Día 1: Agarrados de las manos.

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No era ningún secreto que para aquel alegre niño del pequeño pueblo de Karmaland, no había cosa mejor que pasar la tarde pescando, y como no, en esas cálidas horas vespertinas haría aquello, corriendo con su caña en manos a su sitio favorito, junto a la que era la casa de su amigo Vegetta.

Frenó en seco al notar otro infante allí, sentado en la arena mientras observaba el brillo del sol reflejar en el agua cristalina.

— ¿Reborn? —Se atrevió a soltar, atrayendo inmediatamente la atención de aquellos ojos heterocromáticos. —Creí que no vendrías. —Volvió a hablar, esta vez en un tono más suave, volteando su cabeza, intentando ocultar ante aquellos hermosos ojos su pequeña sonrojes, pues realmente le sorprendía verlo allí.

—¡Auron! Pero si te prometí que te ayudaría a buscar ese libro. Seguro podrás encantar tu arco y ayudar a tus padres con los mobs. —Alentó, sonriéndole.

Y no faltó más para que en su rostro se pintara una sonrisa igual que al mayor de los dos pequeños.

—¡Si, hagámoslo!— Y en un ataque de euforia, elevó su caña.

—¡Auron, no hagas eso, que te puedes lastimar!— Corrió junto a este, sacándole su caña.

—Ups, perdona. —Rio nervioso, notando la preocupación en los ojos contrarios. —Prometo no volver a hacerlo. ¿Me devuelves mi caña? —Sonrió con notable arrepentimiento, extendiendo su mano.

Y Reborn se detuvo a pensarlo, pues de los dos, era el más consciente, aún así, confiando en Auron, le devolvió aquella simple caña de pescar.

—Lo vuelves a hacer y juro que no tocas una caña de pescar en tu vida. —Amenazó, robándole una carcajada al más bajo.

—Vale, vale. Vamos a por ese libro.

Y ambos se acercaron a la costa, hasta que Auron, que seguía a Reborn, notó algo.

—O-oye, ¿A donde vamos?— Preguntó, temeroso de que sus sospechas fueran ciertas.

—Pues a aquella isla, es donde suelo pescar mejores cosas. —Explicó sin más, apuntando a una pequeña isla que conectaba por un puente de algunos metros, al cual, Auron poseía cierto miedo de utilizar, aún sabiendo que las posibilidades de caer eran mínimas. Pero claro, jamás le había contado nada a su amigo, pues creía que le vería mal por temerle a tal cosa. —¿Sucede algo?— Cuestionó, al notar cierta duda en los cafés de aquel chico.

—Es que... n-no sé si pueda.— Confesó, bajando su mirada apenado.

—¿Por? ¿Tienes algo?—Volvió a preguntar, acercándose un poco a Raúl, temiendo de su estado.

—No, no. Digo, si, pero no me sucede nada, tranquilo. Solo... ¿No podemos pescar aquí? Seguro que pescamos algo. —Ofreció, intentando evitar el tema. Realmente no quería parecer un miedoso ante Reborn, no ante él.

—Si así lo quieres, esta bien, no pienso obligarte. ¿Pero puedo saber porqué?— Le sonrió, como si aquella dulce sonrisa transmitiera toda la confianza necesaria para contar cada uno de sus temores.

Pero claro, todo se complica cuando a quien piensas en contarle aquello es Reborn, a quien por alguna razón, le tenía un mayor aprecio. Lo menos que quería era que pensase algo mal de él. No sabía porqué, más bien, no entendía, pero siempre lo quería a su lado, por eso, era el primero en quien pensaba para invitar a todo lo que hiciese. Compartían mucho tiempo juntos, y no se imaginaba sin pasar tardes jugando junto a él, así que, el que supiese de sus miedos, era algo que en cierta parte le preocupaba.

E iba a decir que no, hasta que miró fijamente sus brillantes orbes, joder, Auron, no puedes decirle que no o mentirle a él.

—Le tengo miedo...— Susurró, siendo suficientemente audible para el alcance del más alto, que confundido le observó.

—No entiendo, ¿A qué?

—A cruzar... Me da miedo el puente. Siento que si camino sobre él, caeré.— Y se preparó, se preparó para verle reírse en su cara de su tontería, por lo que un semblante triste se iba asomando en su rostro.

Más este cambió en uno confuso al verle sonreír, pero más que burla, era... ¿ternura?

—Aw, eres adorable. —Se acercó, tomando la mejilla de Auron para apretar esta, sin causar dolor. —Me lo hubieras dicho antes. —Quitó su mano de allí, extendiéndola ahora frente a la más pequeña. —Ven, toma mi mano. Verás que no pasará nada.

Auron miró aquella mano con pequeñas cicatrices, consecuencia de aventuras que junto a sus demás amigos habían vivido, y dudoso, volvió a juntar sus miradas. —¿Seguro? —Tras ver un asentimiento con total confianza, tomó su mano. —Venga, confío en ti. —Ambos se sonrieron, partiendo ahora a aquel puente.

Reborn no tuvo problema en pisarlo, pero sintió como su mano era sostenida con mayor fuerza cuando Auron dió una pisada en aquellos tablones, observando el agua bajo suya, temeroso.

—Oye, no veas abajo, solo mírame, ¿si? —Le sonrió, brindándole, la que a vistas de Raúl, era la cosa más alentadora del mundo.

Y ya con más confianza, avanzó, quedando en su totalidad sobre aquel puente.

Se detuvieron allí unos momentos, en donde el silencio reinaba, siendo el único sonido las pequeñas olas que chocaban y los pájaros cantando.

Raúl respiró con tranquilidad.

Y por alguna razón, una risa se escapó de sus adentros al notar como nada de lo que su mente imaginaba, sucedía. Se encontraba bien, y aún mejor, junto a Reborn.

Quien al verle, también rio, pues para él, no había imagen más adorable que Auron, aquel niño de ocho años, enfrentando su miedo con una sonrisa y sosteniendo su mano.

—Ven, vayamos de una vez a por ese libro.— Habló el de mechón de flama, tomando la iniciativa para ser él quien los guiase, medio que arrastrando a Reborn. Quien no hacía más que reír por su rapidez para enfrentarse a aquello.

—¡Allá vamos!— Le siguió, terminando de cruzar el puente para llegar a aquella pequeña isla donde antes solía pescar en soledad, siendo ahora acompañado por quien él consideraba; el mejor ser del universo.

Y allí pasaron el resto de la tarde, pescando libros y lo que fuese trayendo la corriente, entre risas y momentos que quedarían en la memoria de ambos niños.

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Quiero dejar en claro, que, como son niños, aún no comprenden bien lo que sienten, por eso, lo dejo como "un cariño mayor que al de los demás". Espero les haya gustado y gracias por darle una oportunidad a esto ♡︎.

𝐌𝐎𝐍𝐓𝐇 𝐑𝐄𝐁𝐎𝐑𝐍𝐏𝐋𝐀𝐘. (Paused)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora