me odies por lo que hice...—en ese momento el autobus llega y Jojo deja solo a Sunoh con la mirada nublada en lágrimas—

Antes de entrar a la casa Jojo sacó su teléfono y tenía 5 llamadas pérdidas de Hyeyeong, soltó un suspiro triste y quitó el silenciador que había puesto luego de esa noche que Sunoh estuvo a fuera de la tienda cuando apareció el desconocido. Se dirigía directamente a su habitación para prepararse antes de su turno, pero antes de pasar por la puerta su Love Alarm sonó, extrañada miró hacia todos lados y registró todos los cuartos de la casa pero no había nadie, pero siempre antes de pasar a su cuarto volvía a sonar la alarma. Desesperada empezó a registrar el cuarto que compartía con Gulmi, cuando ya no había donde buscar, por instinto metió su mano al abrigo que uso la noche del desconocido, de este sacó un celular de último modelo, no tenía que dar tantas vueltas para saber a quién le pertenencia. Sacó su teléfono y tenía cada uno en una mano, uno con un corazón y el otro en nada.

—Me arrepiento tanto...—se sentó en el piso de la habitación—

Jojo pudo sentir su corazón presionar en su pecho cuando vio que el fondo de pantalla era la fotografía que Sunoh le había tomado de noche cuando hicieron sonar sus alarmas.
Cuando su turno en la tienda inició le escribió a Hyeyeong para decirle que estuvo ocupada durante el día, habían quedado en verse mañana.

—Toma—Gulmi había dejado un set de labiales con dos mascarillas frente a ella—

—¿Y esto?—la miró extrañada—

—Te vez algo pálida, es un regalo ¿Por qué me miras así? ¿Acaso no puedo regalarte algo?

—No es solo...—la interrumpe—

—Voy de salida, llegaré antes de mi turno en la mañana, adiós

—Adiós...—Jojo estaba extrañada por la actitud de su prima, en los últimos días era muy amable y animada— ¿Por qué actúa así?