Heart of Glass ; Yoonmin [EDITANDO]

XII

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Un relación amorosa va por pasos o por lo menos eso fue lo que aprendió de los libros románticos que leyó cuando joven, primero se conocen y se dan cuenta que hay química entre ambos, salen a citas, se toman las manos, son novios y con el tiempo viene el sexo, pero quizás esto no aplicaba para ellos.

Sonrojado devolvió el fogoso beso que se le había dado, con su respiración errática intento hablar; — debe- deberíamos subir — logró articular entre besos —, a mi habitación.— aclaró.

¿Cómo habían llegado a eso?

Luego del dulce beso que compartieron en el parque de diversiones, ambos habían deseado seguir pero su trayecto había finalizado y tuvieron que bajar de la rueda de la fortuna, Jimin le había dicho que ya se estaba haciendo tarde y que sería hora de volver a casa, Yoongi asintió y fueron a casa del pelirosa, ahí ambos se quedaron en silencio, sin saber que decir pero fue Jimin quien rompió el silencio con un beso. Jimin besó al mayor quién al principio quedo impresionado por el acto pero luego devolvió el beso con más ganas, sus bocas estaban ansiosas por más contacto que no se separaron por varios minutos en donde exploraban sus bocas con vehemencia. Decidieron entrar a la casa del pelirosa ya que la noche estaba un tanto fría y no quería dar un show ahí mismo.

Y eso los llevó a donde están ahora, besándose fogosamente en la sala de la casa de Jimin.

En el ambiente era notable la excitación y el calor que sus cuerpos emanaban.

Yoongi asintió pero no subió, en cambio llevó a Jimin hacia el sofá que estaba en la sala, lo dejo sobre este y comenzó a besar su cuello e intentando bajar más pero la ropa no se lo permitía, bajo más su cabeza y levantó la ropa del menor, dejando ver su abdomen en donde depositó más besos y alguna mordida.

Jimin jadeaba cada vez más fuerte, llevó mano al cabello de Yoongi y acarició de el, amaba lo que estaba haciendo pero quería más.

—Yoongi — jadeó necesitado.

Yoongi sonrió, estaba tan cerca de la entrepierna de chico, sabía, el sabía lo que quería.

—¿Quieres más?

—Sí, por favor.

No necesito más, bajó más su cabeza hasta llegar al botón del jeans, con ambas manos lo desabotonó hábilmente y bajo lentamente de su pantalón, Jimin levantó un poco la cadera ayudándole y así quedando solo en ropa interior, Yoongi besó su entrepierna por encima de la ropa para luego llevar sus frías manos al inicio de esta, tomando el elástico entre sus dedos, jugando un poco con la cordura del menor, entonces poco a poco comenzó a bajarla liberando a Jimin de su tortura. Volvió a subir hasta llegar a la boca de Jimin y lo besó vehementemente, lamiendo su labio inferior para luego morderlo un poco sin llegar a dañarlo, su mano bajó al miembro de Jimin y lo rodeó con sus dedos, subiendo y bajando lentamente su mano haciendo a Jimin gemir sobre sus labios. Mordió nuevamente el labio inferior del chico, era adicto, los labios de Jimin eran hermosos y dulces, se alejó de su boca y bajó su cabeza hasta la entrepierna del menor donde sin pensarlo de más, metió el miembro en su boca y lamió con vehemencia, escuchando a Jimin gemir más y más fuerte a la par que tironeaba de su cabello.

De vez en cuando paraba para lograr respirar correctamente, quería hacer sentir bien a su chico. Jimin tiró fuertemente de su cabello haciéndolo levantar la cabeza y mirarlo, era un completo desastre, estaba sudado, sus mejillas estaba sonrojadas al igual que sus labios por haberlos mordido anteriormente.

–A mi habitación— pidió, más bien, exigió— Vamos, Yoongi. – logró decir, su respiración era errática.

Yoongi asintió, subió de sus pantalones como pudo y  llevando sus manos a la parte trasera de los muslos de Jimin y dando un leve apretón, Jimin comprendió el acto y llevó sus piernas a la cadera de Yoongi y las entrelazó para este comenzar a caminar y subir a la habitación de Jimin.