Capítulo 1

6 0 0
                                    

tire todo por el suelo, no puedo sentir nada más que rabia ahora mismo. 

-¿Cómo has podido?

-No te hagas la victima por favor,me esta matando la culpa,no lo empeores.

Tengo ganas de escupirle la cara, pegarle y gritarle todo lo que siento. 

-Vete a la mierda Isma.

Con la maleta medio hecha y cogiendo la mitad de las cosas salgo de esa casa que ahora me parece tan oscura, como un agujero al infierno. 

No se a donde ir, con quien hablar o si simplemente tirarme en la calle a que me atropelle alguno de esos tantos coches que pasan. 

¿Que no me haga la víctima mamonazo? ¿Que no me haga la víctima, aun siéndolo? 

Decido que la mejor opción es llamar a Lula y pedirle hospedaje por un par de días,hasta que consiga billetes a Barcelona. 

Uno, dos, tres, cuatro y buzón de voz.

Uno, dos, tres, cuatro y buzón de voz.

Uno, dos, tres, cuatro y buzón de voz.

Mierda.

Agotando mi mejor y única opción de hospedaje económico, es decir; gratis.

Espero a que llegue algún taxi libre y le guio hasta el hospedaje en donde me quedé con Isma una noche que se nos inundó el piso gracias a una tubería. 

Jodido Isma, te veo en toda Valencia, eres toda Valencia, toda mi historia en ella.

Después de 35 minutos en ese taxi con Camarón de la Isla de fondo y 16 euros menos en el bolsillo, llegó al hospedaje Las Islas. 

Con un nudo en la garganta decido entrar, con dos ovarios, siempre echa' pa' lante. 

Acercándome a recepción siento como ese nudito de atar las zapatillas ahora es uno de amarrar un yate al embarcadero, tengo miedo de hablar y que me tiemble la voz. Menchu, la recepcionista es amiga de Isma, íntimos casi, me va a preguntar por el, lo sé.

Mi turno.

-¡Hombre Tami! ¿Qué tal estás? ¿Está Ismael contigo? 

Lo sabía. 

-Pues no Menchu, hoy recibes a esta servidora sola.

-Vaya…

No dice nada más, pero yo se que le extraña,y que no dudara en decirle a su amigo algo sobre esto,no ha sido buena idea venir aquí. 

Una vez hecha la reserva de dos días con sus respectivas dos noches subo a la habitación 441.

Tengo ganas de llorar, y eso pienso hacer nada más llegar a la habitación, llorar toda la noche mientras maldigo a ese cabrón. 

No puedo describir cuanto le odio,se que ira mitigando, con él siempre ha sido así, pero ahora mismo tengo ganas de decirle de todo menos bonito. 

Con la tarjeta en la mano y el corazón en la garganta trato de abrir la puerta,pero esta que hace caso omiso de mis ganas de llorar, no se abre. 

No puede serrrrr, no ahora por dios.

Empujo y pateo a la pobre puerta, pero nada, la puñetera tarjeta no abre nada. 

-¿Te ayudo? 

Me giró asustada al escuchar la voz de un extraño,y tan cerca. 

-Bonito, lo he intentado como quinientas veces y nada, tengo que avisar a recepción, pero gracias. 

No puedo ocultar mis pocas ganas de hablarle. 

-Dejamela, bonita. 

Haciendo caso omiso a su pique le dejo la tarjeta en la mano.

Intentalo guapo, que ya veras. 

-Listo, ya puedes pasar.

Con 0 credulidad giro mi cabeza hacia la puerta e incapaz de creer lo que estoy viendo camino un poco hacia ella. 

-¿Cómo la has abierto? 

-Con paciencia, y el código que tiene detrás. 

Giro la tarjeta que ya me ha devuelto y ciertamente veo tres números. 

Nunca las he abierto, siempre lo hacía Isma cargado de las maletas. 

-Bueno, gracias.

-De nada, soy tu vecino por cierto, estoy en la 440. 

-Guay, adiós.

En otras ocasiones le hubiese dado mil y una gracias,incluso invitado a tomar un café por la mañana,pero hoy no. 

Entró a la habitación y escucho la risa del extraño, debe estar pensando que soy una borde.

Solo quiero descansar, hasta el 2090.

Hasta que pase el dolor del todo. 

Por favor.
________________________

Espero que les guste!
Es una especie de nuevo proyecto.
♡♡♡

441Donde viven las historias. Descúbrelo ahora