STORM [YOONMIN]

02

-Nonna, es hora de despedirme. Tengo que viajar para ver a papá y comunicarle sobre mi vuelo. Se ve que está muy atareado que ni tiempo para sus hijos tiene- eso pensaba el menor de los Min con un poco de molestia en su voz-

-Yoon, no se de que te sorprendes, siempre fueron así junto a mamá. Pensa que nos sirve para despegarnos de ellos y poder hacer nuestra vida sin depender en cualquier aspecto. No es justo que se ausenten todo el tiempo y después vengan con pretensiones que estamos lejos de querer cumplir.-

-Niños mirenme, -ambos dirigen sus ojos a ella- bueno, ya no son más niños, son dos adultos que para mi siempre van a ser mis pequeños. -pensó la señora Young- Yo se que ustedes muchas veces se ven estancados por decisiones ajenas, pero tienen que saber que cuentan con las herramientas y mi apoyo para que hagan lo que les de felicidad. Hoy y siempre los voy a apoyar, desde mi humilde lugar como empleada de la casa y su amada nonna, los alentaré a seguir luchando por su bienestar. Así también, deben comprender que ustedes no son hijos de cualquier persona y su apellido les puede llegar a pesar mucho. Por esa razón los invito a que piensen en ustedes, al menos por un momento, y sean egoístas con el señor y la señora Min.- 

De aquellas palabras solo se desprendía pura verdad y eso lamentaban los hermanos en cierto punto. Cada uno por su lado creía que era momento de tomar las riendas de su vida, ignorando las exigencias ajenas de sus superiores. 

-Bueno, terminemos esta charla. Somos un equipo y necesitamos estar 'okey' -decía Yoongi cuando guiñaba un ojo y reía. 

Así fue como Yoongi se despidió de su hyung y nonna con un fuerte abrazo. 

[...]

Mientras tanto, en Incheon, el reloj de mano inteligente del mayor de los Park, declaraba que era hora de acercarse al aeropuerto para esperar que, por medio de los parlantes, se anunciará la partida de su vuelo. Así fue como, el trío de hermanos salió de la casa cargando los bolsos y riendo por los chistes malos que contaba Minho. Al llegar a aquel inmenso lugar, tomaron asiento los dos mayores y Minho se sentó en el suelo, observándose con anhelos de tenerlos siempre en su vida. Porque ese joven de veintidós años, sabía más que lo que debía sobre temas que lo excedían. 

-¿Me prometen que siempre vamos a estar juntos como quería mamá?- preguntó el menor. 

Jinyoung, al oír lo que pregunto Minho, entrecerró sus ojos por un momento, mirándolo con aires de dudas. 

Desde pequeño, él creyó que era necesario brindarles seguridad y confianza a sus hermanos para que pudieran sentirse bien con ellos mismos a medida que crecieran y también supieran que podían recurrir a él por el motivo que fuera. 

-Nunca pero nunca dudes de eso y vos tampoco Jimin. Prometanme que van a estar bien y se van a cuidar. Voy a estar al pendiente de ustedes y cualquier duda o problema que tengan saben que pueden contarme. Yo a ustedes los elijo cómo mi familia, tenganlo claro.- 

Luego de esas palabras, los tres desprendían lágrimas de sus ojos y al verse así, comenzaron a cambiar de tema. Faltaban dos horas para la partida de Jinyoung, así que conectaron la tablet al wifi y decidieron ver el último capítulo de la serie que empezaron en conjunto. 

[...]

-Señor, ya está listo el auto- dijo Woo Bin, el chofer de Yoongi. 

-Woo, ¿qué te dije?- decía el menor -¡no soy señor, apenas llegó a los treinta años!- exclamaba resignado. 

-Tiene razón, disculpe señ...joven Yoongi-. 

-Ahí está mejor. -percatandose de lo olvidado que era, comentó- Woo, olvidé decirte algo. Mañana por la tarde estoy yendo a Estados Unidos, y voy a necesitar que vengas conmigo. También nos acompañará Lee Kihyun, mi guardaespaldas. Ustedes dos podrán viajar un día más tarde, yo me sabré cuidar, de hecho ahora iremos por mi padre a comentarle para que sepa que viajó por voluntad propia y no porque me secuestraron.- decía con tono irónico por lo desinteresado que era su mayor.