Vendrías, ¿verdad? [JIKOOK] Parte II

Prólogo

Se levantó de la cama después de muchas horas dando vueltas, intentando dormir, y buscó en su mesita de noche el diario que guardaba, desde hacía algunos meses, pero que nunca se había atrevido a empezar.

Ni siquiera estaba seguro de porqué lo compró, si ya hacía muchos años que no escribía. Quizás porque le pareció bonito el diseño, o quizás porque sintió que algún día lo necesitaría.

Así que se amor de valor, cogió un bolígrafo de su escritorio, volvió a tumbarse en su cama, lo abrió por la primera página, y comenzó a escribir.

════════════════════════════

15 de noviembre de 2019

Querido diario,

Jungkook se ha ido de casa.

Y yo no sé realmente porqué estoy haciendo esto.

Hace años que no escribía mis pensamientos, pero hoy he sentido de nuevo la necesidad de desahogarme.

Estoy tumbado en mi cama, a solas y sin poder dormir. Lo hizo esta mañana, después de una fuerte discusión que tuvimos ayer y que acabó en una precipitada ruptura.

Pero yo no quería dejarlo, solo quería que de una vez por todas me diera mi lugar y dejara de esconderme y de escondernos.

Supongo que pedía demasiado, que quizás él no sentía tanto por mí como yo pensaba. Quizás el amor se le acabó y solo aprovechó mi enfado para huir de una vez por todas.

Lo he llamado varias veces, a pesar de que me siento idiota haciéndolo, y ni siquiera me coge el teléfono. Pero, ¿qué puedo hacer? Si sigo tan enamorado de él como lo estoy desde el día en que me sonrió de aquella manera, cuando me vio entrar empapado en el autobús volviendo de la universidad.

Si tan solo pudiera dar marcha atrás, si pudiera volver a vivir ese instante...

Mil veces me engaño diciendo que habría hecho las cosas de otra manera, que no me habría enamorado de alguien con tantos demonios, aunque en el fondo sé de sobra que las habría hecho exactamente igual, porque jamás me sentí tan vivo como cuando me sonrió por primera vez.

Esos enormes ojos, tímidos, profundos y expresivos me robaron el corazón al instante. Y ahora que se ha ido, ¿cómo sigo viviendo sin él?

Me temo, querido diario, que tú vas a ser mi mejor compañía durante este duelo. Espero que seas lo suficientemente resistente para aguantar mis lágrimas y mis frustraciones.

Sé que el camino será largo, pero si él ha decidido irse, solo él mismo podrá volver.

════════════════════════════

Lo cerró y lo soltó en su mesita de noche, volvió a acurrucarse entre sus sabanas y rompió a llorar en silencio. Lo echaba de menos, demasiado, y no sabía que hacer para dejar de sentirse así.

Solo esperaba que realmente escribir ese diario pudiera ayudarlo a seguir adelante.