El diario de Pier

Emma Reven Woods

Emma

Camino por el largo pasillo de la universidad en busca de la biblioteca, mi lugar en el mundo, mi zona de confort, el unico lugar donde puedo perderme en mis pensamientos.

Entro a la biblioteca y le muestro mi carnet a Mabel, la bibliotecaria.

-Hola, Em-me saluda Mabel mientras toma mi carnet.

Mabel es una mujer de unos treinta y cinco años muy hermosa y agradable. Me cae bien y muy pocas personas logran caerme bien.

-Hola, Mabel-le devuelvo el saludo.

Mabel me extiende el carnet y lo guardo en mi mochila.

Voy directo a mi sección favorita; los libros viejos.
Creo que nadie, pero absolutamente nadie, viene a esta sección. A mi en lo personal me encanta leer este tipo de libros.

Mayor mente los libros viejos están degradados y liberan moléculas aromáticas como el benzaldehído que tiene un aroma parecido a la almendra, mientras sus hojas se vuelven amarillentas debido a que están en contacto con el aire. Son simplemente perfectos.

Busco algun libro para leer pero me detengo en el estante 7. Con mi dedo índice toco el lomo de un libro que llama mi atención.

-Tu no eres un libro viejo-digo mientras  lo tomo.

Y para mi sorpresa no sólo no es un libro viejo, sino que tampoco es un libro, es un diario.

El diario de Pier.

¿Quien es pier y por qué su diario se encuentra aquí?