-꒰Be my prince. . .꒱ - ̗̀Bitter x Uttaˎ'-

- 6 meses.

Ya todos los conocían.
La amistad de esos dos jóvenes ya no era una gran sorpresa.
Todos sabían, estaban enamorados uno del otro.
Nunca tocaban el tema, solo disfrutaban de su compañía mutua, como dos tórtolos

「Oye Bitter.」

Diría aquél nervioso chico, a punto de decir las palabras que cambiarían el rumbo de su vida.

「¿Qué sucede, Utta?」

Diría el otro chico, dudando como siempre sobre lo que esperaba que saliera de la boca de Utta, esperando que sean aquellas hermosas palabras que siempre espero

「Yo... te tengo que decir algo.」

「¿Sí?」

「Muy bien, seré directo, no lo puedo ocultar más... Bitter, ¡tú me gustas!」

El corazón de Bitter empezó a latir con fuerza, estaba feliz. Sus ojos reflejaban amor, emoción, alegría.
Simplemente todo estaba saliendo bien.

「Utta... tú también me gustas...」

Dice sonriendo para agarrarlo de la mejilla con delicadeza, y acercar sus rostros lentamente dándole un suave beso lleno de ternura, el cuál Utta no dudo en corresponder algo sonrojado al igual que su contrario... todo estaba saliendo bien, ¿no?

—Meses después. —

Todos miraban a aquella pareja con ternura, ¡ya llevaban 6 meses juntos! Eran tiernos, estaban rodeados de amor, en su burbuja de la cual nadie podía sacarlos.

Pero había secretos, demasiados secretos detrás de esas caras llenas de amor y felicidad.

¿Qué les había pasado? O más bien, ¿qué le pasó a Bitter? ¿Por qué le hizo eso? Solo eso estaba en la cabeza de Utta en sus noches de desvelo.

No le hacía caso a eso, y seguía buscando la forma de dormir, pero pasaba eso al menos una vez a la semana.

「Bitter, ¿cuándo vamos a volver? Me duelen los pies...」

「Dentro de un rato, si quieres puedo cargarte」

Luego de esas palabras, un leve rubor subiría a la cara de Utta haciendo que a Bitter se le escape una pequeña risita, mientras abrazaba la cintura de el chico a su lado.

「C-como quieras...」

「Bien jaja」

Ya quedaba poco para llegar a su casa, la cual era de Bitter ya que era muy pronto para mudarse juntos. El chico solo agarraría a su pareja de la cintura para levantarlo, agarrandolo también con el otro brazo de los muslos cargandolo para llegar a su casa, abriendo con dificultad la puerta, y una vez adentro cierra la puerta con llave dejando a Utta en el sofá sentándose a su lado.

「Ahh, me duelen los pies」

「JAJAJA, tranquilo tranquilo, descansa un poco y después podemos hacer mimitos」

「Wuju, obviamente si, aunque luego...」
「Tenemos que hablar.」

「Uh... está bien...」

Diría no muy convencido y con algo de miedo, mientras le daba un pequeño escalofrío en la espalda, esto no le daba buena espina, sentía miedo, impotencia, y ansiedad.

¿Y si se enteró de aquello por lo cuál había estado lamentándose los últimos 6 meses?