Memories

Gesellschaft

"Compañía"

Los tres jóvenes estaban en silencio, ninguno hacía comentario alguno, tan solo se dedicaban a mirar al chico recostado en la camilla. A veces lo veían removerse intranquilo, como si estuviera luchando contra una pesadilla, al parecer, aquello no lo dejaba ni en aquellas circunstancias; sin embargo, no ocurría nada más interesante digno de presenciar en la aquella ala de la enfermería.

Ginny se mantenía en silencio, mirando a Harry y pensando en las palabras de Dean, no iba a permitir que le hablaran así, aquello era una tontería, había superado su obsesión por Harry Potter "El niño de vivió" ya no sentía absolutamente nada por él, y que Dean creyera que sí, tan solo la ponía mucho más furiosa de lo que ya estaba tras ese largo día.

-Creo que deberías ir a descansar Ginn- dijo Ron cautelosamente, su hermana parecía que explotaría en cualquier momento y no quería ser el causante de ello.

-Si - respondió su hermana vagamente - Los veré mañana chicos, adiós- dio un ultima mirada hacia Harry y salió de la enfermería

Ron y Hermione se quedaron solos finalmente, envueltos en un silencio un poco tenso.

Hermione acerco su silla lentamente a la camilla donde reposaba su mejor amigo. Levantó una mano y apartó un mechón que caía sobre su frente.

-Me gustaría verlo así de tranquilo todos los días- murmuró soltando una pequeña risa, pasó por alto el hecho de no escuchar una respuesta por parte de Ron. Su mano se posó cuidadosamente en su mejilla, sintiendo lo tibia que estaba. Lo miró y sintió ganas de despertarlo y gritarle por lo irresponsable que era, parecía que no entendiera el peligro que corría y por si fuera poco, los accidentes eran ya casi parte de su rutina diaria. Soltó una exclamación temblorosa y alejó su mano cuando sintió como volvía a removerse un tanto intranquilo.

Su mirada se dirigió hacia Ron, no se sorprendió mucho al verlo con el ceño fruncido y las orejas ligeramente coloradas.

-¿Qué pasa?- preguntó la chica

-Oh nada-respondió en tono mordaz, aun sin mirarla- absolutamente nada.

-Vamos Ron, ¿Y ahora que tienes? - Hermione empezaba a impacientarse, no quería pelear con Ron, pero él la hacía perder los estribos y eso era lo último que quería.

-Ya te dije que no pasa nada, puedes seguir viendo a Harry- se arrepintió de sus palabras apenas salieron de su boca.

-Y tú ¿Qué problema tienes? - rugió Hermione - tu amigo está ahí, inconsciente, y tu solo... ¡Agh!

Ambos se quedaron en silencio, oyendo a penas la lenta respiración de Harry y el soplo del viento que entraba por la ventana. No se atrevían ni siquiera a mirarse; Ron, por una parte, se arrepentía de haber abierto su boca y expresar lo que estaba pensando, no importaba lo que pensaba de todos modos; Hermione, por otro lado, no encontraba explicaciones al comportamiento de Ron y a aquel comentario tan fuera e lugar, pues no era tenía sentido, tampoco debía de meter a Harry en su conversación cuando él estaba ahí, inconsciente y sin saber lo que pasada en su al rededor, ahora tenían que preocuparse más en que su amigo despertara.

XXXX

Poppy Pomfrey se dirigía a paso apurado hacia la oficina del director, había enfrentado situaciones similares desde que empezó con su trabajo en Hogwarts, era normal tener accidente en los juegos de Quidditch o incluso había accidentes en clases, un hechizo más ejecutado o una poción que no fue debidamente elaborada al pie de la letra.

Siempre había sabido que Harry Potter era un chico que andaba metido en problemas, cada año aparecía en su enfermería por cualquier motivo, sabía que su vida fuera de la escuela no era muy agradable, todo el personal de Hogwarts lo intuyo cuando corrió la noticia de la muerte de los Potter, pero habían albergado esperanzas de enterarse que el chico gozaba de una niñez agradable; todo lo contrario a eso fue lo que paso cuando el chico llego, a penas piso el colegio las cosas anduvieron en su contra; y ahora el señor tenebroso estaba de vuelta desde hacía casi más de un año; las cosas no podían haber ido peor.

Se lamentó profundamente cuando aquello paso por su cabeza, por supuesto que las cosas se podían poner peor, Potter no parecía reaccionar a la revisión hecha por la enfermera, aquella lesión había tenido fuertes consecuencias, pero no creía que pudiera tratarse de un caso muy especial, más aún cuando los magos tenían más resistencia que los muggles, pero nada impediría que Harry Potter haya sufrido una lesión cerebral a casusa del golpe y la causa.

Casi grito la contraseña de la oficina del director, la gárgola le permitió el paso y la enfermera subió a paso apresurado; toco la puerta de roble una vez llego hasta ella. Oyó un suave "Adelante" del interior y se apresuró a abrir la puerta y dirigirse al escritorio donde se encontraba el director.

-Profesor Dumbledore- saludo.

- ¿Qué se le ofrece Madame Pomfrey? ¿Pasó algo? - la preocupación era notoria en el rostro de la enfermera y eso bastó para alertarlo a él también.

-Es el señor Potter, director- empezó a explicar- tuvo un accidente en un partido, ahora esta inconsciente, pero... - su voz empezó a flaquear.

- ¿Le pasó algo muy grave? - consultó el director con suma delicadeza a pesar de su preocupación.

Madame Pomfrey contó todo lo que había pasado y los resultados que había obtenido del joven, estaba asustada por supuesto que lo estaba, aquello no era normal y las consecuencias podían afectar al muchacho.

-Estos casos no son normales, si no conseguimos nada; tenemos que mandar al joven Potter a San Mungo para que lo transfieran desde ahí hasta un centro muggle.

Se quedaron en silencio, la enfermera esperaba una respuesta y el director procesaba todo lo que acaba de escuchar.

-No podemos enviar al chico a San Mungo- negó el director ante la mirada asombrada de la enfermera. - No sabemos lo que podría pasar, es peligroso sacarlo de Hogwarts a estas alturas de la guerra; debemos hacer lo posible para que despierte y cuando lo haga, ahí podremos ver mejor lo que le pasa.

Podía sonar paranoico o exagerado, pero si Voldemort se enteraba que Harry estaba fuera de Hogwarts, por más aurores que pusieran para vigilar al muchacho, encontraría la forma de llegar a él y cumplir con su trabajo sin cumplir de hace 15 años.