6-la fiesta

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Por fin llego el día, hoy era sábado. Hoy sera la fiesta de Kim, espero pasarmelo genial.

Lo que mas me a extrañado es que Laura y sus amigos me llamaran para decirme que si que querían ir.

-Estas ya Lydia, nos vamos.

-Ya bajo tranquila.

-Estas preciosa-mdijo ginger

-Gracias tu estas genial también

-Vamos pesadas dejar de decir lo geniales y preciosas que estáis y subir ya al coche-nodijo su hermano.

-Ya llegamos.

-Vamos felicitar Kim -dijoGinger

-Si, vamos-la respondió

-¡¡¡¡¡¡!FELICIDADES!!!!!!-gritamos las dos la vez al llegar donde estaba Kim

-¡¡¡¡GRACIAS!!!!!, pero no hace falta gritar

-eso nos lo dices gritando

-Era paraqueosenterarais. Lydia ¿alfinalveniatuhermanaconsusamigos?

-Si, mellamoestatardediciendoquesi venia.

-¿vienen sus amigos?-preguntoGinger

-Si, me llamo Christian para decirme que venían, asíque siquevienen.

-Christian el que va a clase de ingles y de literatura con nosotras.

-Si, ese Christian

-Esta buenisimo, nose porque no esta en el equipo de futbol con los populares.

- Nose alomojor no le gusta eso de llamar la atencion-dijeyo

- Bueno cada uno tiene sus cosas-dicKim moviendo los hombros-Vamos bailar y a disfrutar que ya tendreis tiempo de hablar tonterías.

Estaba bailando con Kim, Ginger y Sky, cuando de repente unas manos agarran mi cintura y una cabeza se posa en mi hombro.

-Estas preciosa, ¿lo sabias?-dijo Sergio

-Gracias, tu también estas genial-le respondi.

-¿Quieres tomar algo?

-No, gracias

-¿Estas segura?

-Bueno vale, tomare algo.-y diciendo esto le quite la botella de las manos y le di un trago.

Despues de bebernos la botella entera me llevo hacia una esquina de la sala en la que estabamos. Empezamos a bailar y cada vez estabamos mas cerca. Sentia su calido aliento en mi rostro. Comenzo a acercarse a mis labios y en ese instante sus labios se posaron sobre los mios, dejandome disfrutar el sabor de sus labios. Nuestros labios se movian en sincronia, empezo a bajar la mano que tenia en mi cintura. Estuvimos asi un rato hasta que seti que me quedaba sin aire. Cuando nos separamos y abri los ojos lo primero que vi fue el rostro sorprendido de mi hernana.

cosas del destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora